A la mañana siguiente Dalila ya está levantada y preparando el desayuno y algunos víveres para el largo viaje que les espera, mientras ve su mochila ya montada junto a las mochilas de sus hijos y suspira al recordar las palabras que hace pocas horas sus hijos le habían dicho, conocía ese gesto y sabía que era la mejor decisión, ya que si ellos no iban ella estaría preocupada o extrañándolos y eso no sirve en un campo de batalla, ya que al enemigo no le importa tus emociones, termina de preparar el desayuno y come el suyo para hacer una consulta a la druida Alessia.

   Madre Alessia como le decía Kath era alguien importante para ella mientras ya la druida estaba más que levantada y había hecho sus pequeñas predicciones del viaje, sabía que la pequeña Kath se podría defender ante cualquier problema, mentiría si negaba que no le preocupaba la hechicera del enemigo que le decía quién podría lidiar la batalla para ganar y conquistar terreno para demostrar su poder.

    Madre Alessia había decidido ir a buscar algunas flores para cambiar las suyas viejas cuando es detenida en la puerta por la antigua líder Dalila, esta al verla le sonríe y le dice: los dioses nos favorecen hoy, hará un día estupendo líder.

    Dalila que se queda callada pero asiente a su comentario la espera a que esté más cerca de ella y le dice: buenos días druida Alessia estoy algo preocupada por el día de hoy, y no quiero irme sin un consejo suyo.

   Alessia quien la ve pensativa le dice: de acuerdo, pero… acompáñame por unas flores nuevas y te escucho atentamente.

   Dalila asintió emprendieron el camino hasta la parte del bosque donde hay hermosas flores como lilas, girasoles, margaritas, entre otras. Alessia la oye todo el camino sin hacer ni un solo ruido al ver que Dalila ha terminado su plática le pregunta

   Alessia: ¿tienes miedo que de nuestra joven Kath cometa un error?.

   Dalila se asombra ante el comentario de la druida y dice: no, como crees que pensaría en algo así, no niego que la chica tiene ya una gran responsabilidad, pero jamás diría eso o pensaría en ello.

    Alessia sonríe un poco y le dice: entonces no tienes de que preocuparte, la chica lo hará bien solo que no confías en ella.

    Dalila hace un pequeño gesto de niña regañada mientras piensa lo que dice la druida y ya a mitad del camino de vuelta le dice: si, puede ser que tengas razón, puede que como aún es más joven que mis hijos temo por ella.

   Alessia como una madre que ha cumplido su misión asiente y la abraza mientras dice: confía más en ella.

   Ya de regreso en la casa de la de la druida ven al antiguo líder Bryan quien las saluda con la mano y dice: buenos días bellas damas, todos están en la entrada esperando la hora de partir.

   Dalila que asiente con la cabeza se despide con un abrazo y un beso de la vieja Alessia y va a su casa a buscar su mochila para ir a la entrada de la aldea, mientras Bryan ve a la druida y le pregunta "¿Esta nerviosa, verdad?" Alessia que sonríe ante la forma de percibir las cosas Bryan asiente y le dice

   Alessia: ya está más calmada, tranquilo.

   Bryan suelta un suspiro de calma y le dice: bueno abuela, me marcho ya, tendrás noticias nuestras.

   La druida que le sonríe se acerca para abrazarlo le dice: los dioses estarán de vuestro lado, el viaje será placentero y sin problemas, además ya sabía que al final irías.

    Mientras el líder Bryan la abraza de vuelta suspira un poco y dice: espero que así sea.

    Luego ambos sueltan el abrazo y lo ve alejarse en la distancia. Mientras Kath y su padre junto en la compañía de los jóvenes guerreros y los hijos de Dalila, más la compañía de su tío Abdiel un hombre un poco mayor que su padre de 55 años robusto, más alto que su padre de 2.10 metros de altura, con un cabello castaño oscuro y liso hasta los hombros con sus ojos de color caramelo y una piel blanco acaramelada, llevando en su espalda su mochila a base de piel como la de todos y su espada favorita que tenía varias ondas y era larga.

