Litza Cooper Después de una ducha junto a mi esposo salimos de nuestra habitación dispuestos a conocer a nuestras hijas, Darek me contó a detalle lo que nos ocurrió y solo puedo estar agradecida de esta segunda oportunidad de vida. Ninguno sabe lo que me paso, lo que me he convertido, pero yo me siento totalmente igual a como era antes de quedar embarazada de mis pequeñas. Cuando estuve dormida solo sentía la necesidad de llamar a Darek en medio de la nada, sentía que me necesitaba y sé que su mundo entero soy yo sin importar que tenga varias razones por las cuales continuar. Somos dos almas unidas, vivimos por y para el otro, si uno de nosotros llegase a faltarle al otro, ¿qué sería de nuestras vidas? ¿Cómo podríamos superar la perdida? Son preguntas que me hago, no puedo creer que estuve a punto de dejarlo solo. Llegamos agarrados de la mano a la sala en donde mis hijos son los primeros en saludar, nos abrazan con tanto amor. Son tan pequeños para comprender todo lo que ocurre a s
Emeric D´Oleo Siempre he sido fiel creyente de que todo en la vida ocurre por y para algo, con la excepción de que la diosa de la luna me está jodiendo una broma «¿Cómo es posible que la hija de mi alfa sea mi mate?» Pregunto en mi mente al tener la oportunidad de cargarla por unos minutos hasta que la señora Adams termine de alimentar a su hermana. La pequeña Kayla, no deja de burbujear saliva en su boca, mientras que solo deseo dársela a su abuela y salir corriendo de allí. No soy un hombre lobo longevo, sin embargo, siempre quise conocer a mi mate para por fin dejar de sentirme solo y tener alguien para consentir, cuidar y que me apoye cuando mi mundo se esté por caer sobre mi cabeza. —Eres bueno con los niños —halago la señora Adams, me limité a darle una sonrisa sin mostrar mis dientes. No quería que supiera lo incómodo que me siento al conocer a mi mate en su nieta y que es probable que Darek me arranque el corazón al enterarse de que su hija ya tiene una pareja destinada. —
Darek Archer Un año después…Hace un año llegue a casa con la bebé en mis brazos, mirada totalmente vacía, le entregue la cachorra a su madre sin siquiera decir una palabra o responder a sus preguntas que lanzo después de arrullar a nuestra hija en sus brazos. Pase directo a mi oficina, tome un trago enorme desde la misma botella de whisky sintiendo como este quemaba mi garganta a su paso, no quería hablar con nadie en ese momento.Horas después me encontré con mi esposa en el jardín, ella miraba la luna y por nuestra conexión podía sentir su preocupación, pero también su felicidad al tener a su hija de regreso, Litza no tardo en cuestionar para saber lo que ha ocurrido y porque Emeric no había regresado conmigo.—Tuve que hacer un trato con Lucían para tener a nuestra hija de regreso —le dije, Litza permanecía callada en espera de que prosiguiera con mi relato—. Para que se cumpla lo acordado pidió una garantía, te quería de regreso —susurre lo último notando que su corazón se acele
Emeric D´ OleoLa primera semana estando aquí me la pasé en la habitación, mi puerta no tenía seguro y sé que lo hacían para tentar mi suerte, sin embargo, le prometí a Darek permanecer fuerte hasta entonces, por lo que no puedo fallarle. Nadie ha intentado molestarme o venir a mi aposento hasta ahora, ya que ingresa Lucían cargando su típica y arrogante expresión.—¿Estar aquí adentro no te hace sentir como un perro enjaulado? —interrogo con burla.—Prefiero estar aquí que rodeado de colmilludo —le digo.—Pretende pasar dieciocho años encerrado aquí o me estás diciendo que tu alfa hará algo para sacarte de este lugar, ya que de ser así nuestro trato se romperá e iré por lo que me pertenece, pero esta vez me encargaré de arrancar el corazón del híbrido de su pecho —detallo con una sonrisa siniestra—, espero verte presente en la cena —añadió para salir de la habitación.—Bastardo —susurré cuando la puerta se encontraba cerrada.Volví a recostarme, no faltaba tanto tiempo para la cena y
Litza Cooper Este año ha sido caótico, angustia y soledad hasta que Darek y yo logramos reconciliarnos, sin embargo, la opresión en mi pecho producto de mi ansiedad por cada día que transcurre sabiendo que cuando mi pequeña Kaily cumpla su mayoría de edad el monstruo que hizo de mi vida un infierno vendrá por ella me hace querer huir lejos con mi pequeña. Saber que no puedo correr a ningún lado porque dañaran a Emeric es lo que me mantiene en estasis. No quiero que salga perjudicado por una decisión que tome, mi deber es ser una luna y mantener la calma en momentos como estos, sin embargo, soy una madre desesperada por el bienestar de sus hijos e hijas. En mis ojos no quedan lágrimas para derramar, por lo que debo mantenerme firme frente a mis hijos para que ellos crezcan en un ambiente sano y de amor como alguna vez lo soñé. Hoy no era posible que siguiera con vida, pero mi esposo consiguió información de una bruja que nos dejó sorprendidos, me he convertido en una criatura que tie
Emeric D´ OleoMi mente no ha estado del todo bien estos días, no puedo concentrarme y mucho menos huir de este lugar, no sin poner en riesgo el trato de Darek y su vida. Nadie debe morir por mi culpa y si debo perderme, olvidar todo lo que soy, lo haré solo para mantener mi familia a salvo.Todo estaba en orden el primer año de estar aquí hasta que llego la mejor amiga de Lucían, ella es fuerte y su control mental es de los mejores. Me ha estado haciendo olvidar y hacer cosas que no quiero, se ha obsesionado con tenerme y el vampiro se hace de la vista gorda, siempre y cuando lo que haga Rebeca no termine matándome.No le importa mi vida, ni nada de lo que ocurra, lo único que quiere es que al fin pasen los años para ir a reclamar lo que le pertenece. Trate de asegurar el bienestar de mi mate dejando la carta en manos de Litza, sin embargo, Lucían me descubrió y le hizo olvidar todo lo que dije a la luna.Hoy ya se cumple ocho años desde que estoy en este lugar, el tiempo avanza rápi
Darek Archer El tiempo transcurre, esperaba tener una solución, pero con los años nada se me ocurre para evitar que mi pequeña caiga en manos de Lucían. Mis cachorras ayer cumplieron sus nueves años e iniciaron sus entrenamiento a los ochos, tal y como empezó Kalen y Jax. Mi deseo fue que mis hijos vivieran una vida normal sin sentirse amenazados, y aunque ellas no lo sepan y ven el entrenamiento como parte obligatoria, me atrevo a confesar que siempre los llevo hasta su límite. Mis hijos son híbridos, Kalen sigue con esa parte dormida, sin embargo, mis pequeñas se alimentan de sangre desde temprano y espero que esto al menos sea benéfico, ya que las hará más fuerte. Hoy Kalen celebra sus dieciséis años, le quedan al menos nueve horas para convertirse en lobo, se encuentra de camping con Jax y sus amigos. Sean vueltos dos adolescentes bastante extremos con el deporte, me siento orgulloso de ellos, comparten casi los mismo gusto en todo. El año pasado fuimos de a escalar una montaña
Litza Cooper Cinco años después… Como madre debemos estar acostumbradas a ver a nuestros hijos crecer, me cuesta asimilar que mis pequeños, Kalen y Jax tienen veinte y un año, ellos son alegría y energía que brindan calidad a nuestras vidas. Son muy unidos, ellos han optado por estudiar en una universidad cerca de la manada, como a tres horas en auto desde aquí, sin embargo, se instalaron en los apartamentos en el recinto y aunque sé que pueden venir e ir cuando quieran, no me gusta tenerlos tan lejos. Aunque tengo 41 años, mi envejecimiento se detuvo a los veinticinco con exactitud, por otro lado, Darek tiene 56, sigue idéntico a como lo conocí. Cuando mis gemelas alcanzaron la edad de cinco años decidí no tener más hijos y mi esposo estuvo de acuerdo con la decisión tomada, es suficiente para nosotros tener cuatro preciosos jóvenes. Mis hermosas niñas tienen 14 años, no quisiera seguir contando sus edades, sin embargo, el tiempo transcurre en mi contra. Odio esto, ellas entrenan