"Soy todo oídos". Digo, mirándolo.

"Eh...", suelta un suspiro y se toca el reloj de la muñeca izquierda.

Nunca había visto a Kyle dudar en contarme algo. Debe ser algo muy serio. Espero pacientemente a que se reponga y me dé la noticia. Pasan unos instantes hasta que vuelve a mirarme y suelta otro suspiro.

"He encontrado a mi pareja". Me anuncia en voz baja y siento una sacudida que me recorre el cuerpo. Antes de darme cuenta, estoy de pie, mirándolo intensamente, lo que le hace asentir con la cabeza. Incluso sonríe. "Sí, lo he hecho".

Una sonrisa se dibuja en mi cara. Mi boca se abre en una sonora carcajada de felicidad. Doy una zancada hacia él y le rodeo los hombros con los brazos, envolviéndolo en un fuerte abrazo varonil y palmeándole la espalda.

"¡Qué fascinante! ¡Es absolutamente fascinante!". Lo saco de mis brazos y estudio su cara sonriente. "Eso debería haber sido lo primero que me dijeras nada más entrar en esta oficina".

"Estaba esperando el momento adecuado".

"No