    Mientras el tío Abdiel aún estaba asombrado de que su hermano Cedric accediera de que su única hija fuera a la guerra con la compañía de guerreros Elfos, mientras hablaba con su hermano veía como la pequeña Kath hablaba con el líder guerrero, Cedric que le incomoda un poco que su hermano hiciera eso de distraerse y poder seguir la conversación como si nada le pregunta de una manera curiosa

   Cedric: ¿Cómo puedes hacer eso?.

   Abdiel con un pequeño toque de maldad, ya que le gustaba ver a su hermano incómodo le preguntaba "ese guerrero llamado Dante, ¿Es el novio de la pequeña Kath?" Cedric que al oír la pregunta se queda en seco le dice

   Cedric: Abdiel, estas ignorando mi comentario agrede, y no, no es el novio de Kath.

   Abdiel lo mira en tono burlón y dice: hahaha, eso nunca pasa de moda, pero… hablando ya enserio ¿Te incomoda el chico?.

   Cedric mira a Dante y mira como su hija sonríe ante los comentarios de él y luego mira a Abdiel y le dice: no la verdad no me incomoda, tal vez tengo celos paternales.

   Abdiel quien es el hermano mayor siempre le gusta meterse con su hermano Cedric pero en ese momento no sabía que decir o hacer, reflexiono un poco y dijo: se ve que le agrada, tal vez solo hay una bonita amistad hermano, no te preocupes por ello además… Tendrá que pasar nuestras pruebas para poder aceptarlo.

   Cedric quien mira a su hermano algo asombrado le dice: wow me asombras, pensé que lo tuyo era solo los juegos, pero eso que acabas de decir por alguna razón me calma un poco.

   Abdiel asiente en señal de que puede entender un poco lo que siente mientras ve como ambos chicos van hacia ellos y Kath dice

   Kath: Dante, te presento a mi tío Abdiel.

   Dante que mira al señor Abdiel y luego al señor Cedric y dice: mucho gusto señor Abdiel, espero que nos llevemos bien durante el trayecto.

   Abdiel quien lo mira estrechando su mano comenta: un gusto y lamento si no pude volver  antes para el día de la fiesta de Kathleen.

   Luego Abdiel lo mira de arriba abajo y piensa -ya creo que entiendo mejor porque Cedric anda así- este sonríe y le dice: apenas recibí el mensaje de Kath no lo pensé dos veces y vine.

   Dante quien asiente dice a su vez: muchas gracias por querer unirse a esta pelea, aun sin tener muchos detalles de ella si desea puedo ponerlo al corriente.

   Abdiel asiente en modo de agradecimientos y ambos se van donde los otros guerreros, mientras Kath abraza a su padre y le dice: padre tranquilo todo saldrá bien, ya lo veras… además te mantendré informado con Manchas, sabes que ella no me falla.

   Cedric asiente y mientras suspira dice: tienes razón, pero aun así no me quitaras la preocupación.

   Kath agacha un poco la mirada entendiendo que por mucho que haga no podría calmarlo, pero sabe que su padre confía en ella y que todo saldrá bien.

   Dante al ver que los antiguos líderes ya han llegado se disculpa con Abdiel y va donde Cedric y Kath para avisarles de su llegada, al llegar donde ellos dice: disculpen la intromisión líder Cedric, pero me pidió que le avisara cuando llegaran todos, creo que estamos listos Kathleen.

   Cedric mira a Kath y la abraza fuerte luego mira a Dante y le dice: cuida de mi hija.

   Dante pone su mano izquierda en el pecho y dice: lo prometo, ella no pasara peligro alguno.

   Cedric asiente y se va al centro para darle la despedida a todos. Mientras Kath mira a Dante con una cara algo incomoda y suelta un suspiro, Dante al ver su cara dice

   Dante: ya sé que dirás sé que eres fuerte, pero aun así déjame cuidarte de vez en cuando.

   Mientras Kath suspira sabe que ha perdido la batalla ante esas palabras y dice: está bien, pero solo cuando yo te lo pida.

   Dante niega con la cabeza y sonríe, este feliz le sonríe en muestra de agradecimiento y se van al centro con los demás.

