Ailín
He estado unos días de viaje, aunque no lo parezca soy una mujer muy activa y tengo negocios en diferentes partes del mundo. El ser Contadora con un máster en Economía de Riesgos Empresariales, me ha llevado a invertir en muchos negocios. Otros simplemente los tengo por ayudar a mujeres de bajos recursos o con familias monoparentales. Estoy metida en mi ordenador y suena el teléfono.
-Ciao (hola).
-Ciao bella (hola bella).
-Cuando me dices así no es para nada bueno. - levanto la vista suspirando y la poso en el techo de mi despacho, ya que el otro lado de la línea se había quedado en silencio. - ¡Virgen santísima Sam, dime qué ocurre o mejor dicho en qué quieres que te ayude esta vez! - suelto impaciente.
-Mmmm…Ailín…no sé cómo decírtelo, me conoces tan bien…es que Carlo ha tenido un accidente de coche y Gianna está con él en el hospital; por lo que no tengo a nadie que cubra la barra hoy.
-Y quieres pedirme que lo haga yo, ¿verdad?
-Sí amiga, es que eres muy buena en todo y a esta hora no conseguiré quien venga.
-Tampoco exageres que no soy buena en todo. Simplemente he querido valerme por mí misma y trabajar para pagar mis gastos cuando estudiaba. Por eso sé atender una barra y mantener a raya a los borrachos. - no me gusta que piense cosas que no son. He sufrido mucho siendo obligada a aprender sin quererlo.
-¿Eso significa que lo harás? - dice esperanzada.
-Si, lo haré. - contesto conteniendo una sonrisa.
-¡¡Yey!! Ti voglio bene amico (Te amo amiga).
-I ja tebe volim, prijatelju (Yo también te amo amiga).
-Adoro cuando me hablas en croata, casi nunca lo haces. - se la escucha feliz.
-No tengo por qué - digo sin emoción y con la voz dura-. Venga nos vemos a la noche; pero te advierto que no beberé, mañana debo hacerme una revisión total que incluye ginecología y necesito estar descansada.
-¿Te pasa algo? No me asustes.
-Tranquila, es de rutina y para ver qué método anticonceptivo debo tomar. Sabes que los meses que ovulo doble me muero de dolor y el sangrado es muy abundante. Necesito regular mis hormonas. - le explico.
-Ahhh…ok...se me había ido la mente a otra parte. Como que tenías pareja. - pongo los ojos en blanco con sus ocurrencias.
-¡Qué pareja ni qué ocho cuartos! No tengo tiempo ni ganas para eso. Adiós Sam. - cuelgo, no estoy de humor para tonterías.
Estoy en la barra del club y todo ha funcionado bien. Ya estamos por cerrar cuando unos hombres de entre 25 y 30 años se acercan a la barra, comienzan a insinuarse por lo que los corto de plano. No paso desapercibido que para uno de ellos no ha sido agradable mi mal genio, pero eso a mí no me interesa. Me piden unas copas, luego de pagar, uno toma mi mano y me jala con fuerza. Como no lo vi venir me he golpeado el pecho y las costillas, ¡joder cómo duele!
No me puedo controlar y reacciono como normalmente no lo haría. Con mi mano libre lo tomo del cuello estampando su cabeza contra la barra con todas mis fuerzas, al momento me suelta y de un salto paso hacia el otro lado. Su otro amigo trata de agarrarme, pero me giro agachando el dorso de mi cuerpo; le doy una patada de revés, cae al suelo aturdido con sangre sobre su boca. Remato con una patada en el pecho, queda desmayado al caer hacia atrás y golpearse la cabeza en el suelo…obviamente le he partido el labio con mi primer golpe.
Me giro hacia el que está en la barra apretándose la frente por la brecha que le he hecho al golpearlo. Le hago una llave haciendo que quede de rodillas con la cabeza a tierra, pongo una rodilla en su espalda y presiono con fuerzas sintiendo cómo se queja del dolor. Una leve sonrisa surca mis labios, me siento complacida. Al momento llegan los de seguridad. Las personas se han quedado paralizadas, nunca han visto tal despliegue en una mujer que parece no matar a una mosca.
-No necesito ayuda, pero ya que están aquí…¡quiero que los saquen y les prohíban la entrada! - estoy furiosa.
-Como usted mande señora. - dicen con los ojos como platos.
