CAPÍTULO 50

Agatha POV:

El aire era espeso con el aroma de la hierba recién cortada y el canto de los pájaros, un sereno telón de fondo para la tormenta que rugía dentro de mí. 

Estaba de pie en los grandes escalones de la mansión De Rossi, mirando las puertas de hierro forjado, mi corazón como un peso de plomo en mi pecho.

Las palabras del médico resonaban en mi mente, un mantra implacable y escalofriante: "Estado crítico". Papá, mi roca, mi ancla, yacía en una cama de hospital, luchando por su vida. Un infarto masivo, habían dicho.

Mi mundo se sentía como si se estuviera derrumbando a mi alrededor. Primero Nathan, luego Camille, y ahora esto. Era demasiado, un asalto implacable a todo l

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