   Cedric al ver que todos están reunidos decide decir unas palabras para el buen viaje y el próspero regreso de los mismos, junto con madre Alessia que les entrega unos talismanes para que el viaje sea fructífero y que los dioses se apiaden de vuestro largo viaje, Cedric al terminar sus palabras y ver que madre ha terminado también se despide de su hija con un fuerte abrazo y un apretón de manos con Dante y Abdiel, su hermano le sonríe en modo de -todo estará bien- a lo que Cedric asiente y lo ve unirse a su hija y al líder Dante.

   Ya subiendo por la colina Dante les va guiando a todos por unas rocas algo empinadas pero seguras para subir y bajar una montaña de ese tipo, al ver que Kathleen le cuesta un poco mantener el ritmo decide bajar y ayudarla poco a poco, esta algo enojada consigo misma por no saber hacerlo sola pero resignada porque no le queda de otra, luego de haber pasado los peñascos su camino sigue hasta dentro de las dunas, un lugar árido muy parecido a un desierto pero no tan intenso a su vez.

   Dante les indico que frutas se podían comer allí y ayudaban en la hidratación, de esta manera no se gastaría tan rápido las reservas, mientras Dante explicaba al grupo por donde seguir Kath se vio atraída por un sendero pero al intentarlo seguir pudo ver la silueta de la hechicera que le mencionaba madre, aunque no la vio tan definida pero sí pudo ver un poco sus puntos estratégicos y cuál sería su siguiente movimiento.

   Abdiel que nota que Kath está sumida viendo al este decide acercarse a ella, esto a su vez llama la atención de Dante y decide ir con él y ver qué le pasa a Kathleen; Abdiel intenta llamarla pero ve que no reacciona hasta estar frente a ella y ve como Kath no parpadea, esto lo pone un poco alerta pero recordó las palabras de Cedric y decidió esperar, al ver que Dante llega hasta donde él y pregunta

   Dante: ¿Ocurre algo Kathleen?.

   Abdiel le niega con la cabeza y dice: parece que está viendo algo, tendremos que esperar.

   Dante asiente y decide esperar, al cabo de unos minutos Kath reacciona en sí y ve a su tío y a Dante algo preocupados y pregunta

   Kath: ¿Ocurre algo malo?.

   Los dos se ven a la cara y sonríen mientras niegan con la cabeza y Dante explica: llevas cinco minutos así, tu tío te llamaba y como no respondías vino y al verlo ver donde iba decidí venir también ¿Estas bien?.

   Kath se sonroja al ver cómo ha preocupado a todos y dice con mi la mirada algo baja: pues, la cuestión es que ya la hechicera sabe de mí, pero… por alguna razón no puede hacerme nada.

  Dante al saber eso mira el terreno y hace una seña a su hermano Caleb para ver los alrededores por si nota algo raro, mientras Dante guía a Kathleen al frente junto a él y le dice con voz firme: ven al frente conmigo, cualquier cosa te protegeré.

   Kath mira a todos lados como buscando algo de apoyo y ve como Dalila le hace un gesto con la mano en señal de -todo estará bien-, ella asiente ante Dalila y se relaja sabiendo que la misma está detrás de ella ante cualquier cosa.

   Caleb luego de mirar todo con el resto de los chicos decide subir al frente y dice: hermano estamos en zona segura, tranquilo que llegaremos bien.

   Dante se relaja un poco al oír eso de su hermano y asiente mientras mira a Kathleen y le dice: solo queda cruzar el rio y estamos más cerca de mis tierras.

   Ya más cerca del rio Dalila habla con sus hijos y les dice: están muy callados, ustedes no son así.

    Los dos hermanos se ven a la cara y mientras Alfonso hace un gesto de negación por su lado Bernardo opina: solo que este calor es fuerte, es primera vez que sentimos un calor así, me deja sin habla.

   Dalila ríe ante el comentario de su hijo menor y luego dice: oigo el sonido de agua, creo que estamos cerca.

