—¡Bien, muy bien! — exclamó el señor Rivera con una sonrisa de satisfacción en el rostro. Los últimos días, debido a la situación que se presentaba con Christian y su relación complicada, había estado deseando que Carmen se alejara de él.

La inesperada propuesta de matrimonio de Eustaquio le dio una sensación de alivio. Eustaquio era el heredero de la familia Barquero, mientras que Carmen era la sobrina de la familia Rivera, lo que hacía que fueran una pareja perfecta. Si esta unión se concretaba, Carmen tendría un excelente futuro y las dos familias se beneficiarían de esta alianza.

—No, no estoy de acuerdo— respondió Carmen con consternación.

—¿Por qué no lo estás? — preguntó el señor Rivera. —Carmen, Eustaquio es humilde y cortés, y su corazón está puesto en ti. Este tipo de oportunidad no se encuentra todos los días. Por favor, no la dejes pasar. Acepta el compromiso.

Desde el principio, Eustaquio había sido educado y, además, había traído la valiosa fruta de las cinco energías c