Jun se despertó un tanto alarmado— con la respiración entrecortada, y sostuvo su estómago con pánico ante el extraño malestar. "Ugh," Se quejó al sentir un dolor punzante y trató de gritar por ayuda, pero su voz no salía. Sintió cálidas manos a su alrededor y una suave voz en su oído. Se concentró en el sonido y lentamente su corazón se fue calmando. Se alejó un poco del fornido pecho y miró con ansiedad a una esquina de la habitación donde se encontraban sus gemelos. El alivio que recorrió su cuerpo al ver a los pequeños dormidos allí le pareció incluso exagerado.Una de sus peticiones había sido que trasladaran a los bebés a sus aposentos, y a pesar de su extraña solicitud, el Alfa accedió de inmediato."Estás a salvo." Escuchó a Brendan decir y Jun espiró con calma. Sintió sus brazos rodearlo con más fuerza y se aferró al Alfa."Gracias, Brendan." Dijo en un tono suave y solo recibió suaves caricias en su espalda en respuesta. "Fue solo una pesadilla.""¿Qué soñaste?" "Había—ha
Brendan llegó a tardes horas de la noche ese día y los siguientes, por lo que Jun no pudo tocar el tema adecuadamente.Las semanas pasaron tranquilamente y no había vuelto a ser contactado por Donatella, así que descartó la importancia de la conversación al ver lo ocupado que estaba su Alfa.Jun suspiró con cansancio, los bebés se habían dormido hace apenas unos minutos—luego de básicamente agotar toda su energía. Jun sonrió al pensar en ver nuevamente la expresión en el rostro de Brendan una vez despertaran en la madrugada en unas horas.Usualmente los gritos de los pequeños se podían escuchar en toda la mansión, pero nadie se quejaba—incluso Brendan. A pesar de su obvia incomodidad, el Alfa nunca dejó que Jun se levantara a atenderlos por sí solo y ambos trataron de aquietarlos como un equipo—como una pareja normal.Era cierto que tenían todos los recursos para que alguien más se encargara de cuidar a los bebés—a tiempo completo, pero Jun quería estar para sus pequeños en todo momen
Jun vibraba de la emoción a medida que esperaba el auto que traería a su amigo nuevamente a su casa. Brendan estaba a su lado con una expresión serena, mientras que Mikhail y Ambrose se veían nerviosos. Jun también lo estaba, pero la anticipación de ver a su amigo después de meses opacaba la ansiedad.Un auto negro y lujoso se acercó a la entrada donde se encontraban. Jun bajó los escalones un tanto apresurado, sin esperar a que se estacionara, y fue detenido por Brendan a meros pasos, quien parecía regañarlo con la mirada."Ten cuidado." Ordenó el Alfa.Jun estaba disgustado pero acató su orden, y continuó mirando directamente al auto. La puerta se abrió breves momentos después, de allí se asomaron unos pulcros zapatos marrones y luego un fornido Alfa estaba a la vista.Era Nolan.El Alfa cubría sus ojos con unos lentes de sol, viéndose como todo un modelo debido a su estatura y vestimenta. Le mostró una pícara sonrisa a Brendan, la cual no fue recíproca.Nolan se inclinó para así ab
Brendan bajó a su pecho marcándolo con sus besos en su trayecto. Jun arqueó su espalda al sentir la electricidad que ocasionó la succión a su pezón, y debido al placer que se extendió por su cuerpo. El Alfa se tomó su tiempo complaciéndolo, moviéndose de un pezón a otro con experiencia. Jun se aferró a Brendan a medida que sentía su caliente lengua recorrer su piel."Hng," Jun se veía angustiado. "No lo bebas."El Alfa se rio suavemente, pero nunca se detuvo. El Omega podía sentir el líquido caer y su lengua recogerlo todo, sin desperdicio.Se estremeció una vez que sus labios tocaron su abdomen, temblando ante la tenue caricia. "Por favor," Rogó sin saber exactamente qué pedía.El Alfa avanzó y Jun sintió la anticipación recorrer todas sus venas al sentir su aliento en su miembro... y luego su lengua. "¡Ah!"Brendan lamió y besó el área lentamente, incitándolo—luego su pene fue envuelto en una deliciosa calidez, haciendo que los dedos de sus pies se contrajeran. El Alfa movió su cab
