CAPITULO XIV

Estiven no sabia que dia ni que hora era, había perdido el sentido del tiempo estando allí encerrado donde recibía el alimento solo para tener fuerzas para escapar en el momento adecuado, se encontraba sucio y desorganizado pero era lo que menos le importaba; no tenía noticias de la salud de su padre tampoco sobre Angelica donde sabía que se iba a casar, pero no tenía certeza de cuando iba a suceder y debía de estarlo odiando en este momento; por el simple hecho de haberse desaparecido después de su primera vez detestando con todo su corazón al padre y presidente de la república. Cerró los ojos, cuando sintió que había abierto la puerta dándose cuenta que era de día, vio entrar a los dos hombres de siempre pero esta vez acompañado de un tercero con una sonrisa cínica y de victoria.

― Me alegra verte tan moribundo aqui, es lo que se merecen ratas como usted ― Escupe sin importarle de quién se trataba ―, El dia que salga de aquí debe preocuparse, porque lo demandare ― Afirmó con segurid
Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP