¡Hasta que por fin!-A ver, tomate la sopita, por la mamá, a ver a ver…-el timbre la casa de Lucia suena de manera incontrolada- ¡Ya voy! ¡ya voy! -Lucia estaba dando de comer a sus pequeños, cuando abre la puerta, su semblante palidece, como si hubiera visto un fantasma, Cristopher estaba frente a su puerta.- ¿Qué haces aquí? - ella estira su brazo, tapando la puerta, para impedirle el paso-Amor, déjame entrar, quiero hablar contigo, no sabes cuanto te necesito, quiero que nos vayamos lejos de aquí, donde sea querida, donde sea- Cristopher esta abatido, su cara de cansancio refleja el estrés que carga a sus espaldasLucia se queda mirándolo, lo piensa dos veces para dejarlo entrar, sin embargo, termina abriendo totalmente la puerta, él se abalanza sobre ella y le da un abrazo, la besa apasionadamente, aunque ella esta dudosa, no deja de corresponder su beso.-Lucia, alista lo que los niños y tu necesiten, lo básico, nos vamos por tierra para Panamá, serán dos días de viaje, pero s
Tratando de tenderle una trampa a Cristopher Cristopher sale directo a la bodega en donde tiene secuestrada a Serena y Amanda, ha perdido totalmente la cordura, sus pensamientos han tomado un rumbo equivocado y solo se ha dedicado a pensar en la forma de aniquilarlas, pero lo más importante, deshacerse de los cadáveres sin dejar ninguna huella, una forma que habia planeado, era enterrarlas en un bosque cercano despues de matarlas en la noche.Al llegar a la bodega tiene su arma lista para disparar en caso de que alguna de ellas dos ponga resistencia.Mientras tanto en la bodega, aunque ha pasado muy poco tiempo desde que las dos están secuestradas, Amanda está muy débil, el haber estado secuestrada tanto tiempo le causo un impacto a su cuerpo, asi que simplemente permanece tirada en la vieja cama tratando de recuperar la mayor energía posible, también está deteriorada mentalmente, y la búsqueda que tuvieron el día anterior con Serena la habia agotado aún más.-Amanda, no sé cómo lo h
Una locura sin medidaCristopher se queda mirando profundamente a Serena, las dos están despavoridas, por más que ella lo esté desafiando, por más que le esté pidiendo su muerte, siente miedo, y es inevitable que él no se dé cuenta. Por el contrario, Amanda, esta tan débil, que ni se esfuerza por suplicar ya por su vida, acabo de caer en cuenta que está totalmente perdida, que por más que luche sino la mata él, la mata el encierro.-Cristopher ¿Qué esperas? Mira mátame- Serena lo seguía retando, no paraba den hacerlo, el ambiente se estaba tornando tenso y Christopher estaba más ansioso aun, nunca habia matado a alguien, pero era capaz de hacerlo, necesitaba hacerlo, o de lo contrario se iría a la cárcel, él pensaba que con matarlas se iba a liberar de una dura condena.-Levántate de ahí Serena-él la sigue apuntando con el arma, Cristopher comienza a sudar y su mano le tiembla- ¿Estas temblando? pinche cobarde-Serena le da una risa de burla.Él siente como la mirada de Serena lo inti
En casa de LuciaLucia, como ya lo tenía planeado, tenía que posponer un poco más la supuesta huida con Christopher, necesitaba que Carlos lo persiguiera, y confirmar si sus sospechas eran reales, en realidad estaba demasiado confundida. Aunque su hija no estaba enferma, era lo único que podía decir para que él fuera hasta su casa.Como lo prometido, en cuarenta minutos el timbre de su casa estaba sonando, ella abre la puerta rápidamente y ve que es Christopher, él esta con cara de pocos amigos.-Hola, sigue- ¿Cómo está la niña?-Ya debemos irnos al hospital. ¿Cómo estas tu?-Bien, espero que no tenga nada grave, porque mañana mismo nos largaremos de aquí- él entra con paso firme y se sienta en la sala de estar de Lucia.Ella lo observa de arriba a abajo a ver si notaba algo raro, cuando llego a sus pies, noto como su zapato tenía una gran mancha de sangre, y unas cuantas gotas más manchaban la bota de su pantalón. Ahora si estaba sospechando de la peor manera de él, quería gritarle
