Dew entornó los ojos. "¿Qué piensas hacer?".

"Nada. Solo quiero tener una conversación casual contigo. Nos vemos en el balcón cuando la fiesta esté a punto de terminar".

Adina le hizo un gesto a Dew antes de coger su copa de vino y dirigirse al segundo piso.

Los cuatro niños estaban jugando con un rompecabezas extremadamente difícil en el segundo piso, y se llevaban bien.

Unos minutos después de acompañar a los niños, el banquete de la planta baja comenzó oficialmente, así que se levantó y bajó las escaleras.

Todos los invitados habían llegado. Había unos setenta invitados, y todos los rincones del salón estaban llenos de invitados que charlaban en grupo. Duke también estaba hablando con algunos clientes de negocios.

Adina lo reconoció al instante.

Este hombre siempre era la persona más deslumbrante de la multitud, estuviera donde estuviera.

Naturalmente, la mujer más bella de Ciudad del Mar también sería la persona más deslumbrante de la multitud, estuviera donde estuviera.

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