Caí  de rodillas al frió y sucio suelo mientras mis sentidos no daban crédito a lo que captaban, sentí un inmenso dolor al ver a aquella niña que nos cuido, protegió y ayudo tirada en el piso  mientras sangre salia de todo su pequeño cuerpo. 

Sentí mi cuerpo temblar con fuerza mientras  que me derrumbaba en un mar de saladas lagrimas y sollozos lastimeros que demostraban mi miseria en este momento. 

--- No la protegimos. --- dijo Megara con tristeza en mi ser.

Arrastras me acerque a ella y con mi mana temblorosa aparte su pelo de la cara viendo detenidamente todas sus heridas que se clavaban con agujas en mi corazón.

--- Lo siento. --- digo en un susurro. --- No te protegim