Nikola visitó las casas del masoquismo y bondage que hay en el país, buscando mujeres que son extremas en disfrutar ese tipo de sexo, sin suerte, pero una de las encargadas le dijo que había una que eran extremas en esos juegos del dolor. Nikola se dirigió a ellas, y en efecto encontró a un grupo de mujeres que se dañan para sentir placer, al tal extremo, negocio con ellas, quienes terminaron aceptando.

Llamo a Sara para decirle que ya tenía el intercambio, Aarón decidió acompañarlo, no dejo que Sara fuera sola, al llegar a la mansión del verdugo, notaron lo bien resguardado que esta, es imposible salir vivos de ahí, el hombre obeso salió a recibirlo al saber el tipo de personajes que lo visitaban.

—¡Vaya, vaya!, pero miren que me trajo el viento, al famoso Nikola y Aarón, juntos.

—¡Hola, verdugo, es un gusto conocerlo!

—Pero que lo trae a mi humilde hogar, señor Aarón. —él miró a Nikola para que hablara.

—¿Qué hay, verdugo?, recuerdas que te traje dos muñecas la vez pasada.

—Cla