– Entonces ... ¿Quieres cenar?
– ¿Es una cita? – Chloe alzo una ceja en un gesto seductor
– Es lo que tú quieras que sea –le seguí el juego ella rio – Aunque la verdad es que no hemos tenido muchas citas, tendremos que trabajar más al respecto – pensé en voz alta.
– ¿Qué propones?
– Que despejes tu agenda porque te quiero para mí y nuestro pequeño – Chloe me sonrió y cuando pensé que se acercaría para besarme escondió su rostro en mi cuello e inhalo profundamente, provocándome cosquillas... << ...y otro par de cosas >>
Pero nuestro intento de cita, se vio totalmente aplastado luego de que la hambrienta prensa apareciera en el restaurante que habíamos elegido, así que por mutuo acuerdo decidimos que una comida en casa era mucho mejor.&nbs
No me malentiendan, no quería apresuras las cosas entre nosotros, pero bajar un poco las luces, una música suave, un poco de vino, no le hacía mal a nadie.Fue como terminamos sentados en el sofá, disfrutando de una buena conversación y un buen vino. Entonces algo debió decirme que las cosas estaban muy tranquilas como para recibir algo de acción esta noche, pero cuando nos besamos y Chloe me siguió el ritmo estaba listo para dejar atrás el celibato en el que me había confinado y dar el siguiente paso en nuestra relación, después de todo ella me estaba dando la misma señal ¿Verdad? Estaba bastante seguro de eso, hasta que nos separamos por un segundo para quitarme la camisa y al volver con ella, Chloe estaba durmiendo.¿Cómo era eso posible? No tenía idea; En toda mi vida ninguna mujer jamás se había quedado dormida mien
- Vamos hijo - grite animando a mi pequeño. Dylan corría con la pelota hacia el arco seguido de dos chicos, apunto de taparle el camino,- Estoy libre - le grito Ethan posicionándose cerca listo para un pase. Dylan hizo un extraño juego de pies para distraer a los dos chicos que le tapaban y luego chuteo la pelota hacia atrás dándole un pase a Ethan. - Ethan avanzo un poco hasta que otro niño llego a atacar sus pies- Mari -grito al tiempo que le lanzaba la pelota - Demasiado alto como para que le quedara cómoda de atrapar, Mari tuvo que saltar y para bajarla, corrió dominando la pelota a la perfección ha solo unos cuantos metros del arco un chico larguirucho intento barrerla- Cuidado Mari - grité y tuve que resistir el pequeño chillido que quiso escapar de mi al ver lo cerca que había estado de botarla, pero ella lo salto justo a tiempo. El arquero esta
- Y así es como la chica toma el control de la situación y cree ser capaz de detener el movimiento de la tierra. - Javier dio por terminado su análisis al tiempo que se levantaba para saludar a Dylanque corría hasta nosotros. - Javier, viniste - mi pequeño abrazo a Javier con una enorme sonrisa. - Mamá me viste, di un asombroso pase de taquito y estuve a punto de saltar para golpear de chilenita - Y estoy muy feliz de que no lo hicieras, esa jugada es demasiado peligrosa Dylan. - lo tome por sus mejillas apretándolas levemente como un pollito - Nada de cosas peligrosas ¿Entendido? - el asintió - Muy bien así me gusta - deje un sonoro beso en su mejilla por el que rápidamente reclamo - Pero mamá -se sacudió avergonzado - Muy bien jovencito - lo solté - a lavarse la cara y las manos, estas todo sudoroso y sucio. Dile a los chicos que no soplaremos las velas hasta que todos estén limpios. - Bien - rezongo arrastrando los pies para obedecer - Te amo - le grite y entonces empezó a a
- Deberías cambiar esa cara de idiota que llevas - Se burló de mi Luciano. Había llegado justo a tiempo para ver como no le quitaba los ojos de encima a Chloe, incluso mientras jugaba con Dylan. Y pensar que algunas mujeres piensan que los hombres somos mono focal.- ¿De que hablas? - volví mi atención a Dylan que se lanzaba temerariamente desde el punto más alto del juego rodando sin control. - Sabes, para ser el soltero de oro eres bastante inseguro en el que respecta a tu prometida. - No, no lo soy - asegure sin siquiera mirarlo. - Si, si lo eres - ataco nuevamente. - ¡Que no! - alce la voz, algo comenzaba a picar en mi cuello. - Pero mira nada más, no están algo creciditos para estar discutiendo como niños - se burló mi hermana desde el jardín donde se mantenía sentada observándonos con Max entre los brazos. - Te amo linda - le grito mi cuñado, y ella sonrió como boba volviendo su atención a Max. Tiempo atrás este tipo de escenas solían causarme escalofríos, supongo que aho
