Rosalin tuvo un sueño con el señor Duncan. En el sueño vio cuando entraron a la hermosa casa de playa y la colocó de pie sobre la alfombra de la sala. Después que admiró todo lo bella que era esa casa el señor Duncan le habló amorosamente.-Hay comida, si tienes hambre-No. No tengo hambre – Dijo Rosalin mirándolo y él siguió caminando con ella tomados de la mano por la escalera. Llegaron a la habitación. Era bellísima. Fue al ventanal y lo abrió y entró la brisa fresca del mar. El señor Duncan, la abrazó por detrás.-No te preocupes. Todo va a estar bien. Estás conmigo y – Iba a seguir hablando cuando ella lo besó tomándole la cara con las manos.-Lo sé y te amo – Dijo Rosalin después del beso –Entonces, él la abrazó fuerte y con pasión y caminó hacia atrás hacia la cama abrazado a ella y él se acostó a su lado y la miró allí tan tierna ante él.-Nunca pensé que Dios me volviera a dar una segunda oportunidad de casarme y comenzar nuevamente con une mujer y aquí estás – Dijo el señor
-¡Buenos días! – Dijo Rosalin entrando a la cocina donde se encontraba el señor Duncan tomando su café con un croissant –-¡Buenos días! – Respondió el señor Duncan observando que Rosalin iba vestida con un short de tela de jean y una franela sin mangas – ¡Te ves de buen ánimo! –-¡Sí! ¡Estoy de buen ánimo! ¿Por qué no iba a estarlo? – Preguntó Rosalin –-¡Pues, no sé! ¡Tal vez porque todo el plan que tenías al casarte conmigo se te fue a la mierda! – Dijo el señor Duncan –-¡Es algo malo la vedad! – Dijo Rosalin tomando del café que se acababa de servir – Pero la vida continúa. ¡Uno nunca sabe lo que traerá la marea! –Dijo Rosalin mordiendo su sanduche – ¡Hay que mantener el ánimo! –-¿Y eso era lo enamorada que estabas de mí? – Preguntó el señor Duncan –-¿Enamorada de ti? ¡Por supuesto que lo estoy, pero tú decidiste no creer en mí y sacarme de tu vida. No veo qué más pueda yo hacer, así que, decidí que no voy a desgastar ni un minuto más de mi vida en estar triste – Dijo comiendo
Llegaron a la casa y cocinaron la cena entre los dos. En un momento en el que Rosalin se levantó a lavar los platos el señor Duncan se puso por detrás de ella y la abrazó oliendo su cabello. Le dio la vuelta y la besó. Rosalin correspondió al beso con todo su amor y con todo su ardor.-¡Eres tan bella! ¡Quiero probarte aunque sea una vez y luego nos podemos divorciar! – Dijo el señor Duncan y Rosalin se apartó bruscamente de él dándole una bofetada y sin esperar respuesta se fue a la sala y salió corriendo por las puertas de la terraza –-¡Muy bien, Kyle! ¡Ahora te convertiste en un cerdo! – Se dijo el señor Duncan terminando de lavar los platos y cuando colgó la toalla en su lugar después de haber dejado todo impecablemente limpio salió por la puerta de vidrio de la terraza a ver si estaba Rosalin allí. Debía buscarla. No debió tratarla así. La verdad es que los celos le estaban consumiendo el alma. Era muy doloroso para él imaginar a Rosalin, la mujer que él tanto amaba en los brazo
Cuando llegaron a casa, la Señora Smith los recibió con café recién colado y panecillos y al escuchar las voces, Sarah que estaba durmiendo, salió de su cuarto y llegó a la cocina donde estaban su padre y Rosalin. Los abrazó a ambos.-¡Los extrañé! – Dijo la niña –-¡Nosotros también te extrañamos! – Dijo su padre y la volvió a abrazar –Rosalin, tomó su maleta e iba para su pequeño cuarto debajo de la escalera y cuando se dio cuenta se volvió y miró a su esposo.-Iba a mi cuarto, pero me di cuenta que ese ya no es mi cuarto – Dijo Rosalin con una sonrisa –-No. Todo fue mudado para la habitación principal – Dijo Kyle, con lo cual, se levantó de la silla y tomó las maletas y la guio hasta el cuarto principal. Caminó por el pasillo a la izquierda y abrió la puerta doble y la dejó pasar a ella, quien se quedó sorprendida del tamaño de esa habitación. Le mostró su cambiador, donde tenía ya su ropa y el baño –Rosalin tenía la sensación de que en cualquier momento despertaría de este herm
