Cap° 40

A la mañana siguiente los rayos del sol traspasaron las cortinas haciendo que Tanying se moviera. Ella sintió un profundo dolor de cabeza sin duda la resaca la iba a dejar en cama todo el día de hoy. Con las pestañas hacia arriba, abrió lentamente sus hermosos ojos color miel. La luz del sol brillaba atreves de las cortinas, confundida por lo que había pasado anoche se frotó sus ojos cuando los abrió de nuevo Tanying vio de repente el hermoso rostro de su esposo. Miró a su alrededor rápidamente y luego miró por debajo de las colchas cuidadosamente con la intención de no despertar al hombre cuando vio que estaba completamente vestida soltó un suspiro de alivio. Entonces no había sido un sueño lo de anoche o sí que era un sueño y que parte ni ha

Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo