- Deberías cambiar esa cara de idiota que llevas - Se burló de mi Luciano. Había llegado justo a tiempo para ver como no le quitaba los ojos de encima a Chloe, incluso mientras jugaba con Dylan. Y pensar que algunas mujeres piensan que los hombres somos mono focal.- ¿De que hablas? - volví mi atención a Dylan que se lanzaba temerariamente desde el punto más alto del juego rodando sin control. - Sabes, para ser el soltero de oro eres bastante inseguro en el que respecta a tu prometida. - No, no lo soy - asegure sin siquiera mirarlo. - Si, si lo eres - ataco nuevamente. - ¡Que no! - alce la voz, algo comenzaba a picar en mi cuello. - Pero mira nada más, no están algo creciditos para estar discutiendo como niños - se burló mi hermana desde el jardín donde se mantenía sentada observándonos con Max entre los brazos. - Te amo linda - le grito mi cuñado, y ella sonrió como boba volviendo su atención a Max. Tiempo atrás este tipo de escenas solían causarme escalofríos, supongo que aho
Y hablando de sonrojados, Dylan se cayó por un largo momento lo cual llamo mi atención, mis ojos viajaron hacia el para encontrarlo totalmente sonrojado y con los ojos muy abiertos observando a una linda chica delante de él, llevaba un vestido veraniego y el cabello hecho a un lado con una flor - muy al estilo hawaiano - todo la hacía lucir realmente adorable. Pero no me explicaba del todo porque Dylan estaba tan asombrado, hasta que Chloe lo explico para mi "Es Maira, la mejor amiga de Dylan" - ¿Maira?, ¿La chica que estaba jugando futbol con nosotros hace un rato? - le murmure devuelta a Chloe, ella me guiño un ojo como respuesta y entonces todo tuvo sentido para mí. La chica que había estado jugando con nosotros y estaba toda polvorienta, que vestía camiseta de niños y llevaba un desaliñado moño, ese pequeño patito ahora parecía todo un cisne ante la mirada de Dylan.- Ya deja de poner esa cara de Dylan o iré a patearte el trasero - aclaro la pequeña amiga de Dylan con el ceño fr
- Dijiste que tenías algo que decirme, no importa lo que sea - > aunque me sentía tentado a confesarlo, guarde ese pensamiento para mí - Solo dilo y ya - Eres mi primer novio - ¿Eso es todo? ¿Porque tantos rodeos? - no entendía muy bien, yo tampoco había tenido tantas novias. - Veras, no solo eres mi primer novio oficial, si no que eres el primer tipo con el que mantengo una relación. - Bueno, a decir verdad, antes de ti no solía salir con alguien por más de una noche, pero tú ya sabes eso. No entiendo porque... - Chloe emitió un pequeño murmullo de frustración y entonces recordé algo - Aquella vez en la oficina, cuando te pregunté si había sido tu primer beso, era verdad. - ¡Bingo! Al fin lo entiendes - Pero ¿Cómo? - No es la gran cosa la verdad, simplemente nunca paso hasta que llegaste tú. - Puede que eso tuviera sentido para ella, pero como era posible que en 26 años jamás hubiese dado un beso, Chloe es una mujer bonita, joven, inteligente
De camino a la oficina sentía que alguien me estaba siguiendo y lo peor fue cuando al llegar una chica con una grabadora en la mano acompañada de un tipo con una cámara literalmente se lanzaron sobre mí. - Señorita ¿Es usted Chloe Miller? ¿Entonces es verdad que trabaja en esta empresa? ¿Así fue como conoció al soltero de oro? - Disculpa ¿Quiénes son ustedes? - intente disimular el susto que había pasado, mientras buscaba a tientas en mi bolso el pase a la empresa.- Desaparece Ximena, esta entrevista es mía - Una chica con el cabello de un color extravagante, llego corriendo a nuestro lado empujando mi primera acosadora/entrevistadora - Chloe finalmente te conozco - su mirada era demasiado impresionada o emocionada y yo estaba más que nada lista para correr, solo que no encontraba mi tarjeta para pasar los torniquetes - Te sigo desde el día uno de tu debut. - ¿Mi debut? - no recordaba haber vivido algo por el estilo - Si, ya sabes el día en que pasaste a ser una don nadie entre l
