Cuando Christian caiga en manos de Ernesto, él se asegurará de vengarse de Christian diez veces más, ¡haciendo que su vida sea un infierno! De lo contrario, no podrá liberar el rencor que lleva en su corazón.

—¡Quien mata debe pagar con su vida!

—Estás en lo correcto, no me atrevería a matarte, eso es cierto.

—Sin embargo, puedo dejarte impotente, asegurarme de que nunca más seas un hombre, para que no sigas dañando a otras chicas.

Christian se burló y dirigió su pie hacia la zona entre las piernas de Sergio.

No era tonto, no se involucraría en asesinatos, eso estaba más allá del límite legal que no debía traspasar. Aunque dejara a Sergio incapacitado, con sus conexiones y contactos, como máximo, solo tendría que pagar una suma de dinero.

¡Ese dinero se lo podía permitir!

—¿Qué?

Sergio fue golpeado por un rayo, quedó atónito. Si ya no pudiera ser un hombre en el futuro, ¿qué sentido tenía seguir viviendo? ¡Sería mejor morir!

—No... por favor...

Observando cómo el pie de Christian se ac