Y hablando de sonrojados, Dylan se cayó por un largo momento lo cual llamo mi atención, mis ojos viajaron hacia el para encontrarlo totalmente sonrojado y con los ojos muy abiertos observando a una linda chica delante de él, llevaba un vestido veraniego y el cabello hecho a un lado con una flor - muy al estilo hawaiano - todo la hacía lucir realmente adorable. Pero no me explicaba del todo porque Dylan estaba tan asombrado, hasta que Chloe lo explico para mi "Es Maira, la mejor amiga de Dylan" - ¿Maira?, ¿La chica que estaba jugando futbol con nosotros hace un rato? - le murmure devuelta a Chloe, ella me guiño un ojo como respuesta y entonces todo tuvo sentido para mí. La chica que había estado jugando con nosotros y estaba toda polvorienta, que vestía camiseta de niños y llevaba un desaliñado moño, ese pequeño patito ahora parecía todo un cisne ante la mirada de Dylan.- Ya deja de poner esa cara de Dylan o iré a patearte el trasero - aclaro la pequeña amiga de Dylan con el ceño fr
- Dijiste que tenías algo que decirme, no importa lo que sea - > aunque me sentía tentado a confesarlo, guarde ese pensamiento para mí - Solo dilo y ya - Eres mi primer novio - ¿Eso es todo? ¿Porque tantos rodeos? - no entendía muy bien, yo tampoco había tenido tantas novias. - Veras, no solo eres mi primer novio oficial, si no que eres el primer tipo con el que mantengo una relación. - Bueno, a decir verdad, antes de ti no solía salir con alguien por más de una noche, pero tú ya sabes eso. No entiendo porque... - Chloe emitió un pequeño murmullo de frustración y entonces recordé algo - Aquella vez en la oficina, cuando te pregunté si había sido tu primer beso, era verdad. - ¡Bingo! Al fin lo entiendes - Pero ¿Cómo? - No es la gran cosa la verdad, simplemente nunca paso hasta que llegaste tú. - Puede que eso tuviera sentido para ella, pero como era posible que en 26 años jamás hubiese dado un beso, Chloe es una mujer bonita, joven, inteligente
De camino a la oficina sentía que alguien me estaba siguiendo y lo peor fue cuando al llegar una chica con una grabadora en la mano acompañada de un tipo con una cámara literalmente se lanzaron sobre mí. - Señorita ¿Es usted Chloe Miller? ¿Entonces es verdad que trabaja en esta empresa? ¿Así fue como conoció al soltero de oro? - Disculpa ¿Quiénes son ustedes? - intente disimular el susto que había pasado, mientras buscaba a tientas en mi bolso el pase a la empresa.- Desaparece Ximena, esta entrevista es mía - Una chica con el cabello de un color extravagante, llego corriendo a nuestro lado empujando mi primera acosadora/entrevistadora - Chloe finalmente te conozco - su mirada era demasiado impresionada o emocionada y yo estaba más que nada lista para correr, solo que no encontraba mi tarjeta para pasar los torniquetes - Te sigo desde el día uno de tu debut. - ¿Mi debut? - no recordaba haber vivido algo por el estilo - Si, ya sabes el día en que pasaste a ser una don nadie entre l
Por la tarde casi a la hora de almuerzo recibí una inusual llamada - ¿Hola? - conteste al misterioso número no registrado.- ¡Chloe! Hola, soy Esther la prima de Ethan - la alegre voz de Esther desde el otro lado de la línea me hizo relajarme, había contestado al desconocido número pensando que tal vez podría ser el mismo que llamo la noche anterior - Hola Esther, ¿Cómo estás? - Uf, agotadísima acabo de salir de una sesión para una portada, pero bueno no te quiero dar la lata por teléfono, te apetece si salimos a almorzar. - Claro. De hecho, estaba por salir - Perfecto, llego en quince minutos. Nos vemos.¡Toc! ¡Toc!Ethan toco la puerta de mi oficina parándose en el umbral - Te invito a almorzar, ¿Qué te parece? - alzo las cejas sugerentemente, con una sonrisa en los labios. - De hecho, no sé cómo decirte esto, pero te han ganado - la sonrisa de Eduardo cayo lentamente dando paso a un ceño fruncido - ¿Quién? - alego - Esther.Quince minutos después Esther se abría paso con u