   Dante hace una señal para que todos paren, mientras Bryan y Dalila se acercan ante Kath y el joven Dante, Abdiel aunque no era líder ni nunca lo quiso ser fue llamado por Kath, aunque el sin entender accede a la petición de su sobrina. Luego de haber hablado todos y ver que casi se ponía el sol, se preguntaban si era buena idea pasar la noche o seguir hasta el muelle más cercano, Bryan que era su primera vez en el desierto pregunto

  Dante hace una pausa y dice: el desierto es un lugar cruel, por el día hace un sol horrible, pero por la noche hace un frio tremendo, si optamos ir al muelle sería un lugar más cálido y el frio del desierto de noche no será tan fuerte, además podríamos abastecernos de agua y refrescar nuestro cuerpo si así lo desean, pero lo más importante es lo que opinen ustedes.

   Dalila que estaba con ganas de algo fresco voto por ir al muelle y pregunta: ¿Cuánto hay que caminar hasta el muelle?.

   Caleb el hermano de Dante que llevaba una sandía picada para todos refrescarse un poco dijo: no estamos lejos del muelle, tendríamos que caminar como casi una una hora o más, ¿Quiere que le indique por dónde?.

   Dante algo incómodo por la intromisión iba a decir algo pero Kath enseguida lo detiene y hace un gesto de negación, lo cual hace que suelte un suspiro y susurre "-está bien-" Kath le sonríe y le susurra "-gracias-" Dalila por su parte es guiada por Caleb hasta donde se puede ver el muelle y vuelve a donde esta Kath y los demás, Bryan que quiso oír la opinión de todos y votar el de ultimo pregunto a Kath

  Bryan: ¿tú por cual votas pequeña?.

  Kath jugaba un poco con la arena y la empezaba a sentir fría mientras miraba hacia atrás e imaginaba la distancia pensaba para sí misma –si vamos serian unas horas aproximadamente, habrá un rio donde podremos refrescarnos todos y llenar agua para el viaje, con suerte podríamos tomar más frutos, si creo que aguantemos- luego de pensarlo muy calmadamente responde: la verdad sería buena idea lo que propone Dante, me parece más fiable y seguro para todos.

   Su tío Abdiel la observa con detenimiento y dice: no es mala idea, acá estamos a la vista de cualquier enemigo.

  Bryan al oír las palabras que quería dice: por lo que veo todos estamos de acuerdo en que si nos quedamos acá estaremos expuesto ante el enemigo, sin contar con que Kath hace unas cinco horas tubo una visión de la hechicera del enemigo, es mejor si nos vamos ahora, la llegada será más rápida.

   Todos asienten ante la idea de partir y se alzan para seguir el camino al muelle, mientras caminaban todos al muelle Kath pensaba en los posibles enemigos y por qué la hechicera no pudo hacerle nada en todo el camino del desierto, mientras estaba sumida en sus ideas no se percataba de nada, no oía nada de lo que hablaban los demás, hasta que noto que Dante la toco avisándole que habían llegado al muelle, mientras veía asombrada como la caminata pudo ser rápida.

   Ya todos en el muelle podían descansar a gusto bajo unos pequeños árboles y algunas palmeras llenas de coco, Kath decide ir a ayudar a Dalila a montar su tienda de campaña para ellas dos, mientras los chicos se repartían las tareas, unos buscaban los materiales para la fogata, otros algunos pescados del rio y el resto montaba la tienda de ellos.

  Kath miro asombrada como los chicos no dependían de ellas dos siendo mujeres, sino demostraban que sabían hacer otras cosas aparte de pelear; Dalila que estaba agotada le pidió a Kath que la acompañara a darse un baño cerca del rio, pero algo lejos de los chicos, lo cual está feliz asintió y dijo

   Kath: es buena idea, pero hay que avisarles.

   Dalila asintió y busco a uno de sus hijos para avisarle que ella y Kath tomarían un baño, Alfonzo que hizo un gesto de afirmación dijo: de acuerdo madre pero no se alejen mucho, ya que en un rato vamos a cenar.

   Dalila al ver el gesto atento de su hijo le besa la frente y se va con Kath a un lugar un poco retirado pero donde pueden oír a los chicos apurándose entre sí. Kath que no era muy buena nadando pero sabía dónde recibir la corriente tranquila del rio se quedó viendo al cielo y podía ver las estrellas mientras le decía a Dalila: 

   Kath: que hermosas se ven, me pregunto si mi padre puede verlas.