Rosalin, se dejó caer en el piso cuando Kyle salió de la habitación. Se soltó a llorar desconsoladamente. Pensaba que por fin iba a ser feliz. Pensaba que por fin había encontrado una familia que la amaba y donde no había maltrato ni dolor, como se lo infligieran su padre y su hermana.-¡Soy inocente! – Dijo Rosalin llorando, pero no había nadie que escuchara – Todo había cambiado repentinamente de amor, dulzura y felicidad a dolor. Kyle la había mirado con tanta repugnancia, como si le diera asco el sólo mirarla. Se sentía engañado, pero el engaño lo había cometido Evelin. Seguramente, la ha estado siguiendo a todos lados. Fue así como debió enterarse del vestido que usaría esa noche y fue así como vio al pobre abogado que se acercó a hablar con ella y seguramente lo sedujo después que ellas salieron de la discoteca. No sabía quién era el otro hombre. -¡Un plan magistral! – Se dijo Rosalin limpiándose el rostro. No podía seguir tirada allí, llorando. Debía concentrarse en que Ev
Ricky, se acercó a ellos, como un gran actor en escena, haciendo un gran despliegue artístico – ¿Qué tenemos por aquí? – Dijo haciendo escaneo de todo el grupo –-¡Evelin, mi amor! ¡Siempre es bueno volverte a ver y ésta es tu gemela! – Dijo mirando a Rosalin con ojos lascivos –-Rosalin – Respondió Evelin –-¡Ah sí! ¡Rosalin! ¡Encantado de verte cariño! – Le dijo a Rosalin y ésta no contestó, ni siquiera pestañeó –-¿Y ésta quién es? – Dijo señalando a Sarah –-Esto, es para decirte que ya te tengo el dinero – Dijo Evelin haciéndole una seña a Kent para que entregara el sobre de manila a Ricky y éste se olvidara de la niña –Efectivamente, Ricky se interesó en el pago y con una seña casi imperceptible, uno de sus hombres tomó el sobre de manila vaciando sobre el escritorio los fajos de billetes para contarlos, mientras Ricky se volvió a ver a Evelin con una mirada extraña, Parecía deseo, pero parecía rabia y a algo más que Rosalin no pudo descifrar.Pasaron unos minutos que pareciero
Pasaron un par de días en los que Evelin fue atendida en el hospital y llevada a la jefatura de policía donde no se le leyeron los cargos, ya que, por petición de Rosalin, Kyle llamó a un abogado de su confianza para que se encargara del caso de Evelin. Al parecer, el señor Duncan sólo debía eliminar los cargos, aunque, todavía tenía muchas reservas con respecto a su cuñada, así que el abogado propuso que hicieran un trato con ella. El señor Duncan eliminaría los cargos contra ella si se sometía a un programa de desintoxicación y Evelin aceptó, así que ahora estaban esperando la fecha de la corte para que la juez dictara la sentencia para ser llevada a la clínica donde cumpliría 6 meses de sentencia.Por su parte, Rosalin fue atendida en el hospital por las graves magulladuras que presentaba. El señor Duncan no se separó de ella hasta que ocho días después fue dada de alta y lo primero que hizo fue ir a ver a su hermana. En esa visita Rosalin se alegraba de ver a Evelin tranquila al s
Rosalin, caminaba por una concurrida avenida de Nueva York. Iba rumbo al atelier. Había pasado un mes desde que se vino de Cunnecticut. Esa mañana, tenía unos cuantos pedidos que terminar y una novia se iba a medir su vestido. Clarise y ella trabajaban muy bien juntas y dirigían el equipo de costureras.Rosalin entró al atelier. Saludó a todas las costureras y entró a la oficina donde estaba Clarise esperándola con un café.-¡Buenos días! –-¡Buenos días! – Dijo Rosalin tomándose el café y sobándose el vientre –-¿Qué te pasa? ¿Te duele el estómago? – Preguntó Clarise –-No sé. Desde que me levanté ésta mañana tengo una molestia en el vientre – Dijo Rosalin –-¿Molestia en el vientre? ¿Normalmente tienes molestias en el vientre? – Preguntó Clarise – -No. La verdad es que no – Dijo Rosalin – No te preocupes. Ya me tomé un calmante y pronto se me aliviará –-Está bien. Revisemos lo que tenemos para hoy – Dijo Clarise y ambas se pusieron a trabajar –Una hora después de haber salido de