Las horas que duraron en el establecimiento fueron amenas, Jun tuvo la oportunidad de probar una gran variedad de platos y postres, mientras que Brendan parecía tener una discusión con su amigo cada vez que llevaba platos a su mesa.Tuvo que convencer al Alfa de no irse del restaurante, pero con el paso de los minutos se alegró de verlo disfrutar de la comida tanto como él. A pesar de lo mucho que su amigo lo irritaba, su comida parecía ser un punto medio entre ambos."¿Te trata bien?" El Alfa le hizo una pregunta directa, mientras esperaba a que su Alfa buscara el auto."Si... es muy bueno conmigo." Sonrió genuinamente, pero un tanto avergonzado."Bien." Su acento era tan marcado, que incluso sonaba amenazante."¿Eres turco, cierto?""Sí, del sur." Respondió cortésmente. "Ustedes deberían visitar algún día.""Quizá sí deberíamos."El teléfono del Alfa sonó en ese momento y de reojo Jun pudo ver que se trataba de Nolan y frunció el ceño. Arkin no contestó la llamada y luego el sonido d
¡Hola linduras!💜Gracias por llegar hasta el final. En realidad, no tengo palabras para agradecer el apoyo que he recibido con Laureles. Cuando lancé la historia, nunca esperé que sería bien recibida por tantas personas y lo agradezco mucho porque esto solo me dio más motivación para seguir escribiendo.Muchas situaciones pasaron en mi vida durante el tiempo en que empecé a publicar Laureles, y me parece increíble lo pacientes que fueron la mayoría de ustedes. Gracias de nuevo💜Con este último capítulo concluye la historia de Jun, pero le da cabida a muchas más que me encantaría escribir. Hay muchos personajes con historias que contar, como Noah, Jonathan y Kayden, y me encantaría que puedan leerlas en un futuro.¡Nos vemos pronto en los extras!
Salvatore observó con una increíble concentración lo que tenía en frente. Cualquiera que lo viera pensaría que estaba tomando una decisión de vida o muerte. Todos a su alrededor parecían temerle al Alfa, y desviaban su mirada hacia el suelo en su presencia. Estaban a la expectativa de su respuesta ante las opciones de compra que le habían presentado.La mano derecha del Alfa-William estaba a su lado, con una expresión estoica, y esto solo añadía a la ansiedad de los presentes. "¿Son estos los mejores juguetes que pudiste encontrar?" Preguntó con una firme voz. "Creí que habías dicho que tenías lo mejor del mercado.""Sí-sí, así es." Respondió inmediatamente el dueño del establecimiento. Dejando en shock a sus empleados, quienes nunca habían visto ese aspecto en el Alfa, estaba aterrado. "Si estos no le gustan, podemos buscar otro—""Olvídalo." El Alfa detuvo sus palabras con su mano y avanzó a ver lo demás que ofrecía el hombre en su tienda. "¿Qué es esto?""¡Oh! Es uno de nuestros mo
El chico avanzó con pasos medidos y miró la puerta a su espalda, sonrió al ver que no habían moros en la costa. Era medianoche, y la tranquilidad de la madrugada daba apertura a muchas travesuras, como la que estaba a punto de cometer en ese momento.Salió por la ventana con un enorme entusiasmo, y se ayudó con un árbol que estaba justo fuera para descender al primer piso. Los guardias alrededor reían y charlaban, ocupados con sus fanfarrias y conquistas de mujeres y Omegas.Salió furtivamente, evadiendo ser atrapado, pero no respiró hasta encontrarse en el patio trasero, donde ocultaba su salida secreta. Era un hueco que a su suerte, todos desconocían de su existencia, y lo ocultaba con las ramas de los alrededores.Al salir y sentir el aire fresco, suspiró profundo. A pesar de lo inmenso que era su hogar, se sentía sofocado ahí dentro. Su padre era muy estricto y no podía interactuar con prácticamente nadie, además de los empleados, su nana y Aziel-su mejor amigo.Incluso asistía a u