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Capítulo 2: No me toques

Harry

-así que eres el hijo del bastardo de Thomas Death- siento un golpe en la mandíbula

-si…. El mismo, el que se acostó con tu mujer que ahora es mi madre- otro golpe más a mi rostro, ya perdí la cuenta.  

-te crees la gran m****a por ser su hijo, tu padre es un maldito asesino, mato a mi hermano-

-¿cuál? El imbécil que lo traicionó y estuvo desviando el dinero de la empresa, el bastardo que violaba mujeres y luego las asesinada, déjame decirte que basuras como esa no deberían estar en este mundo- un patada en el estómago.

-todo eso es mentira, fue una mentira que invento tu padre para justificarse, enserio eres tan ingenuo- ¿ingenuo?

-me importa una m****a porque lo mató, no es mi problema, si tienes que reclamar algo, hazlo con él, por si no lo sabes nuestra relación no es del tono cercana, si me matas, para él es como si nada hubiera pasado-

Me importa una m****a lo que le suceda a mi padre no suma ni resta a mi vida, desde los 13 años Sali de esa casa que era un infierno, comencé a relacionarme con personas no tan inocente y es así como comencé a construir mi imperio, soy dueño de la mayoría de los bares de esta ciudad.

-entonces este hijo de papi amanecerá con la boca llena de moscas-

-déjame decirte una cosa bastarda, si quieres seguir vivo es mejor que me sueltes no querrás verme molesto, no soy para nada compasivo- una advertencia.  

En ese momento se escucha un tiro y el tipejo cae al suelo. Uno de mis hombres lo sujeta, no…. Este imbécil es mío.

-suéltenme, quiero acabar con este hijo de perra, que sienta lo que es golpear a Harry Death-

Comienzo a golpear la cara de este imbécil que se atrevió a tocarme el rostro, lo que más odio en este mundo es que la gente me toque sin mi consentimiento.

-¡basta Harry vas a matarlo!- me lo advierte Max, sin previo aviso tomo su arma y disparo.

-recojan esta basura, saben qué hacer con él- salgo de la habitación y veo mis nudillos, están sangrando.

-es mejor que te calmes, tenemos que ir al bar de Luiss dice que hoy hay una nueva zorrita- lo que necesito ahora es descansar, mujerzuelas es lo que mas hay en el mundo.

-me importa una m****a quien esté, necesito un trago- subimos al auto y nos dirigimos a ese bar de mala muerte

Ingreso noto que está lleno, hay bastante gente, alguien comienza a hablar en un micrófono, escucho que presentan a una tal “Eda”

-que deseas cariño- escucho a una de las camareras. Mi mirada va a su cuerpo, no está mal.  

-tráeme lo más fuerte que tengas- estoy esperando la llamada de confirmación del negocio que tengo planeado hacer. Uno que aumentará mas mi imperio.  

Las luces se apagan, ¡qué molesto!, Una luz alumbra la tarima y es allí cuando la veo, una mujer bella y sensual tiene un cuerpo de infarto y unos ojos negros como la noche, una cabellera larga, lo que lleva puesto no deja nada a la imaginación, putas como esas les encanta ser el centro de atención.

-mira que belleza, ¡Dios! Ya me la imagino en mi cama- escucho que dice Max

-deja de hablar estupideces, tenemos mejores cosas que hacer que estar viendo a estas mujeres de la vida fácil- aparto mi mirada.

-no te hagas, veo como la miras, qué tal si la compro esta noche para ti, tal vez así se te quita todo ese enojo- sonrío de lado

-no quiero que me vaya a contagiar alguna enfermedad esa mujer- lo digo con asco, en ese momento las luces se encienden y nuestras miradas se conectan, me quedo atraído con sus ojos, ella me mira igual manera y algo se mueve dentro de mí , termino mi trago y salgo de ese lugar, recibo la confirmación, el tarto esta hecho ahora si puedo descansar

-Max, has que me den una habitación para descansar un poco y no quiero que ninguna zorra me moleste- él sonríe luego ingresa al bar

“Eda” ese nombre pasa por mi mente, que extraño nombre, jamás lo había escuchado. Esos ojos negros no se me quitan de la mente

-ve a la habitación VIP que está en el fondo- me informa Max, un lugar corriente.

-no quiero nada de distracciones- ingreso a esta y me recuesto en la cama, ya necesitaba descansar, miro mis manos y aún están cubierta de sangre.

Escucho un pequeño ruido, ¡mierda!, dije que no quería a nadie aquí

-si eres la puta que me mandaron es mejor que te largues, no estoy de humor en este momento- porque Max nunca me hace caso, bueno si está aquí es para que me atienda, estoy por decirle que ingrese

-gracias- ¿gracias? Se siente feliz por irse de aquí la muy zorra, salgo de la habitación

--¿gracias? Crees que soy una persona bondadosa chiquilla- la miro, me doy cuenta de que es la bailarina de hace un momento Eda.

-dime acaso crees que tengo la cara de estúpido-

-no… no quise decir eso solo… que… usted me dijo que me vaya- lo que tiene que hacer esta puta es complacerme nada más, en ese momento me mira fijamente y ve mi mano ensangrentada, sale del lugar y veo que está buscando algo, sale con una especie de botiquín, intenta hacerme sentar y comienza a limpiar mi herida   

-siéntese es mejor que le limpie esas heridas se le podrían infectar- como se atreve esta zorra a tocarme sin mi consentimiento, me suelto de su agarre y coloco mi mano en su cuello, comienzo a presionarlo un poco

-¡quien m****a te dijo que puedes tocarme sin mi consentimiento perra!- presiono más su cuello, esta puta debe aprender modales

-lo… lo.. siento…- comienza a suplicar, tiene que aprender modales, la suelto y la tiro a la cama, no tengo tiempo para estas estupideces, es mejor que me largue de aquí ya me amargó la noche

-dile al imbécil de Max que lo espero en el auto- salgo de ese lugar, Eda, Eda te voy a enseñar modales a las buenas o a las malas

Espero en el auto unos momentos, sale Max y tiene una sonrisa en la cara, se ajusta la camisa.

-pensé que te ibas a quedar toda la noche, ¿Qué? La nena no te puedo satisfacer- se burla

-zorras como esa no necesitan de mi tiempo, larguémonos de aquí, tengo mejores cosas que hacer-

-¿no paso nada?-

-amigo…, esa mujer me costó bastante dinero y si no la quieres tu yo la voy a disfrutar esta noche- que hace una llamada

-dile a Luiss que me mande a su putita a la dirección que te voy a enviar- frunzo el ceño no me gustaron esas palabras no se por que razón.  

-y se puede saber a dónde vas a llevarla- interrogo.

-a tu casa amigo, la mía está muy lejos y necesito distraerme un poco-

-has lo que se te dé la gana, solo déjame dormir- lo que menos necesito es escuchar gemidos.

-hermano eso no te lo puedo prometer, la voy a hacer gritar toda la noche- imbécil, me rio.  

-larguémonos de aquí necesito una buena ducha- Eda….. vas a ser de mi amigo ahora.

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