Kevin estaba a toda marcha hasta el aeropuerto, llegó, se estacionó como pudo y a la velocidad de un rayo corrió hasta la zona de venta de boletos. Observa si Verónica se encuentra por ahí pero no la vé, camina más al fondo donde había un cafetín y sillas de espera, observa a Verónica sentada con sus maletas. Kevin intenta pasar pero no lo dejan por no tener un ticket.Se devuelve hasta la taquilla.—Hola, deme por favor un boleto...—¿A dónde se dirige señor?—A donde sea, solo necesito un boleto.—Claro, eso no es nada sospechoso.—Necesito hablar con alguien que se encuentra en esa zona de allá y no puedo pasar sin un boleto ¡Solo vendame cualquiera!La cajera lo observa con el ceño fruncido pero igual le vende uno, Kevin paga y se dirige lo más rápido que puede hasta donde estaba Verónica.—¡Verónica! Necesito que me expliques que rayos está pasando...Verónica se levanta as
Aprovechando que ambos estaban en la playa favorita de Ela quiso tomar la iniciativa de hospedarse esa noche en el hotel que estaba muy cerca. Ela no estaba muy segura de quedarse en un hotel ese día, pero ya era algo tarde, tenían que descansar para al día siguiente regresar y solucionar todo o al menos dar la cara por la mentira. Ninguno de los dos pensó en Kevin o en Tamara, en nadie más que no sea ellos dos, eran tan felices que lo demás solo se disolvía en el tiempo relativo. Llegaron a la habitación y Ela se percata que Edward pago la más hermosa y cara del hotel, se adentro mirando con un poco de reproche a Edward, se acerca a la ventana que daba justo a la cama y al abrir la cortina vé el hermoso y extenso mar, azul y brillante, un poco color naranja, se estaba poniendo el sol y el día cambio su color de amarillo radiante a naranja relajante. Ela se sentó en la cama. Edward le hizo compañía.
Edward y Ela estaban acostados en la cama.—Gracias por venir hasta acá...—fue la mejor decisión que tome en mi vida. Tenerte aquí es como un sueño del que nunca quiero despertar.Ela apoya su cabeza en el pecho de él, escuchando como su corazon late.—¿qué diremos cuando regresemos? Será raro ver qué la novia de tu mejor amigo este con el amigo—no había pensando en eso—hay mucho que aclarar—comenzando por pedirle disculpas a Tamara, oye deberíamos hablar de eso...—No te preocupes, yo le conté a Tamara antes de venir la verdad.—¿Lo hiciste?—si—Ela se levanta y se sienta en la cama—solo cancelo la boda y salió diciendo que buscaría a su esposo.—No deberíamos dejar solo a Kevin en esto, vamos a regresarnos.Ela asienta y ambos se comienzan a acomodar. Edward estaba buscando un poco desesperado si celular pero no lo encuentra en la habitación.—qui
Samantha y Jhon se fueron a su casa, ya era muy tarde en la noche, lograron ver a Tamara sólo un rato.Edward y Ela se quedaron junto a Kevin y Verónica. Estaban pendientes de una nueva noticia de su madre, o al menos saber cuándo le darán el alta.—Estoy muy impactado aunque no sorprendido en cierta forma por lo de el señor Carlos...—Confiesa Edward—Si, pues yo no. Ese hombre era muy obvio—Suelta Verónica—Al parecer todos lo esperaban menos yo—dice KevinVerónica le mira la mano a Kevin, la tiene un poco roja y con moretones.—Kevin debes curarte esto, vamos a llamar a una enfermera—No es para tanto Vero, estoy bien. Es lo mínimo que pude hacer en defensa de mi madre.—Igual hay que tratarte eso.—Entonces... ¿Ustedes ahora serán una familia?—pregunta Edward con una sonrisa—Eh, si... Una extraña familia—Dice Verónica.—Extraña quizá, pero será unida.Ambos
