_ ¿Y por qué está actuando de esa manera? _ ¡Llama al médico, así sabremos y su mente fue afectada! _ ¡eh! Tanto como Don, Marcelo y Jack, estaban confundidos. Que ella actuara de una forma distinta. Es porque algo no está bien. _ ¡Jack, te dije que me hablaras, no que le susurres cosa, a papa! _ ¡Bien, bien! ¿Qué quieres que te diga? Katty se quedó, pasmada. Como ella lo había imaginado. Solo puede leer los labios y no escucho en absoluto lo que ellos mencionaron. Katty se tocó la oreja. Para saber si algo está mal con ella. Y su cabeza vendada le da una impresión que esto es grave. _ ¡No puedo escuchar, de lejos! ¡No los escuché!. _ ¿Qué? Respondieron los dos, al mismo tiempo. Jack salió y busco el médico. Don Marcelo se apoyó al borde de la camilla y le acaricia la cabeza. Una manera de consolarla. Unos Minutos Jack entra con el médico. El médico revisa, pero le, es difícil hablar. Con la presencia de estos dos hombres. Cualquiera se mantiene callado. Hasta la respiración
Ella tenía los ojos, lleno de un brillo desconocido. Pues era ya una nueva faceta que nadie conocía. Una nueva despertar de ella. Gracias a la entrometida de la enfermera. El Doctor temía su reacción y la sedo de nuevo para dejarla dormir. Tranquilamente. Pero nadie nunca sabia que esté otro degenerado del hermano de Don Marcelo, tenía planes mucho más fuerte y fuera de la línea. Cuando Don Marcelo se fue la misma enfermera había notificado su hermano. Y resultaba que era el maldito traidor de la familia. Don Marcelo se marchó y dejo una enfermera en su cuidado personal. La enfermera terminó de medicar y limpiarla. Cuando le taparon la nariz con fertilizante demoledor. Ella no puede hacer nada. El tío Víctor mandó a secuestrar a Katty. Bien que salió su plan. Esa era la chica favorita que hacía de todo. Si la tuvieran a ella bajo sus garras es tener una mitad de todo lo que tiene los Bill. Sus pensamientos se volvieron macabros cuando poso sus ojos sobre katty que yacía inconsciente
Jack Bill La paciencia se había ido por la borda. Y si estaba ya arta de que mi tío se pase conmigo. Lo había soportado durante mucho tiempo. Claro está que ese carbón no quiere vivir. Miro a mi padre, que trata de encontrar una palabra razonables, para decirme y que me calme. Algo que él sabe que no encontrara. Antes, de buscar mi arma favorita, le llega un mensaje a papa, él lo mira y arquea una cejas. Eso me dice que no es buena señal. Tira del vaso que tiene en su mano. Y lo veo volar hasta queda añico en la pared. Ahora lo veo, en mi estado. Loco por meterle dos plomos en sus bolas sucias. _ ¿Cómo se atreve, a amenazarme, yo Marcelo le he dado de todo a este hijoputa? _ ¡Pues, su sed, es verte en la tumba! _ soplo sin morder mis palabras. _ ¡Ya está bien, pero lo quería ahora mismo es eso! ¡Que estemos furiosos salgamos corriendo! ¨_ ¡Pues, lo logro, toco a la persona equivocada! _ ¡Calma, pensemos en un plan, él debe tener todo tipo de trampa! _¡Pues, a mí me vale un put
Toda la manda se embarcaron. Aunque Don Marcelo reclamara que se calme no sería posible. Jack había perdido sus enturbió y no habría marcha atrás. Entraron a un armasen y equiparon a varios camiones, y un cargamento lleno de armas. Bomba y misiles. Esta no era una guerra simple, era una guerra de poder. No era solo salvar la vida de la mujer que quería, también era reclamar poder que le habían quitado. Jack sentía que su poder y su honor estaba en juego. Que secuestren a su mujer, y lo amenacen, estaban jugando con su demonio. Y eso no estaba permitido. Destruiría a cada una de la fortaleza que tendría Víctor. Ante de quitarle el coronillo a un león, quítale la manada completa, ahora su legado estará solitario. Y su fuerza se debilita, su coronillo tampoco le será una amenaza para nadie. Jack, estaba decidido. Varios camiones se pusieron en marcha. A la vieja residencia. Una vez que el perímetro estaba controlado. Entraron y se armó un tiroteo. Hombres, Caín al piso. Solo la vida d
