―Seleccionaremos por medio de una app tus ropas, zapatos, accesorios todo lo relacionado a vestimenta y adornos, no es conveniente andar por una tienda con enemigos al asecho, por lo tanto pidiéremos por este medio tecnológico hasta logra neutralizar a los Ruso ―le explico a Liliana en mi oficina mas para privacidad.
Antes de la molesta de Gian y su hijita le mostraría como escoger su nueva ropa fina de marca reconocida, pero dañaron mi buen animo, por continuar con la insistencia de comprometerme con Mariola. Una vez nos dirigimos a mi estudio comenzó a reclamar cosas sin sentido ni razón, el maldito hijo de puta de atrevió a insultarla, me resiste con mucha voluntad a no bolar su maldita cabeza, no perdonare al malnacido por su osadía de insultar a mi amazona. Pero por supuesto me la cobrare, usare cualquier artimaña han que obligarme que hacer uso de calumnia falsas para sacar
POV LilianaChapoteo el agua de la piscina bajo mis pies, toco mis labios recordando los besos de Dante son tan fascinantes, pero no debía sentirme así por sus labios, solo soy una amante a la cual le hace el favor de proteger. Pero no debo olvidar a que se dedica, uno de esos maleantes fueron los homicidas a mi novio, ansió que me ayude a encontrarlo a apresurado, asimismo a despojar a esos criminales de encima, han que suena irónico ando rodeada de ello por doquier.―Señorita ―giro con la voz que me llama ―aquí tiene su su celular ―asiento dando un agradecimiento con ello se retira. Apurada desempaco el teléfono, me medio sorprendida por ver un iphone X Plus, lo enciendo para proceder a marcar el numero de Abril, debió haber regresado de su viaje.Al 2 repiquete contesta ―Buenas ¿con quien hablo?―suena angustiada, maldición debe ser por mi lo seguro.―Abril, te habla Liliana.―¡¿Li?! diablos ya puedo respirar ¿donde estas?
POV LilianaAproximadamente una hora lleva Abril que se fue a su trabajo, por lo tanto regreso a la soledad en estas grandes paredes. Decidí ir un rato a la biblioteca de Dante, gracias al cielo encontré un libro de misterio ameno, al ir por la pagina numero 6 lo que mi amiga sospecha regresa a mi mente, chisto la lengua cerrando el libro con un separador que encontré. No creo que me halle embarazada, no estuve ese momento en mis etapas fértiles. Mas las dudas de estarlo quedan en la estadística de 75% no 25% si, muy a pesar de que no uso métodos anticonceptivos, no es tanta la posibilidad de llevar un bebe en mi vientre. Evadí a Abril con unas cuantas mentiras, no podría ser muy latosa con ese tema, además no presento un mínimo síntoma de aquel estado.Disperso el asunto de mi mente, deben ser especulaciones de ella por no usar condón.Preocupaciones reales sumamente grave deben ser mi prioridad.Mi estomago chilla del hambre, debido a rechazar
POV Liliana Llego la mañana después de caer rendida por mi elevación en la gloria, no supe de mi, inclusive no cene, por ello cuando me desperté me tragieron una gran cantidad de desayuno, admito que lo devore todo amanecí hambrienta, no encontré a Dante se había ido muy temprano a una reunión, dejo una nota en la cama infomandome. No ocupo mucho mi mañana transcurre normal y aburrida. Pensaba en ir a cementerio a dejar las flores favoritas de mi madre, mas todo se estropean por ordenes de Dante de que tengo restringido salir. Me lleva quien me trajo, me toca quedarme encerrada por culpa de un bastardo frustrado.
POV Dante Mi madre junto a mi nos alejamos a una distancia de los invitados de mi hermana, en su rostro maduro noto que es un tema incomodo para mi. ―Bien madre, aqui estoy ―espero sea rapida la conversacion, no me agrado dejar a Liliana sola, desde que me aleje una emoción afilada en mi pecho no me deja tranquilo. ―Se trata de que ayer Gian fue a
POV Dante ―Señor el pacientes esta listo ―aprieto los puños ante la palabra clave, para ir a darle su escarmiento al hijo de puta bastardo, que me traición, a mi pequeña amanoza nadie la toca, el valiente que se atreva sufrira dolorosas consecuencias. Parto a la cueva 13B, lugar donde van las peores ratas, sitio que cuando menciono mis hombres saben que va estar allí, sufrira al máximo,detengo mis pasos en la puerta oxidada de metal. Saco mi tarjeta negra, situando el chip en un censor de luz infrarroja, en un panel se presenta la cuenta regresiva de 5 segundos, terminada abre, 6 de mis hombres se van ubicando categóricamente en di
POV Dante Envié a Liliana de descanso, pero no acá dentro, fuera de la mansión hay una construcción de una casa de servicio fuera de uso. Quedo con mucha tensión por lo acontecido del cementerio y ahora las mala intencionadas palabras referidas por Franco Bianchi, miembro molesto del consejo, cuestiona mis decisiones a punto de guerra, pero como soy Dante me mantengo en absoluta tranquilidad cuando despotrica sus maldiciones. ―Se acabaron las excusas ―dice amenazador Franco ― traspasaste la línea lastimando a Gian, uno que siempre se fue de tu lado a pesar de todo, y mira cómo le pagas solo por no soltar el coño de una p**a para comprometerte con una buena muchacha como debe ser ―mis manos pican por sacar mi arma y darle 2 disparos justo en una pierna, me controlo no por miedo, aquello es nulo, es por respeto al código. Carraspeo ―perfecto si tomaremos de argumento el cruce de líneas ―entrelazo mis dedos ―tu Gian infringi
POV Liliana―No es justo ―reclamo a Dante con un puchero.―Te ves tierna ―entrecierro mis ojos en él. ―Conmigo no vengas a cambiar de tema. Me hiciste trampa en el juego ―Le propuse a Dante jugar ajedrez, en lo personal amo el juego, aprendí a jugar con Marco, pues pensé que le ganaría a Dante, hasta aposte, algo lo cual más tarde hare. ―No cuestiones mi habilidades pequeña ―me cruzo de brazo con falsa molestia, luego sonrió por la maravilla de velada de anoche, no parecía creíble como alguien frio me tan romántico, natural, risueño y encantador en la noche de ayer. Lograr parar de sonreír como adolescente recién enamorada se convirtió en tarea imposible.¿Cómo una persona recién conocida alborota sentimientos tan extraños en mí?Es
POV Liliana¿Qué sucedió aquí?―Señorita, está usted bien ―enfoco toda mi atención el hombre que me salvo, es alto, musculoso, de cabello rubio, con ojos grises claros, bastante guapo admito.―Si, muchas gracias…― ¿Porque tan solitaria? Sabe a dónde vino ――No ando sola, mi pareja regresa en un rato ―froto mi cuello con nervios.―Bien, deje sus nervios no le hare ―veo a todos los lados verificando si Dante se acerca, no creo interprete bien encontrarme sola con un hombre.― Por usted no es, le agradezco defenderme, sabrás Dios lo que hubiera pasado si usted no llega ―le soy sincera, no cualquiera se mete a defender a los demás hoy en días.―Por nada, como agradecimiento me permite su nombre.―Claro, Liliana Miller