   Dalila quien estaba al frente de ella mira las estrellas y dice: ten por seguro que si pequeña, eso no lo dudes.

   Ambas se ven a la cara y sonríen, luego de eso deciden seguir dentro del agua un poco más mientras admiran el paisaje. Kath concentrada en las estrellas y mientras bailaba su mano con el agua, sintió algo curioso, sentía como se conectaba con la naturaleza y podía sentir hasta el más leve sonido, desde el aleteo de un pájaro, hasta el leve aullar de un zorro del desierto.

   Tan atenta estaba con los sonidos que logro oír leves chapoteos del agua de algunos peces que cazaban sancudos para comer, mientras inhalaba profundo ese aroma a dulce y fresco la hacía suspirar, mientras se alzaba y le decía a Dalila: creo que ya sería bueno volver, podríamos pescar un resfrió.

  Dalila que estaba tan relajada entre las rocas sonrió y dijo: no me había dado cuenta del tiempo, estoy tan relajada que podría dormirme.

  Ambas rieron ante el comentario y se vistieron para volver con los chicos, para sorpresa de ambas los chicos tenían ya todo listo, habían pescado unos salmones de buen tamaño y habían bajado los cocos de las palmas. Dalila al ver como llegaba el olor de la comida le dice a Kath

   Dalila: huele rico verdad, ven te ayudo a secarte el cabello o sino tu pescaras un resfrió, por mi parte lo tengo algo corto así que no tendré problema.

   Cuando Dalila y Kath están cerca de su campaña la notan iluminada y con un techado de palmas para que no sientan tanto calor, Kath por alguna razón busca a Dante con la mirada y ve como este le saluda con unas palmas en la mano, esta le sonríe y entra a la cabaña con Dalila.

   Luego de salir las dos ya más frescas de la cabaña Dalila busca sus hijos y ve si puede ayudarlos, Kath por su parte sigue mirando el paisaje y las estrellas, hasta que un ruido la recuerda a que tiene que hacer algo, entrando a la cabaña de golpe y buscando un trozo de pergamino y un poco tinta le copia a su padre por donde van y que apenas vuelva le copia de la llegada y que han hecho, luego de copiarle a su padre, guarda la tinta y la pluma en su lugar mientras espera a que seque la carta para enrollarla y colocársela a Manchas en la pata izquierda, para que con el alba vuele donde su padre.

   A pesar de que sabía que podían volar de noche, tenía algo de miedo y prefería esperar hasta el alba, así que guardo todo y puso a descansar a Manchas para su gran vuelo mañana.

   Dante que observaba desde lejos con detenimiento lo que hacia la joven más le daba curiosidad por conocerla más y más; Abdiel que era un hombre que ya había experimentado las fases del amor en su juventud, aunque nunca se llegó a casar, se aproximó hasta donde el chico y le pregunto

   Abdiel: ¿Qué miras con tanto detenimiento?.

   Dante que no había notado del todo su presencia trato de no asustarse y dijo sin quitar la mirada: observo lo que hace Kathleen, como abre los brazos para recibir la luz de la luna y como le sonríe.

   Abdiel mira como su linda sobrina brilla ante el resplandor de la luna y dice: si sigue así, parecerá un ángel hahaha.

    Dante que lo mira curioso le dice: creo que ya lo es.

   Cuando Abdiel se disponía a decirle algo a Dante es interrumpido por Dalila que se sienta junto a ellos y dice: que gentiles son por esperarnos, ahora si podemos comer todos.

    Bryan que ve a Dalila a punto de dar el primer bocado dice: mujer, puedes por lo menos llamar a los demás o fingue que lo haces.

   Dalila como niña traviesa sonríe con un trozo de salmón y grita: El QUE NO VENGA A COMER, ME LO COMO YO.

   Abdiel soltando una carcajada y ve como los chicos pegan una carrera para no quedarse sin comida, mientras observan como Dalila sin aun terminar su trozo ya toma un segundo salmón, pero antes de reclamarle deciden esperar para saber que ese salmón lo había apartado para la joven Kath.