Jack estaba en la ira de la desesperación porque llamo a todo en una puta reunión, no estaba seguro, pero fue una idea que le llegó. Sabe que un hay más traidores, pues tenía que mantener a todo en un solo lugar y no había otro que su imperio. Salió en la dirección de Víctor, convencido de hoy será su último día. Víctor había mandado hombre en la línea delantera y le comunicaron que unos carros se acercaban. Que un carro causará temor en el territorio del inframundo tenía que ser alguien con mucha influencia. ¿Quién demonios era este Jack en realidad? ¿Acaso, lo estaban subestimando demasiado? En este entonces, en la habitación, Katty recobraba la conciencia. Una vez que despertó encontró que las cosas andaban muy mal para ella. No solo estaba atada, sino que parte de su cuerpo estaba cubierto por sangre. _ ¡Mierda, ¿qué hago aquí, como desperté en un lugar, mal oliente como este? Miro su cuerpo y vio que estaba atado, y la sangre era de ella. _ ¡Ja, ja, quien tiene tantas ag
Pues, en acción, al mismo sentía, que un dolor agudo le oprimía el corazón, las razones, estaba siendo desconocido. Pero la imagen de la explosión voló como una ráfaga de viento, en su cabeza. Se estremeció. Desconocía porque le dolía tanto, ahora que volvió a pensar en la explosión, miro la pantalla y una línea de lágrimas corrió por su mejilla. Inconscientemente toco la pantalla. _ ¡Te vengaré, lo juro Jack, te vengaré! Mientras sus ojos estaba contemplando como el humo, desprendía del lugar. El corazón le dolía mucho más, y las lágrimas salían por montón. Aun sin conocer, cuál fue la cercanía de la antigua, ella a él, tenía que hacer algo. Como saber con exactitud, cuál es su relación más íntima con él. Supo que él le declaro su amor, pero que lo porque ella le entregó su cuerpo. Tras la puerta posicionada, para cuando los hombres entraran. La tormenta invadió su memoria de nuevo, la imagen es tan clara como si lo estuviera repitiendo en la vida justo en este momento. El tormento
Jack Bill Ese hijo de puta, de verdad, tenía mucho bajo la manga. Me lanzo un misil, fue un poco difícil, esquivarlo. La explosión fue bastante alta. Me duele el corazón, siento haber perdido algo. Pienso en mi reina, mi mujer, La que ami me saca de mis propios cávales. Ella debe seguir viva, debo encontrarla y are que pague ese hijo de puta. Cuando paso la explosión, los hombres de la línea, delantera, no sobrevivieron. Pero mis escoltas, nos escondimos en un lugar. Mandamos a liderar la primera línea. Espero, donde me quedo para terminar de tratar esa herida, pero tampoco tengo paciencia. Quiero ir por mi mujer. Uno de mis escoltas me llama. _ ¡Jefe, lo lamento! _ ¡Qué Diablos, estás lamentando, donde está la ubicación que te mande a buscar! _ ¡La encontré, pero...! Sus palabras me tienen en alerta, siento que una mala noticia está por salirse su boca. Y no dudaré en darle un disparo, si se atreve a decirme, lo que está palpitando en mi interior. No lo voy a creer. Ella nu
Sentí que mi estómago se revolcaba, con su toque. Y las constantes chicas quisquillosas en mi cabeza. Comenzaron maldecir. Su toque me resultaba repugnante. Mi cuerpo, por instinto, o por algo mayor. El toque de nadie, me resultaba atractivo, solo el de Jack. Su mano se abría paso, a mi cintura, yo buscaba, tener, en buena posición, con mi alma. Y Solo quiero, desosarlo con una bala en las bolas. Nunca, más en su vida, volverá a tocar a una chica. Dios a cuantas este barroco le ha desgraciado la vida. Estaba, y harta de este hombre. Y lo hice, le recargué las bolas con una bala. Su grito. Me pareció de mariquita. _ ¡Maldita desgraciada, en las bolas no se dispara! Sonrió, con satisfacción. Todo le temen a la bolita. Y yo exclusivamente quiero dejar que no exista en este mundo. Cometí un error, me distraje con su silenciador, me hizo lo mismo, en una costilla. _ ¡Hijo de puta, me disparaste! Estaba morado. Y su cara tenía todas sus venas expuestas. Explotará en cuestión de segundo