CAPITULO 4

Bianca se escapa de él alejándose lo suficiente, toma aire mientras intenta calmar a su corazón descontrolado, “¿Qué me pasa?, este tipo casi me mata, encima me llamó vagabunda” ella recuerda lo que le ha hecho para que hacerse ideas tontas en la cabeza, solo es un contrato se repetía en su cabeza una y otra vez.

Al salir del edificio y llegar a su casa, la cara de Bianca no perdía el color rojo ya que cada vez que pensaba en que le habían introducido esperma de Eros, no podía verlo a la cara así que evitó hacerlo durante toda la tarde.

—Toma —Bianca observa la pequeña caja en sus manos —Debes llevarlo puesto de ahora en adelante.

—Un anillo…

Consternada ella observa el anillo, cuando lo mira nuevamente para agradecerle Eros ya no se encontraba, sonríe con tristeza mientras se coloca el anillo en su dedo anular, “Soy una tonta al pensar que el me lo pondría”

Bianca observa al hombre que se encontraba hablando por celular mientras busca la forma de descubrir que es lo que realmente pasa por su cabeza ya que aun no puede creer que alguien como él que lo tiene todo, quiera un hijo y un matrimonio falso.

Al observarlo detenidamente se da cuenta que es mas atractivo de lo que pensaba, antes ni siquiera se había percatado de eso, cuando se da cuenta que la observa Bianca sale corriendo a su habitación y se encierra en ella, inhala profundo antes de suspirar mientras nota los nuevos cambios que hay en su vida

—Señorita, la cena está servida.

—Si enseguida bajo. —responde nerviosa

“No puedo siquiera verlo a los ojos, como podré verlo a la cara cuando nos casemos”

Cuando bajó se detuvo al pie de las escaleras, inhala profundo y muestra su mejor sonrisa, pero esta se borra cuando se da cuenta que no había nadie en la meza, confundida pregunta donde estaba él y la empleada le responde que el siempre suele comer en su despacho, molesta toma asiento al ver que ya estaba servida su cena.

Curiosa de saber lo que estaba haciendo, toca dos veces la puerta, pero no recibe respuesta así que decidió entrar de todas formas, al verlo trabajando aun de noche y notar que no había siquiera empezado su cena lo interrumpe al hablarle

—¿Necesitas algo más? —murmura sin dejar de trabajar Eros

—Bueno pensé que se había dormido. Asi que…

—Si no necesitas nada mas puedes salir, estoy ocupado y no necesito terminar este trabajo, así que, por favor, no me estorbes.

La frialdad en que le habló le molestó mucho a Bianca así que se fue a su habitación, se sienta al borde de la cama mientras se cruza de brazos ya que no esperaba que fuera tan cruel con ella, “Claro, que más se puede esperar de alguien como él”.

Siguiendo su rutina, Eros se levantó a tempranas horas de la mañana, preguntó por Bianca y una de las empleadas le dijo que aún seguía dormida, ladea una sonrisa ya que no le sorprendía que siguiera durmiendo hasta tarde. Después de tomar su tasa de café se levanta de su lugar y va hasta su habitación, se sorprende de que no tenga seguro la puerta, al abrir la puerta y encender las luces la observa por un momento, se ríe al ver su cabello desmarañado, los tirantes de su blusa caen a cada lado de su hombro, traía puesta una pantie color rosa.

Carraspea su garganta, pero ella solo remueve molesta y se queja diciendo que una hora mas así que Eros se acercó a la ventana y abrió las cortinas diciéndole que ya era tarde, Bianca se despierta enseguida y cuando vio a Eros y recordar cómo estaba vestida la sangre se le subió a la cabeza y grito avergonzada y le arrojó el reloj haciendo que saliera de su habitación.

—¡Pero que demonios sucede contigo loca!

Ella abre la puerta molesta mientras se coloca una bata.

—¡Escúcheme bien, el hecho de que seamos una pareja falsa, no significa que va entrar a mi espacio personal como si fuéramos cercanos, hay limites así que respete!

Bianca cerró la puerta de golpe en su cara dejándolo sorprendido de que ella reaccionara de esa forma o que tuviera ese temperamento, “vaya sorpresa”. Cuando ella salió Eros la observa sin expresión alguna, se da cuenta que aún no sabe cómo las prendas.

—¿Y esas personas?

—Son los paparazzi que seguramente mi querido padre envió para saber si en verdad estoy comprometido o no. —Eros se acerca a ella haciendo que sus nervios se alteren al tenerlo cerca —Vamos amore mío, hay que presentarnos ante todos como la feliz pareja de enamorados que somos.

—Si claro.

Comenzó a sentirse abrumada cuando comenzaron a fotografiarlos, ella se aferra del brazo de eros y el coloca su mano sobre la suya haciendo que se tranquilizara, Bianca observa a su prometido mientras el aclara las dudas que ya su padre había dejado en los medios sobre su relación, ella se encontraba sorprendida de la forma en que Eros hablaba con tanta naturalidad y confianza, en cambio ella ni siquiera pudo decir una sola palabra porque los nervios la alteraban y la hacían temer

—¿Es cierto que se casaran por obligación? —preguntó una de las reporteras.

—Oh, habla sobre el embarazo. —dijo Eros con una sonrisa ladeada —El compromiso ya tiene varios meses y lo de su embarazo… es reciente así que… —la mira fijamente con una sonrisa cálida, tomando por sorpresa a Bianca al besarla hace que todo sea mas convincente pero confuso para ella —digo que la llegada del bebé es una bendición. ¿no es así, amor?

Las mejillas de Bianca se enrojecen cuando Eros la mira fijamente de una forma tan cariñosa como si en verdad estuvieran enamorados en verdad.

—Si… tienes razón cariño.

Eros se sorprende cuando le devuelve el beso, sonríe por un momento y luego les dice a los paparazis que se marchen ya que su futura esposa debía descansar, tomando sus caderas para acercarla mas a él hace que su rostro se enrojece por completo

Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo