Capítulo 103

Gema agacha la mirada, Cecilia entra a la habitación y cierra la puerta.

—¿No vas a decir nada? Aunque se que no te puedes excusar, ese día el no durmió en casa, ustedes llegaron empapados de lluvia, es claro que pasaron la noche juntos —Cecilia gruñe —¿Cómo te sientes? Mientras te revolcabas con mi esposo, el tuyo agonizaba.

—¡Lárgate! No tengo porque escuchar estas palabras de tu parte, si debes hacerle un reclamo a alguien creo que ese es Vicente.

—Ya lo hice, me pidió perdón y que intentemos olvidar este penoso incidente —miente Cecilia desesperada por no perder a su esposo —Pero yo te pedí de loba a loba que no lo buscarás, me fallaste.

La loba siente un dolor en su vientre, Gema le ayuda a sentarse en la cama mientras está respira llorando.

—Calmate, le puede hacer daño a tu bebé —Gema le da un poco de agua.

—¡Tu le haces daño! Se que ahora que eres viuda, puedes intentar acercarte a el, te lo suplico no lo hagas.

Gema la mira a los ojos

—No lo haré, me prometí qued