Katrina con los ojos inyectados en sangre, llego a casa, empaco su equipaje y bajo las escaleras.Ya no había razones para quedarse, incluso si ella estaba embarazada de un desconocido no significaba que ella hubiera traicionado a Alan, fue primero el quién derrumbo su matrimonio desde un inicio.—Si te quise Alan, pero tu puta actitud, me decepcionó, así como mi amor ti, todo se fue a la basura—siseo Katrina.Katrina se sentía muy tonta por esperar algo bueno de Alan, tres precisos años de su vida se vieron desperdiciado al lado de un hombre que no valía la pena.Ahora solo se enfocaría en una sola cosa, cuidar del bebe en su vientre, ese fue su único consuelo.—Leila—dijo Katrina desconcertada.Al pie de escalera, Leila la espero con un pequeño maletín.—Leila, ¿Qué haces?—pregunto Katrina.—Señora, si usted se va ya no hay razones para que yo me quede—Leila se expresó con firmeza.Katrina abrió los ojos sorprendida y dijo— Leila no es necesario que renuncies, Leila suspiró y respo
—¿Ahora que harás Katrina?— Pregunto Leah preocupada. —Pienso viajar y tomarme unas cortas vacaciones, he estado bajo mucho estrés estas últimas semanas que necesitó relajarme por el bien del bebé —dijo suspirando Katrina. —Es una genial idea, ahora nada te ata de irte a donde quieres; sin embargo, me siento triste por saber que no estarás cuando de a luz —hablo Leah entristecida. —No pongas esa cara, Leah yo estaré de regreso antes de que eso suceda. —Me lo prometes. —Si, prácticamente somos como hermanas, así que estoy ansiosa de conocer a mi pequeño sobrino —agrego Katrina con una sonrisa. —Eso me reconforta, pero ahora que lo pienso nuestros hijos crecerán juntos, imagínate cuando los llevemos al jardín de infantes, aunque será un problema la diferencia de un año entre ellos, pero puedo resolverlo. —Hablo Leah mientras sus ojos brillaban de emoción. Katrina puso los ojos en blanco y dijo—Leah no crees que estás apresurando las cosas, aun ni siquiera sé si será, niño o niña.
-HOTEL DORADO-En un abrir y cerrar de ojos, eran las 7 de la mañana. Katrina se frotó el cuello mientras bajaba del taxi junto a Leila y caminaron hacia el hotel.Katrina entró al hotel, y se acercó a la recepción mientras Leila le daba el equipaje al botones en el vestíbulo.—Me puede decir su número de reservación —dijo cortésmente la recepcionista. Katrina con una ligera sonrisa contesto— Mi número de reservación es 623839.Tan pronto la recepcionista vio los datos de huésped de Katrina dijo—Espero su estadía aquí sea placentera señorita Johnson.Katrina recibió la llave de su habitación y se dirigió al vestíbulo donde Leila estaba sentada.—Señorita Katrina, por favor siéntese—dijo Leila suavemente.Pronto un camarero vino a servir en el momento en que se sentaron. Mirando la copa de vino frente a ella, Katrina entrecerró los ojos ligeramente.—No bebo alcohol—dijo Katrina con seriedad.—Entonces, ¿qué quiere beber? ¿Jugo de frutas?—Pregunto el camarero.—Si un jugo de frutas, y
Katrina con una gran sonrisa camino descalza por la arena a las orillas del mar, una hermosa vista y la fresca brisa la ponían muy feliz, siente una indescriptible sensación de alivio y felicidad en su corazón cuando se imagina caminar con su futuro hijo o hija por este lugar. Es tan alegre que tiene ganas de cantar y bailar. —¡Las cosas van genial!—Grito Katrina Tanto tiempo tuvo que reprimir tantas cosas que descuido su propio bienestar mental y físico, ahora que estaba libre de ese tormentoso matrimonio, es más feliz que nunca el dolor de la traición desapareció de su corazón. Katrina siente una enorme paz ahora que lo pensaba bien, desea quedarse un tiempo en Peerplig hasta que tenga a su bebé, aquí ella es una persona que no es conocida por muchas personas, podría vivir sin tener que toparse con personas que realmente le desagradan. Ella quiere que su bebé se desarrolle en un ambiente que no le cause ningún tipo de estrés y eso no se le permitiría en Zalley, es consiente de qu