Beber como su no hubiese un mañana con licor de dudosa procedencia no fue una de mis mejores decisiones, más no significa que fue la peor, la peor en definitiva fue casarme pensando que estaba enamorada.Casarme para complacer a mis padres.Casarme para que la prensa tuviese una noticia positiva de mi.Casarme para que cada uno de mis pasos se vean confiables y seguros, pero solo me case para mentirme a mi misma con facilidad.Por un momento en mi juventud llegue a pensar que un embarazo y el matrimonio eran las dos cosas más felices que me pueden pasar a una mujer. Significaría estar completa, un logro majestuoso.Mis padres me veían con orgullo, como si fuese un trofeo a punto de ser entregada al ganador número uno.Desde pequeña se me enseñó a sonreír, incluso cuando solo quería llorar. "Llorar no es de niñas decentes" decía mi madre muy enojada conmigo mientras me acomodaba a regañadientes mi vestido. Yo solo q
Tamara se encontraba descansando de la habitación de huéspedes que tenía Kevin en su penthouse, una habitación cómoda y amplia, también mando a llamar a su mucama para que mantuviera reluciente la casa todo el tiempo y se encargará de las comidas del día, Kevin estaría ocupado en búsqueda de un buen terapeuta para su madre, también Verónica se quedaba en casa de Kevin, ayudando a cuidar a Tamara.Samantha llega de visita y pide ver a Tamara. Verónica le accede el paso y se adentran a la habitación donde esta estaba acostada.—¡Amiga! Que alegría verte... ¿Cómo te sientes?—la verdad ni sé cómo me siento.—se que son cosas difíciles las que están por ocurrir pero sabes que cuentas con mi apoyo incondicional.—eso lo sé, por eso necesito que me consigas al mejor abogado de divorcios.—ya lo decidiste—¿Pensabas que lo iba a perdonar? O peor aún ¿Que tenía que pensarlo?—no, no me refería a eso... Un
Verónica se despierta y se percata que ya había amanecido ¿Cuánto más puede dormir una embarazada?, Sentía el cuerpo muy pesado, suponiendo que era parte del embarazo no tenía forma de como evitarlo.Observa a Kevin a su lado, durmiendo tan profundo.Se acerca a él para darle unos besos en su cara. Kevin se despierta al instante y la abraza.—¿Cómo dormiste?—pregunta ella.—pues la verdad ni me di cuenta cuando caí rendido—así de cansado estabas que no te diste cuenta del momento en el que caiste.—si, todo esto ha sido una completa locura, por fin pude descansar algo.—hablando de semana de locura ¿Cuando planeas contarle a tu madre que estoy esperando un bebé?—oye, sé que hay que contarlo, pero primero pensaba esperar que pasara todo esto, quizá un par de semana más. ¿Estás de acuerdo?—no tienes que ni siquiera preguntar, por supuesto que lo estoy, no esperaba que le dijeras ahora.
Samantha sin falta fué (está ves con su esposo Jhon) a visitar a Carlos, el cual ya le tenía sin rodeos los papeles del divorcio listo, firmados y sin titubear.Samantha estaba un poco sorprendida de que su plan estaba funcionando correctamente. Por fin había logrado que su ex amigo se alejara para siempre de Tamara.Jhon le confiesa a Samantha.—Estoy muy orgulloso de la mujer que eres, siempre mejorando, es increíble.—ay amor, eso viniendo de ti es algo más que un cumplido.Ambos se dan un beso y se dirigen a casa de Kevin, dónde todavía vivía Tamara.En el penthouse estaban Verónica, Kevin, Edward, Ela y Tamara en la espera de Samantha y Jhon. Preparando un lindo almuerzo. No querían ir a un restaurante caro, querían mantenerse en privacidad, ahora que tenían ese placer de mantenerse alejados de el ojo público querían tomar ese privilegio como fuese.Fue fácil acostumbrarse a no ser fotografiados a cad