Por la tarde casi a la hora de almuerzo recibí una inusual llamada - ¿Hola? - conteste al misterioso número no registrado.- ¡Chloe! Hola, soy Esther la prima de Ethan - la alegre voz de Esther desde el otro lado de la línea me hizo relajarme, había contestado al desconocido número pensando que tal vez podría ser el mismo que llamo la noche anterior - Hola Esther, ¿Cómo estás? - Uf, agotadísima acabo de salir de una sesión para una portada, pero bueno no te quiero dar la lata por teléfono, te apetece si salimos a almorzar. - Claro. De hecho, estaba por salir - Perfecto, llego en quince minutos. Nos vemos.¡Toc! ¡Toc!Ethan toco la puerta de mi oficina parándose en el umbral - Te invito a almorzar, ¿Qué te parece? - alzo las cejas sugerentemente, con una sonrisa en los labios. - De hecho, no sé cómo decirte esto, pero te han ganado - la sonrisa de Eduardo cayo lentamente dando paso a un ceño fruncido - ¿Quién? - alego - Esther.Quince minutos después Esther se abría paso con u
Esther inicio el cronometro, mientras marcaba un numero en el teléfono con carcasa rosa fosforescente. - Yiyi, OMG no puedo creer lo que se ha estado rumoreando toda la mañana, en verdad intentaste secuestras a mi cuñada - Esther exageraba un poco su impresión, pero me mantuve al margen observándola - Que ella que, LOL que risa eso se lo han ganada, si tu cadena quiere una exclusiva al menos deberían llegar a un acuerdo con ella. Se atrapan más moscas con miel dicen por ahí. - Esther se quedó por unos segundos en silencio y por la sonrisa en sus labios parecía que todo salía a pedir de boca - ¿Qué? ¡Enserio! Sabes, apuesto a que si le digo que vaya conmigo puedo lograr algo. Bueno nena, hablamos XOXO. - antes de siquiera cortar el teléfono rosa, Esther ya estaba haciendo sonar el otro teléfono, uno en una carcasa negra con algunas decoraciones en metálico dorado. - Xime, no puedo creer que Yiyi te haya ganado esta exclusiva, en serio yo apostaba por ti en esta - silencio otra vez -
- Chloe tiene razón, el acuerdo fue una sesión de fotos como apoyo a la entrevista, ambas ideas no pueden contradecirse. - Bueno... - el hombre de actitud desagradable se atraganto con sus palabras, pero luego recupero la compostura o lo intento pues por su cara se notaba su molestia - Y debo suponer que ustedes saben lo que nuestros lectores desean ver. Debe ser una experta para criticar de esta forma mi trabajo - se dirigió a mí. - No, no tengo idea de lo que su público pueda querer, pero esta sesión de fotos se supone que les mostrara quien soy yo, si les gusta o no eso es otra casa. Pero yo jamás usaría algo como esto, y mi oficina definitivamente no tiene terciopelo ni siquiera en las cortinas. - Usted... - Tal vez debería escucharla director - lo detuvo un tipo, que vestía como si tuviera veinte, aunque su cabello con algunas canas delatara su experiencia. - Christian - el director parecía sorprendido por su intromisión, el aludido me sonrió - ¿Cómo debería ser? - me pregu
- Ethan, tu teléfono está sonando - me advirtió mirando la escalera. Hasta entonces no lograba oír nada, pero Dylan parecía bastante seguro de lo que decía por lo que corrí escaleras arriba en busca de mi teléfono, que debía estar en algún lugar de mi habitación, los niños me siguieron entrando antes de que recordara detenerlos, mi pieza no solía ser un desorden, pero esta vez lo era, y lo más prominente de ese desorden era la montaña de revistas amontonadas. Entonces sentí mi teléfono sonar, parecía venir de debajo de mi cama me agaché bajo la cama mientras buscaba escuche la conversación entre los niños. - Esa es la revista donde aparece mamá - - Vaya, que bonita - parecía que estaban hojeando la revista, mientras yo seguía el sonido de mi teléfono - Mi mamá es realmente bonita - aseguro Dylan- Si, por eso mi tío pone cara de bobo cuando la ve - le susurro Alex burlándose de mí, entonces encontré el teléfono y me levanté rápidamente con él en mano justo a tiempo para ver como D