-¡Y vosotros a ver si aprendéis a tratar a las mujeres, pedazos de escoria! Un NO es un NO. Que esto les sirva de lección.
¡Llevenselos! - digo bien indignada. Hacía mucho que no me sacaba de onda de esta manera. Y eso me pasa por pensar en ese hombre que me trae de cabeza desde que lo conocí. Bufff..
-Amiga...mmm…¿ee..estás bii..enn? - dice Sam temerosa.
-Perfecta Sam. Nada como una buena descarga de adrenalina. - digo levantando mis hombros.
-No sabía que peleabas…- la noto contrariada.
-No peleo Sam, es defensa personal. Todas las mujeres deberían saber algo de eso, así no habría tantas maltratadas y sometidas en el mundo. - digo con rabia y luego me arrepiento al verla a los ojos.
-En eso te doy la razón, pero verte en ese estado y la expresión de tu rostro me ha asustado. No parecías tú. - si eso te ha asustado, cuando sepas quién soy te meas encima.
-Pero era yo, así que ya sabe a lo que se atiene el que desee meterse conmigo. - Sam comienza a reírse con muchas ganas y la verdad no sé por qué.
-Eres lo máximo amiga y una cajita de sorpresas...jajajaja…- ríe y giro los ojos, no le veo la risa.
-Mientras tú te sigues riendo a mi costa yo me retiro que mañana tengo que estar a primera hora en la clínica y no quiero más problemas por hoy. - sin mediar palabra cojo mis cosas y me voy a casa. Ha sido un día raro y más cuando sentí un escalofrío recorrerme el cuerpo, como si alguien no dejara de observarme. Creo que estoy paranoica.
NikolayCuando entramos al Club me voy al reservado ya que necesito sacar todo lo que llevo dentro follando. Viktor y Aleksei se quedan en la zona Vip, tiene unos barandales que dejan ver la pista de baile y la barra principal, siempre la atiende un chaval con una chica que parece su novia. Hacen bien su trabajo, aunque la verdad no me interesa.Pido dos bellezas exóticas para que me hagan un baile privado y luego me den placer. Mientras me las estoy follando no puedo dejar de pensar en la dama misteriosa que últimamente ocupa mi mente. Embisto a la morena fuertemente una y otra vez, gime y grita como una poseída mientras se corre temblandole todo el cuerpo, luego de unas embestidas más logro liberarme pero no estoy saciado por lo que salgo de ella, me quito el preservativo y coloco otro.Cojo a la rubia, le hecho lubricante en sus partes y esta vez la embisto pero por el ano. Disfruta mientra
AilínMe levanto bien temprano, me ducho y cuando estoy lista salgo para la clínica. Llevo dos días con molestia en los ovarios, de seguro estoy ovulando porque mi ánimo es una montaña rusa. Así como estoy bien, me encuentro irascible, no me soporto ni yo…cómo estaré para pensar eso…me río sola de mis cavilaciones, pero es la verdad. Espero que los análisis salgan bien así en dos semanas y pico cuando me baje la regla podré comenzar el tratamiento con pastillas y evitar estos cambios hormonales que no son buenos para mi faena. No puedo darme el lujo de ponerme en evidencia como ayer, si no fuera por estas subidas y bajadas hubiera llamado directamente a los de seguridad. Pero no, tenía que dejar salir la fiera que llevo dentro. Arrgg…suspiro moviendo la cabeza, ahora ya no puedo hacer nada. Debo controlar mi temperamento, debo volver a lo
Nikolay -Jefe, ya tengo todos sus datos. Te dejo la carpeta para que veas la información que sale. No es mucha pero basta. -Gracias Aleksei, ahora lo miro. Sale de mi despacho y comienzo a ojear la carpeta. Su nombre es Ailín De Santis, italiana, 26 años, padres muertos, sin hermanos ni familiares conocidos…mmmm...eso es bueno, así nadie te buscará…contadora y economista de riesgos empresariales. Tiene varias empresas en diferentes países y vive sola. Se ha forjado un imperio por mérito propio, cada día me asombras más "Тигрица" (tigresa). ****** Me encuentro ansioso, han pasado dos semanas y hoy por fin la tendré conmigo. He dejado que sean Viktor y Aleksei quienes se encarguen del secuestro, prefiero quedarme ultimando detalles para cuando llegue. Paso el día ocupado en mis negocios cuando me llega un mensaje diciendo que ya la han subido a l
