Él la recostó contra la cama y abriendo sus piernas exploró el punto que necesitaba más atención, sin dejar de mirar su rostro se deslizó hasta el centro de sus piernas y con la lengua la torturó dulcemente, estremecida Tabbee arqueó su espalda y las caderas se tambalearon circularmente buscando sentirlo aún más.Haciendo su deseo realidad introdujo uno de sus gruesos dedos en su abertura mojada y Tabbitha quiso atraerlo a ella y aferrarse a su cuello, lo necesitaba tanto.Había tenido miedo de casarse por temor a Liam, pero ese día al ver a su Chris ahí esperando por ella fue cuando comprendió no pertenecía a otro lugar que no fueran sus brazos.-Di que eres mía Tabbee -Gruñó para después lamer su clítoris.-Dios sí Chris, soy tuya, te necesito, ven aquí.Él la obedeció y casi comió su boca en un beso arrebatador.-Te amo Tabbee, desde el primer momento.-También te amo, tenía miedo de confesarlo pero no voy a esconderlo más, te amo, te amo tanto.Chris la besó una vez más y con una
Amedea la miró como si se acabara de dar cuenta de que había cometido un error y después de un largo silencio ella al fin respondió.-Cariño, quizás esto sea muy difícil para comprender pero... ¿Me imagino que sabes sobre la caída de los nazis, verdad?Ella no entendió de qué iba Amedea pero asintió de todas formas.-Bien, lo cierto fue que los humanos no llegaron a saber muy bien cuáles eran los experimentos que habían creado ellos... se sabía que experimentaban con personas pero no de que manera.La cabeza de Katryna comenzaba a doler debido a sus balbuceos sin entender aún a donde quería llegar Amedea.-Lo cierto es que, estamos en medio del bosque en un pequeño pueblo creado por esos experimentos creados por los nazis. Ellos son... cambiaformas, hombres que cambian a algún animal.Inevitablemente ella dejó escapar un gemido incrédula pero Amedea no detuvo su relato en ningún momento.-No debes temer de ellos Katryna, no son malos, ni bestias que busquen dañarte, son personas como
Katra frunció el ceño contrariada.Ningún hombre se fijaría en ella, lo sabía pero ir a bailar no tenía nada de malo, quizás se divertiría un rato.Cuando fueron las ocho y media Amy apresuró a Katryna para dejar a Ayden con una hembra cambiaformas y poder ir a bailar, Erika estaba encantada de cuidar al pequeño bebé y con una inmensa sonrisa despidió a Amedea.Más tarde, el lugar estaba atestado de gente y al momento de entrar todas las miradas se dirigieron a la nueva cara del pueblo.Katra se sintió completamente intimidada ante el atrevido escrutinio y Amy se dio cuenta de ello, soltando una risita tomó el brazo de su hermana y se encaminó hasta la mesa de una pareja, el hombre era aterradoramente serio pero sumamente guapo y la mujer era encantadora y adorable, polos opuestos.— ¡Angie, Hola! Damien.—Hola Amy —dijeron al unísono.—Esta es Katryna, mi hermanita.La sonrisa de Ángela se extendió mientras que Damien la miraba sin ninguna emoción, el chico era verdaderamente aterrad
Él volvió a gruñir sin dejarla ir, entonces los vellos de los brazos se Katra se erizaron.No quería causarle problemas a su hermana recién llegando, debía apartarlo.- ¡Suéltame! -bramó enfadada.Se removió histérica en sus brazos pero no pudo conseguir más que él se aferrara a su delgado cuerpo y el roce de su miembro con su cadera.Involuntariamente Katra soltó un jadeo ahogado que hizo que los hermosos ojos verdes del hombre brillaran en satisfacción.Fue allí cuando una devastadora sonrisa apareció en su boca dejándola anonadada.Sin tener tiempo de decir nada más lo escuchó.- ¿Eres así de explosiva y salvaje en la cama, gatita? -Dijo con picardía mediante un gruñido.La rubia alzó la mano con la intención de darle una cachetada sin embargo él atrapó su mano en vuelo y su sonrisa se extendió irritándola aún más.-Definitivamente me encantan las hembras como tú.Nerviosa Katra intentó una vez más soltarse pero como la vez anterior no pudo.De un momento a otro el hombre se había
—Aún no amor, voy a tenerte en mi boca primero.Enseguida succionó sus pechos y Katra se arqueó dándole todo lo que tenía, cuando ella se frotó contra su erección él optó por abandonar sus inflamados senos apretando la mandíbula para contenerse y no llenarla como desesperadamente quería. Su lengua chupó y mordió cada parte de su piel desde la cabeza a los pies ignorando por el momento el centro caliente de Katra el cual necesitaba absoluta atención mientras que sus manos hacían magia sobre sus senos.Cuando Wild volvió a estar cerca de sus muslos ella comenzó a temblar pues ya sabía lo que le esperaba y estaba deseosa por recibirlo.Llevaba queriéndolo desde que él había puesto sus manos sobre ella, lo que Katra no se esperaba era que su lengua húmeda se sintiera tan bien lamiendo su néctar, gritó cm poseída cada vez que él indagaba en su interior, sus dedos mágico habían abandonado sus solitarios pechos para golpear con estos su clítoris mientras que él devoraba con placer su calor.
