Capítulo58
En el otro lado.

Christian estaba sentado con las piernas cruzadas en el suelo, usando su energía espiritual para clavar agujas. La energía invisible fluía constantemente hacia el cuerpo de Jesús a través de las agujas de plata.

Debido a la gravedad de la enfermedad de Jesús, Christian estaba gastando mucha energía.

En poco tiempo, estaba sudando profusamente y se veía pálido y débil. Estaba al borde del colapso e incluso tambaleándose.

Al ver esto, los espectadores estaban nerviosos. Aunque no sabían lo que Christian estaba haciendo, podían ver que ya no podía continuar por más tiempo.

—David, ¿lo ves? Este chico ya no puede hacer nada más. ¡No tiene la capacidad para salvar al anciano!

—Si seguimos retrasando esto, ¡el anciano morirá seguro!

—Sugiero llevar rápidamente al anciano al hospital. Con mi habilidad médica y mediante un examen adecuado con instrumentos médicos puedo curar al anciano...

El Dr. Jiménez se negó a darse por vencido y volvió a hablar.

—Bueno...—

David cambió va
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