NikolayDesde que Ailín llegó la estoy observando con el ordenador de mi despacho. Es tan linda cuando duerme…veo que despierta y se encuentra desorientada, gira su cabeza de un lado a otro y de presto se toca su frente como si pensara.La oigo gritar: ¡¡Hostia puta!! ¡Me han secuestrado!Mueve su cabeza y su respiración parece un maremoto. Cuando creo que comenzará a ponerse como loca, golpeando la puerta para que la dejen salir, desarmando toda la habitación, hace lo contrario.Va hacia el lavabo y cuando sale se sienta en la cama apoyada en el respaldo y con sus piernas cruzadas. Lo veo y no lo creo…ni un grito, ni una lágrima, nada. Debo decir que eso no me lo esperaba, me desconcierta un poco, como todo de esta mujer. Esperé unas horas para
NikolayTodos se han retirado dejándonos solos. Voy a decirle algo y levanta un dedo diciéndome que espere. Su audacia me tiene loco, ¿cómo se atreve a hacerme callar levantando un dedo?Saca de un horno un par de lasagnas y del otro dos tortas que parecen de zanahoria. Apaga los fuegos y deposita todo en la mesada encima de una tabla. Limpia la isla y ya me está entrando de todo por la insolencia de esta mujer al dejarme con la palabra en la boca y ponerse a limpiar sin más. Se lava las manos y quita el delantal.-Ya estoy lista Nikolay, ahora podemos hablar tranquilos. - habla calmada .-¡¿Quién te has creído para desautorizarme delante de mi gente?! - le digo con voz fuerte.-Me creo lo que tú has dicho, que soy tu mujer. Como tal, estoy organizando al servicio y ayudando en los quehaceres. Me gusta co
AilínAquí estoy sumida en mis pensamientos gracias a este hombre que me trae de cabeza. Luego de darme un beso y desarmarme por completo con lo que me dijo, se fue. Salió de la habitación como alma que lleva el diablo. Creí que vendría más tarde pero estaba muy equivocada.A la noche entró un guardia y me dijo que Nikolay había salido de viaje por unos días. Al escucharlo se me encogió el pecho, creí que podría verlo y estar un rato con él, así fuera para sacarlo de quicio, pero no; se había ido dejándome un mal sabor de boca y un agujero en el estómago. No sé por qué me siento así, es algo que me descoloca y me hace querer llorar, pero no lo haré. No puedo mostrar debilidad ante nadie, de eso depende todo mi negocio.-¿Cómo te llamas? - le digo al gorila
AilínEscucho con atención pero sin demostrar demasiado interés, no quiero que sepa que entiendo ruso, en realidad hablo y escribo perfectamente 7 idiomas. Aunque me pese, debo agradecer a mis padres por esto.-"¿Сказать? " (¿Diga?).-"Находится в подвале" (Está en el sótano).-"Через 5 минут я там" (En 5 minutos estoy ahí).Pero, ¡¡qué mierda!! Como haya llevado a Marko al sótano para golpearlo por el beso, se va a enterar quién es Ailín De Santis.Lo miro, acaricio con una mano su rostro, paso mi dedo por su labio inferior, me muerdo el interior de mi mejilla mirándolo con ternura y le digo que vaya si lo necesitan. Asiente y sale de la cocina rumbo al sótano.Voy c
NikolayCuando llego al sótano mis hombres han dejado bien preparado al lacayo del Dragón, lo han amarrado a una silla con sus muñecas bien atadas a los posabrazos y sus pies descalzos fijos a las patas de la misma.Está bastante golpeado, pero no ha dicho nada. Para lo charlatán que estaba en Bélgica, ahora está bien mudo. Muevo la cabeza y doy la orden de cortarle una oreja. Sigo el interrogatorio pero no obtengo respuesta, así que le digo a uno de mis hombres que le corten un dedo. Le comunico que cada pregunta sin contestar le costará uno, levanta los hombros en señal de que no le importa y prosigo.Luego de cortarle tres entre las dos manos y cuatro de los pies paso a ordenar que le arranquen las uñas de los dedos que le quedan. El cabrón tiene aguante porque sigue firme sin decir nada y me desafía con la mirada.Esto me demuestra qu