Una pesadilla que tal parece no tiene fin AmandaNo puedo evitar dejar de mirar a Serena, está congelada, el rostro de la muerte es gélido, es inerte, ella está tomando unas facciones muy extrañas, jamás me habia acercado a un muerto, cuando mi madre falleció, solo pude verla a través del vidrio del ataúd, y ni siquiera recuerdo ahora como era su rostro, yo estaba tan pequeña, que juro que no sabía distinguir entre la vida y la muerte, pero ya encontrarse con esta última tan de cerca es totalmente diferente, es encontrarse con una realidad maléfica, una realidad que al fin de cuentas ninguno vamos a escapar.Los primeros minutos a su lado sentí nauseas, escalofríos y tuve visiones horribles, la vi cómo se levantaba. Como se me acercaba y con sus ojos hundidos me amenazaba, luego yo cerraba los míos y nuevamente estaba ahí tirada, tan fría e inconsciente, fueron como unos treinta minutos de pánico total, pensé que me iba a morir junto a ella, pero cuando la vi, que hizo un pequeño mov
Una luz en medio de la oscuridadCristopher confiado de que estaba totalmente solo, comienza a alistar unas bolsas oscuras para envolver el cadáver de Serena, unas cinta de pegar y unas cuerdas, también saca la pala y la monta a la camioneta, y extiende en la parte del baúl una especie de tela, esto con el objetivo de que no cayera sangre de Serena.Carlos lo observaba oculto desde una de las esquinas de la bodega, al ver lo que estaba haciendo, sabía que no era necesario ser muy astuto para saber que algo se traía entre manos Cristopher, sentía en su interior como si un cuchillo atravesara su pecho, la idea de saber que Amanda estaba muerta le causaba escalofríos, lejos estaba de saber que ella estaba viva todavía, que la pobre que estaba condenada a ese destino era la otra amante.Cristopher despues de haber organizado las cosas en su camioneta entra nuevamente a la bodega, dejando la puerta abierta, asi que Carlos se asegura de que no lo vea y entra detrás de él, se esconde detrás
¡Libre de nuevo!La sangre corre por mi nariz, me siento demasiado débil e impotente, pero como puedo salgo en busca de Carlos, no quiero que se vaya detrás de Cristopher, él podría hacerle daño y ya me aleje de él una vez, ya no quiero hacerla una segunda.-Carlos, no me siento bien- él despues de dispararle a Cristopher se me acerca, me toma en sus brazos y me abraza empedernidamente, sus brazos son suaves y cálidos, la luz del día molesta mis ojos, pero jamás me habia sentido tan feliz por poder verla, me refugio en los brazos de Carlos, pierdo todo sonido a mi alrededor, solo puedo refugiarme en el latido de su corazón, apenas puedo sentir como sus brazos me acarician la espalda y su cabeza esta sobre la mía.A decir verdad, pensé que este momento jamás llegaría, sus brazos eran mi mejor refugio, sentirlo cerca de mí me hacía sentir la mujer más afortunada del mundo.Solo faltaron unos minutos ara que un montón de policías estuvieran invadiendo la bodega, también se acercaba un pe
Un hermoso reencuentroHan pasado un par de días desde que me rescato Carlos, mi cuerpo aún está demasiado débil y no me permiten hablar con mi familia de nuevo, solamente he podido hablar con ellos por telefono, las infecciones que adquirir por las condiciones insalubres en las que estaba, habían hecho que mi cuerpo hubiera sufrido varios daños, toda mi piel estaba cubierta de una especie de sebo a causa del mugre y ni hablar de mis partes íntimas y de mi cabeza, tuvieron que raparme el poco cabello que me quedaba, estaba en estado de desnutrición. Lo único que permanecía en firme era las ganas de vivir que siempre conservaba.Cristopher aún seguía desaparecido, eso lo sabía porque un par de policías cubiertos por una bata entraron a mi cuarto a indagarme sobre todo lo que habia vivido en mi encierro, y me confirmaron que él seguía prófugo de la justicia, yo mantenía todo el tiempo vigilada, pues suponían que él quisiera venir y acabar con el trabajo de asesinarme, ya que le quedaba