Si Katrina no se equivoca, Alan actualmente ya informo de su divorcio al público, por lo que ya todos saben que están separados, acaso ocurrió algo por lo que Alan insiste en hablar con Katrina. Dado esto, Alan no puede estar llamando con buenas intenciones. Pero no puede estar llamando solo para quejarse, ¿o sí? Katrina contesta el teléfono, su voz es fría y distante —¿Qué quieres? Ella ya no se permitirá más ser intimidada por Alan. Si él vuelve a abusar de ella verbalmente, colgará el teléfono sin dudarlo y bloqueará su número de inmediato sin importar cuantos números tenga. El negocio de Alan es siempre estar frustrado y molesto. Pero Katrina no se quedará quieta y no se lo aceptará. Cuando Katrina contesta el teléfono, está lista para colgar en cualquier momento. Sin embargo, lo primero que dice Alan es —Katrina, mi amor regresa a casa... ¿Dónde estás?... mi esposa te extraño. ¿Alan está loco para llamarla así? Ahora que están divorciados, él la llama descaradamente. Katr
Alejandro miró alrededor y pronto una idea le surgió, haciéndolo sonreír brillantemente.—Señorita Johnson, ahora saldremos— dijo Alejandro.—¿Cómo?—pregunto Katrina curiosa.De repente, Katrina sintió un ligero agarre en su muñeca, al mismo tiempo que Alejandro la atraía hacia atrás y la cargaba en sus cálidos brazos. Antes de que pudiera liberarse, él le dio la vuelta y la encerró entre sus brazos. Sumergiendo su cabeza en su oído.—Esta es la mejor manera de salir sin levantar sospechas— le susurro al oído a Katrina.Katrina desconcertada y avergonzada, abrazo a Alejandro del cuello, ocultando su rostro del público, saliendo con éxito del restaurante.El tiempo se detuvo. Katrina rígida no estaba segura de cuánto tiempo estuvo en sus brazos. Ella quería bajarse, pero de alguna manera Alejandro era impotente.—Podría bajarme, ya estamos afuera—hablo Katrina evitando la mirada seria de Alejandro.Katrina suspiró cuando se dio cuenta de que este hombre estaba decidido a mantenerla en
'¿Ella está embarazada?' —Pensó Alejandro mientras miraba a Katrina con una mirada herida.El sabe que no tiene nada que ver por ahora con Katrina y que tampoco tiene ninguna relación con ella, pero le dolía el corazón por ese hecho.'¿Es por eso que su exesposo la busca? ¿Tiene miedo de que se lo quite, por eso huyo?' —Alejandro pensó mientras sus cejas se arrugaban profundamente.Recordando que Katrina aún estaba de pie delante de él con una mirada confundida, la cargo en sus brazos dejándola aún más confundida.—¿Qué está haciendo? —Pregunto Katrina nerviosa al ver el rostro frío de Alejandro, se preguntó si le molesto que haya vomitado en medio del pasillo.Katrina realmente no comprendía Alejandro, acaso el hecho de que esté embarazada lo disgusto, katrina de alguna manera vio que Alejandro tenía un poco de interés en ella, pero Katrina no quería verse involucrada con él, por el hecho que Isabella esperaba un hijo de Alejandro, por lo que lo ignoro para no sentirse incómoda con
En todo el camino, Katrina y Alejandro permanecieron en silencio, Katrina se siente nerviosa de alguna forma, aunque Alejandro solo la beso para ayudarla, no puede quitar tan fácilmente la imagen de ellos dos besándose, pero ella necesita mantenerse inalterable, así que puso toda su atención en la vista de la ventana, después de un buen tiempo en carretera llegaron a una elegante y lujosa residencia con un enorme jardín, el portón se abrió y el auto se estacionó.Un hombre en un elegante traje negro, como un pingüino, abre la puerta, Alejandro baja lentamente, luego extiende la mano para ayudar a Katrina a bajar del auto.Katrina miro curiosa los alrededores, a diferencia de la residencia Bianco este lugar es mucho más hermoso y grande —Es un gusto conocerla Señorita Johnson, soy el mayordomo de esta mansión Andrew Gómez si necesita algo no dude en decírmelo —dijo Andrew extendiendo la mano con una amistosa sonrisa en el rostro, para este anciano ver a una bella dama al lado de Alejan