Nadie se atreve a preguntarme como sé que él estuvo en esa parte del país o si es buena idea ir hasta allá cuando solo es un dibujo mal hecho. Pero, no me sorprende ello, después de todo, soy su reina luna y no se atreverían a cuestionarme.
A medida que pasa el tiempo, ellos cambian de posición para que los conductores puedan dormir y yo continuo intentando controlar mis emociones y mi mente. Por lo que, imploro encontrar una nueva pista, ignorando todo a mi alrededor, para poder concentrarme en lo que debo.Incluso, llamo a mi instructor para una nueva técnica, pero, por mucho que cambien de estrategia, las imágenes siguen siendo las mismas.— Esto es agotador.— Son quince horas de viaje. Si pudiéramos correr usando nuestra versión lobo, sería menos el tiempo.— Entonces, coloquen todo el equipaje aquí y que los demás se marchen en sus versioMi corazón late frenéticamente porque sé lo que significa que una pelea entre los miembros de la manada de Abbas y mi manada, también me siento mal porque sé que el motivo de esta soy yo.‘Nuevamente estás causando problemas a tu manada. Entonces, Robert fue inteligente al no darme importancia ni mucho menos dejar que yo me relacionara con personas diferentes que no fueran de la manada.— Oh, maldita sea. Si estos lobos no me matan lo hará Mike. — dice Carolina.— ¿Qué deberíamos hacer?— Intentar sobrevivir. — dice Carolina y yo de inmediato, me comunico con los chicos usando nuestro canal de comunicación.— Chicos, deben marchare ahora intentaré distraerlos. Así que, por favor, márchense sin mirar atrás. — digo y Carolina me observa como si estuviera loca.— Ignoren a la reina luna y march&eacut
No quiero alejarme de la manada que tanto ha hecho por mí, pero, tampoco quiero que mueran por quedarse conmigo. Así que, les suplico con la mirada que se marchen, mientras intento expandir la esfera que tanto en clases me dijeron que debía aprender a usar.— No te dejaremos aquí, reina luna. — dice Carolina y yo niego.— Les ordeno que se marchen ahora mismo. — imploro.— No nos iremos. — dicen ellos.‘Expándelo. Visualiza como lo expandes y hazlo.’ Me digo mentalmente recordando las palabras de mi maestro.— No sean tercos. Si se quedan morirán.— También si nos marchamos, porque quien abandona a su rey o reina, destruye el vínculo que como lobos de la manada tenemos. Nacimos para protegerla, reina luna. Así que, no vamos a irnos.Aunque la manada Luna Plateada aun existiera, ellos no vendrían a ayudarme, ni siquiera t
El desespero porque ellos sobrevivan puede más que el miedo a revelar la especie a la que pertenezco, por lo que, uso mi única arma para que ellos se marchen debido al odio que tienen a los Nymwere por todo el daño que mis padres hicieron a los padres de Edmond.Sin duda, están decepcionados y sorprendidos. Por lo que, espero que se marchen, porque es lo que deberían hacer ahora que saben que soy lo que ellos tanto se han esforzado por destruir durante todo este tiempo.— Váyanse, estaré bien e incluso si no lo estoy, solo estaré pagando por ser una Nymwere… algo que no debió nacer. — digo en un susurro.— Chicos…— Quien quiera marcharse ahora, puede hacerlo. Nadie lo criticará por eso. — dice Timoteo.Pero, nuevamente su determinación y terquedad apuntan hacia la dirección incorrecta; hacia mí. Porque aunque veo la decepci&
