—Además, ustedes seis que van a apoyar a Grupo Dragón de Guerra en el Oeste, definitivamente necesitan a alguien a cargo para liderar el equipo.

—Ahora anuncio que nombro a Christian como el capitán. Todas sus acciones estarán bajo su comando —dijo Nepomuceno solemnemente.

—¿Qué estás diciendo?

—¿Lo nombras como capitán?

—¡Esto no puede ser!

Al escuchar esto, los tres, Leoncio en particular, se sorprendieron, y cada uno se sintió un poco desanimado, incapaz de alegrarse.

Después de lo que acaba de suceder, los tres ya habían llegado a la conclusión de que Christian era simplemente alguien de habilidades modestas que ascendió a guardia del dragón negro gracias a sus conexiones.

Si Nepomuceno hubiera asignado a Christian a un papel secundario en el equipo, donde simplemente seguiría las órdenes y ganaría algunas contribuciones y méritos en el proceso, podrían haber ignorado a Christian sin preocuparse demasiado.

Pero ahora, Nepomuceno no solo asignó a Christian a la tarea, sino que lo no