Me encanta su compañía y estoy feliz de que esté aquí conmigo otra vez.

"Toma", me da una botella de jugo de naranja. "Me las arreglé para sacar a escondidas dos de estos de la cafetería después de la cena. Ya me tomé el mío. Puedes tomarte este".

"Gracias", agarro la botella de jugo sonriendo. "Eso fue muy valiente de tu parte. Siempre he pensado en hacer algo así, pero nunca me he atrevido a llevarlo a cabo". Le explico mientras destapo el jugo y bebo una buena cantidad. El sabor dulce y afrutado del jugo me hace desear más. Tengo ganas de vaciar la botella ahora mismo, pero tengo que guardar un poco para más tarde.

"¡Dios, me encantan los jugos de fruta!", exclamo con una sonrisa de oreja a oreja. "Que la diosa de la Luna te conceda todos los deseos de tu corazón, Hayley. Me has alegrado la noche con esto".

"Me alegro de haber podido poner esa sonrisa tan gorda en tu cara". Se levanta de la cama y la miro confusa.

"¿Ya te vas?".

"Sí. Me temo que tengo que irme. A Rhea no