AMELIE.
–Estas bromeando, ¿no?– la incredulidad en la voz de Joshua era notoria.
–No, es verdad– los mire a todos. –Entrenaremos con mi familia.
–Amelie, sé que a tu familia se le da bien luchar contra ejércitos, pero– comento Leah. –somos adolescentes, no unos malditos superdotados.
–Nos patearan el trasero en 3 segundos– soltó Cam. –Tal vez menos.
Reí. –Solo quieren que estemos listos, ellos tampoco saben a lo que nos enfrentamos, y es mejor estar preparados.
–Algo me dice que se van a ensa&nti
RAINER.–No te lo devolveré, hasta que tengas otra idea que no sea suicida– dije manteniendo en alto el grimorio.–no es una idea suicida, es el plan que teníamos hace un tiempo, Russell creía que ese hechizo nos puede ayudar.–Hace menos de una hora hablamos con Russell y sugirió que buscáramos otra alternativa para combatir a la oscuridad, así que busquémosla.–No tenemos tiempo– salto para intentar agarrar el libro. –Rainer Sanderson, estoy hablando enserio.–Yo también, te he perdido momentáneamente dos veces, no pienso buscar la tercera.
RAINER.–Rainer, Rainer– susurro alguien mientras movía mi hombro, abrí los ojos.–Kelsey– dije, despertando un poco más. –Lo siento.–Estas agotado, es normal– las castaña sonrió ligeramente. –Ten, el café es un buen amigo en estos casos.–Gracias– recibí la taza humeante.–¿Cómo va la herida?–Ya está curada por completo, pero gracias por la ayuda– toque la venda por sobre la polera. –Esa daga ardía como el mismísimo infierno.
AMELIE.–¡No! – grite con fuerza mientras lanzaba uno de los muebles contra la pared.Me lleve las manos a la cabeza, tirando mi cabello desde la raíz.Quema. Rompe. Destruye. Mata.No paraba de escuchar eso, una y otra vez en mi mente.–¡Sal de mi cabeza!, ¡Salgan! –Volví a gritar, dejando que mi magia lanzara cosas a diestra y siniestra.Lograba recordar cada cosa que hice en Silverstone, como les cause dolor a mis amigos y compañeros, como lastime a mi familia, com
AMELIE.Abuelos. Abuelos. Abuelos.Mi mente no paraba de repetir esa palabra una y otra vez. Son mis abuelos, Conrad y Eleonor Steinfield, el primer gran vampiro y la primera gran bruja creada por regalo de los Dioses, los patriarcas de la familia Steinfield.–¿No piensan decir algo, queridos hijos e hijas?– hablo Conrad mirando a sus hijos. –Creí que los habíamos educado bien, pero no son capaces de presentarnos como se debe a nuestra única nieta.Estaba estática. Eleonor y Conrad estaban aquí, frente a mí, y habían matado a Russell. Mis abuelos paternos estaban aquí, pero también fueron ellos quien traicionaron a sus hij
RAINER. –¿Cómo te sientes? –Nervioso hasta la mierda– conteste mirando el bosque. –Se que es algo intimidante y bizarro, pero confío en que puedes, chico ángel, en el colegio lo haces de maravilla. –Una cosa es entrenar con Cam y Janett, pero enfrentarme a tu padre, un hibrido original, es completamente diferente. –Todo saldrá bien, tu confía. ¡Dioses, ayúdenme! Después de la super desaparición de los abuelos paternos de Amelie, los Steinfield estaban mas tensos y preocupados que nunca. Había decidido que si o si el entrenamiento se haría, lo que si
Advertencia: capítulo con contenido explicito (+18), si lees es bajo tu propia responsabilidad;)AMELIE.Rainer había entrado a bañarse hace algunos minutos, pero mi mente no paraba de mostrarme imágenes de él, de nosotros, juntos, besándonos, sintiéndonos, queriéndonos, deseándonos.Escuche la puerta del baño abrirse, rápidamente me pare del tocador. Mi novio salió con la toalla cubriéndole la cabeza por completo, los músculos de sus brazos y abdomen relajándose y contrayéndose con sus movimientos.¡Dioses, apiadanse de mí!
AMELIE.Todos estaban reunidos en el jardín, mirando fijamente a una mujer con una enorme capucha burdeo oscuro. La única que estaba cerca de ella era mamá, la cual lucia asombrada y algo extrañada.–¿Estas completamente segura? – le pregunto mamá, noto nuestra presencia.–Siempre lo estoy, Genevieve. ¿piensas dudar de mi ahora?–Sabes que no lo haría– mamá sonrió.Me pare junto a papá.–¿Qué ocurre? – le susurre.Este respir
RAINER. –¿Mi padre? –Raguel Arcángel, el defensor de la justicia y traedor de armonía– contesto la demonio. ¿Un arcángel?, ¿Mi padre es un ángel con un alto nivel en el cielo?, ¡¿Qué?! –Tienes un parecido físico con él impresionante, excepto por el color de tu cabello, eso es de tu madre. –¿Estas queriendo decir que Jacob no es mi padre biológico? – mi voz fue casi un susurro, Amelie apretó mi mano. –Él no es tu padre, muchacho, y la mujer que te crió tampoco es tu madre– soltó Delailah sin una pizca de tacto. –Para ellos eres su hijo biológico, pero su sangre no corre por tus venas.