— Mamá, no puedes llevarte a Chloe, así como así de la oficina por si no lo has notado estamos trabajando – la señora Elena detuvo su andar - tendrás que esperar hasta la hora de salida.
— He venido a aquí para conocer a Chloe, tu eres el jefe, has algo para que pueda salir con mi futura nuera – refuto su madre
— Entonces mis empleados podrían sospechar y todo este tiempo de silencio no serviría de nada – la señora Elena pareció pensarse dos veces las cosas y aflojo un poco el agarre sobre mí.
— Por favor señora Elena, prometió ser discreta y Ethan tiene razón – entonces aflojo por completo su agarre y pareció arrepentida.
— Lo siento cariño, me he dejado llevar por la emoción. Pero tienes razón – suspire aliviada – pero por favor, no me llames señ
— ¿Un hijo? — Pregunto asentí— Su nombre es Dylan tiene 7 años – Le di tiempo para que asimilara la noticia, pero luego de un rato muy silencioso ella comenzó a hacer cálculos.— Llevas trabajando casi cinco años en la empresa y entraste de manera muy rápida, existe la posibilidad de que ese hijo sea...— No – sabia hacia donde iba, ella creía que Dylan era hijo de Ethan y que gracias a eso había logrado entrar en la empresa – No, a Ethan lo conocí al entrar a la empresa y no antes, Dylan no es hijo de él.— Vaya – Note que no solo había algo de alivio en su mirada, algo más como añoranza la cubría – ¿Cuándo podre conocerlo? - Elena era una mujer que añoraba nietos y yo que me estaba preguntando si podría aceptar a mi hijo como su nieto algú
— Vamos Cami corre – Dylan animaba al porfiado de Camilo a correr tras la pelota mi San Bernardo de 6 años quien le ladraba juguetonamente feliz de que conocer a alguien nuevo – Vamos, ve por la pelota solo tienes que moverte un poco – insistió Dyaln sin rendirse.— Vamos Camino ve por la pelota – intente esta vez yo,Chloe que hasta ahora había estado sentada a la sombra una hamaca se levantó para tomar la pelota que un poco antes Dylan había lanzado para Camilo— Vamos grandote – sonrió mientras lanzaba la pelota, increíblemente Camilo se levantó alocado y corrió, pero no precisamente para llegar a la pelota, ni cerca, más bien se lanzó sobre ella, derribándole en el suelo.— ¡Mamá! – asombrados Dyly y yo corrimos a ayudarla con el gigante San Bernardo que ahora se encontraba
— ¿Muy cansado para una carrera? –— Nunca – le devolví la sonrisa y nos colocamos en posición – Tres vueltas a la piscina.— Bien— Si gano quiero un premio – ella enarco una ceja con curiosidad, pero no dije que era lo que quería.— Esta bien, si yo gano también querré el mío.— ¿Lista? – la vi asentir y comencé la cuenta – Uno— Dos— Tres – Ambos nadamos a todo nuestro potencial, en la primera vuelta le saque una buena ventaja pero al doblar me demore demasiado y ella solo dio una voltereta bajo el agua para seguir, entonces en la segunda vuelta me logro alcanzar para al llegar a la tercera dar una voltereta una vez más y sacar una brazada de ventaja pero un poco antes de llegar al final se detuvo dejándome como ganador - Gane &nda
— Despierta mamá – Dylan me movía suavemente – mamá, mamá – insistía sacándome de mi cómodo sueño, me removí un poco, pero tal parece que no fue suficiente para el – Tierra a mamá, tierra a mamá – ahueco su palma en su boca para hacerse escuchar atreves de las frazadas que me cubrían.— ¿Que pasa amor? – hable desde bajo estas.— Levántate mami, ya es de día – corrió lejos de la cama y luego sentí como se iluminaba un poco más la habitación – Mira, mira.— ¡Ah! - gruñí como un mounstro mientras me levantaba - ¿Por qué osas despertarme tan temprano vil alimaña? – mi imagen de recién levantada, mas mi cara de falsa furia y mis manos en forma de garra no hicieron más que hacer reír a D
Para ser mayores, los padres adoptivos de Maira resultaron bastante modernos, Francis trabaja como periodista en uno de los diarios más importantes, e Inés es decoradora de interior en una empresa que no solo se dedicaba al diseño de interiores, sino que además llevaba a cabo creaciones, ambos habían esperado por hijos, hasta que finalmente Maira llego a sus vidas. Ethan y Francis jugaron con los niños mientras Inés me mostraba su estudio, lleno de colores y bocetos de diseños, pasamos la tarde juntos y para la hora de irnos Dylan no quería soltar a Maira, alegando que la echaría mucho de menos. — Vamos cariño, volveremos en unas semanas luego de año nuevo y podrán jugar otra vez — Pero mamá — Dylan debes traerme un regalo de navidad – le sonrío Maira – yo también te tendré uno. — Mai – — Lo estaré esperando – Dylan asintió sin decir más – Adiós, nos veremos luego. — No vemos – la soltó luego
Luego de un fin de semana tan movido como lo había sido el pasado, apenas si había tenido tiempo de arreglar las maletas para mi viaje, y con todos los planos que me había quedado revisando hasta casi las ocho de la mañana, tampoco había tenido mucho tiempo para dormir.Por suerte Jazmín había llegado muy temprano encontrándome con cómo le dice ella dibujos de edificios tirados por todas partes, me había dado algo de desayunar y me había mandado a dormir, aunque fueran un par de horas.Pero el par de horas fueron muchas más de las que había esperado, después de todo estaba realmente cansado había despertado a las cuatro y mi vuelo salía a las siete por lo que tuve que correr, una ducha rápida un poco de ropa a la maleta y recopilar todos los planos y notas que había estado haciendo la madrugada pasada.— Mijo &ndas
— ¿Qué tu qué?— Chloe, ella se llama Chloe y nos vamos a casar ¿Me escucharas ahora?— Espera – tomo un vaso con agua y se lo trago – podrías repetir lo último que dijiste – tomo otro vaso— ¿Me escucharas ahora? –— No antes de eso – volvió a tomar del vaso— Nos vamos a casar – y entonces escupió toda el agua que tenía en la boca— ¿Era necesario?— Si – arrastro la "i" – Siempre quise hacer eso con una noticia impresionante – pero ¿De verdad se van a casar?— ¿Escucharas la historia?— Tienes toda mi atención – sobre pronuncio cada palabra y no pude evitar reír, definitivamente esta mujer había escogido bien su carrera tras un flashLe conté un poco de
— ¿QUE? – si al ver las fotos de Ethan había capturado mi atención, ahora la tenía más que nunca.— Pero no con cualquier mujer, no – alargo la "o" mientras la cámara la mostraba moviendo el dedo índice de un lado para otro – lo hemos pillado con nada más ni nada menos que la súper modelo Esther Figueroa – fotos de la susodicha comenzaron a aparecer, la mujer era hermosa alta y curvilínea su cabello castaño claro con unas californianas color rosa pastel al más puro estilo de tendencia balayege, pero lo que realmente me mato fue una imagen de primer plano de su rostro, ella era hermosa no solo un buen cuerpo si no que perfecta, pero las cosas no podían ser como la conductora lo decía, no podía ser así ¿verdad? Con Ethan teníamos un trato, nos debíamos fidelidad "Tal vez el solo le estaba dando una despedi