Por cómo hemos dejado el auto, no me sorprende que debamos cambiar de vehículo para poder marcharnos, sin embargo, a medida que avanzamos noto que el auto donde estoy no es el único que ha sufrido daños por mi culpa.Ya que, los demás autos e incluso las casas que estaban cerca, han sido destruidas por mi culpa… por no controlar mi poder, uno que no sé cómo estuvo oculto durante tanto tiempo.— Bueno, la próxima concéntrate en solo herir a los que quieren hacernos daño, querida. — dice Carolina.— Esto es serio, soy destrucción, yo…— Un momento, Antonella, no vas a compadecerte de ellos.— Los que estaban en el interior de esas casas…— Estamos en territorio enemigo, son ellos o nosotros. Así que, deja de pensar demasiado cuando ellos merecían eso. — dice Carolina sacándome del auto destr
Las horas pasan y nosotros llegamos a nuestro territorio con Mike mirándonos con tanto enojo que Carolina se levanta de su resaca para vomitar, pero, cuando ve por la ventana que hemos llegado a nuestro territorio, la ebriedad desaparece.— Oh, siento que todo me da vueltas. Voy a vomitar incluso mi consciencia. — dice Carolina sintiéndose terrible.— Bueno, ya que vomitaste todos mis secretos delante de los chicos, no me sorprende que no tengas consciencia que vomitar.— ¿Yo hice eso?— Sí, ahora, baja que ya ha llegado tu esposo a recogernos. — digo señalando en la puerta al hombre que se baja del auto para mirarnos con enojo puro.Carolina parece reaccionar, porque incluso deja de tambalearse y se regresa cobardemente para lanzarse a la cama donde seguramente, no deseará salir en lo que queda de vida.— ¡Yo no voy a salir! ¡Que me regresen ahora mismo!
En segundos puedo ver como todas las emociones pasan por sus ojos, desde burla, duda, sorpresa y odio puro. Él está molesto y lo puedo ver por cómo se transforma para lanzarse sobre mí.Por fortuna, los hombres lobos a mi alrededor, se transforman en lobos para detener al hombre que intenta alejarse de ellos para poder atacarme. Carolina, incluso se transforma y lucha con su esposo, como si fuera cualquier lobo sin importancia.Las mordidas dicen que no están jugando y por eso, enciendo el auto y me marcho rumbo al lugar donde anteriormente se encontraba la manada Luna Plateada.Porque aunque sé que debería marcharme, quiero despedirme del lugar en el que sufrí tanto, pero, pudo protegerme del dolor real que merezco por ser un fenómeno que no debió nacer.‘Despídete bien, porque lo más probable es que no regreses.’ Me dice mi mente.— No sé si eres mu
Ni siquiera sé cómo puedo llegar a la montaña antes que pierda la cordura, pero, finalmente lo hago después de pedir ayuda con vehículos que ni siquiera saben hablar inglés o español. Sin embargo, como llegar no es el problema, si no, si podré salir de aquí con mi esposo.— ¿Está segura que quiere ir hasta allá? Se rumora que la maldad vive allí y por eso, quien se dirige allá no regresa. — dice el último hombre que me ayudó a acercarme a la montaña.— Gracias por su preocupación, pero, mi esposo me cuidará. Él me espera. — digo y unas nuevas proyecciones aparecen, para mostrarme.Intento sostenerme de algo, porque las imágenes son impactantes y mi corazón duele porque observo como golpean a mi esposo, quien solo pregunta por la especie a la que pertenezco.‘Se reunió con ell
Ahora comprendo porque Edmond me imploraba que me marchara y no había intentado escapar cuando yo vi que no tenía cadenas y al lugar donde se encuentra le faltaban dos paredes.‘Todo fue un espejismo que no pude romper.’ Me digo mentalmente.Derrotada sin siquiera comenzar el juego, caigo sobre mis rodillas confirmando que venir a la guarida de los Nymwere sin un plan, ni mucho menos tener un aliado de mi propia especie que me ayudará con esto.‘Ahora entiendo porque Damon siendo un hombre tan poderoso decidió no acompañarme en esto, ellos son más de lo que puede uno lidiar.’ Me digo mentalmente.— ¿Qué pasa, querido pollito? ¿Los gatos te han hecho daño solo con verlos antes de ser comida? — pregunta uno de ellos.— ¡Que no se te ocurra hacerle daño a mi mujer!— ¿O qué piensas hacer? — pregunta uno de e