Wild.Y que bien lo llevaba, el hombre era salvaje en la cama como ningún otro con el que hubiera estado antes.Rich dio la vuelta en la cama arrastrándola con él colocándola encima para luego dedicarse a mimarla acariciando las ondas de su cabello rubio sin mediar palabra alguna.Cinco minutos después Katra se levantó de encima de él buscando con la mirada su ropa, no podía permanecer por más tiempo ahí tendida aunque se sintiera en absoluta tranquilidad.¿Qué pensaría Amedea de su desaparición?Pero pronto lo sintió a su lado apresándola con sus fuertes brazos haciendo que ella se sintiera como gelatina entre sus dedos.Definitivamente aquel hombre tenía algo que la encendía, que la tentaba incluso ocasionaba que olvidara la vergüenza bajo su mirada.-Yo... no sé porque hice esto, no te conozco, no...Katra enrojeció visiblemente y trato de zafarse de él.Está vez Rich la soltó entonces se dejó caer en la cama cruzando sus brazos tras su cuello sin dejar de mirarla mientras se vestí
Él.Tan guapo y alto como lo había visto la noche anterior.El horror brilló en los ojos de ella, no obstante él no sonrió como solía hacer siempre, por el contrario, parecía confundido así que miro de pies a cabeza a Katra, a continuación sonrió con malicia y dio un paso hasta ella.- ¿Qué haces aquí?Sus ojos seguían en ella pero Amedea lo interrumpió con el ceño fruncido.- ¿Se conocen? No me lo habías dicho Katryna, arruinada mi sorpresa -Dijo haciendo un puchero antes de sonreír burlona.Nuevamente a él se le borró la sonrisa y dejó de caminar blanco como un papel.- ¿Katryna? -Preguntó sin aliento.Amy lo miró confundida antes de hablar.-Si Katryna, es decir, Katra de quien te hablé... ¡Tu tía Rich!El aire de repente escapó de los pulmones de ella, se sintió mareada entonces todo se tornó negro y no supo de nada más.¿Qué había hecho?*Katryna despertó con la cabeza dolorida sin abrir los ojos llevó su mano derecha hasta la frente entonces se dio cuenta de que no estaba sola
¿Solo ella estaba martirizada por su pecado?Katryna lo dio por hecho sintiendo una punzada en su pecho.Fue allí donde dio media vuelta y salió del lugar, ya buscaría a Adriano el próximo día, esta noche solo quería... olvidarse de él y dormir por horas.Apresuró el paso hasta que escuchó unos pasos detrás de ella, giró vislumbrando a un hombre cambiaformas con aspecto aterrador pero increíblemente hermoso y con ojos café casi rojizo que la hicieron dar un paso atrás.—Tranquila —se apresuró a decir él con voz trémula—, te seguía para asegurarme de que llegaras bien a casa.— ¿Por qué no llegaría bien? ¿Acaso hay algún peligro que yo desconozco? —preguntó con desconfianza.El hombre dudo pero dio un paso más hasta ella y Katra se mantuvo firme y alerta.—Parecías acongojada antes, no quería que nada te perturbara.Ella contuvo una sonrisa ante sus palabras.Que dulce.—Entonces ¿Me acompañas a casa? —preguntó ya más confiada.El macho le sonrió asintiendo y ambos caminaron juntos en