   Luego de todos haber comido y bebido algunos agua de coco y otros solo agua, deciden ya ir a dormir, ya que dentro de unas horas deben seguir su camino. La joven Kath y Dalila son las primeras en ir a su cabaña a dormir un poco, mientras los chicos veían quienes debían hacer guardia, Dante por su lado dijo que podía tomar toda la noche y que ellos durmieran, pero no estaban de acuerdo su hermano y Abdiel, al final accedió a tomar unas horas de guardia.

   La joven Kath dio vueltas una y otra vez por las cobijas sin poder conciliar un sueño tranquilo, se imaginaba ya cerca de la tribu de los lideres guerreros, mientras los veía avanzar sentía que sus pies pesaban más y más, mientras oía los gritos de dolor de su tribu y oía las risas al final de Rey oscuro, mientras ella repetía una y otra vez ¿Por qué haces esto?, ¿Por qué nos odias tanto?, mientras intentaba correr del Rey Oscuro volvió a ver a la hechicera pero esta vez con una emoción que la dejo sin habla.

   Despertando de golpe y sudando por aquella pesadilla no sabía si despertar a Dalila y contarle lo sucedido o salir y tomar un poco de aire fresco mientras despejaba su mente. Mientras salía sigilosamente un ruido llamo su atención, al ver que era Dante que la miraba curioso le hizo un gesto para que no emitiera sonido alguno mientras se acercaba a él para poder hablar con más calma, pero en vez de hablar lo que hizo fue llorar mientras él no sabía que hacer solo opto por abrazarla y dejar que ella se desahogara.

   Luego de ella llorar un rato y poder controlar sus lágrimas mira a Dante y mientras baja la mirada en modo de disculpa le dice: lo siento Dante, no sé cómo disculparme contigo, creo que en vez de ayudarte te causo contratiempos.

   Dante quien la ve sin decir ni una palabra le seca las lágrimas y le dice: prometí protegerte y si quieres hablar de ello te escuchare atentamente.

   Mientras le sonríe por lo tierna e inocente que se ve, esta le agradece el gesto y termina de secar sus lágrimas y dice: bueno, es mi primera vez teniendo una pesadilla y no supe cómo reaccionar.

   Al ver a la joven algo asustada la mira firme y le pregunta: ¿Puedo saber cuál fue?.

   Kath asiente y le cuenta: soñé que estábamos en el rio a pocos metros de tus tierras, el tiempo era despejado y estábamos tranquilos porque ya habíamos llegado, pero al yo bajar del barco el viento cambio drásticamente y el cielo se puso todo negro, parecía un eclipse, luego de ello oí los gritos de los guerreros y espadas chocando, mujeres y niños gritando, yo trate de correr donde estabas pero mis pies me pesaban, cuando vi porque me pesaban tenia cadenas en mis manos y en un pie, logre ver al Rey oscuro halándome hacia el diciendo que ahora yo era su esclava y que nada tenía salvación, le llame varias veces y luego le pregunte -¿Por qué haces esto?, ¿Qué es lo que quieres lograr con todo esto?-, el no respondió solo reía a carcajadas, luego de eso vi a la hechicera, su rostro reflejaba muchas cosas, pero… en ninguna de ellas vi alegría, de hecho ni siquiera la vi reírse o burlarse de mi.

   Mientras suspira para hacer una pausa, luego mira el rio y dice: no sé cómo interpretar su cara, ¿Tú qué opinas al respecto Dante?.

   Dante que miraba a Kathleen con mirada perpleja y sin poder decir nada pensaba que decir, no podría decirle a la chica que solo fue un mal sueño y lo olvidara, sabría que podría tomárselo a mal o sentirse algo ofendida, mientras miraba como la joven veía el cielo ya por amanecer le dijo: tampoco sé que pensar la verdad, pero te puedo asegurar que no dejare que nada malo te pase, confía en mi por favor.

   Kath al ver que el quedo tan impactado como ella le sonríe y le dice: confió en ti Dante y sé que no romperás tu palabra.

   Luego de ambos observar el rio y el salir del sol, Dante la ve aun cansada y le propone que descanse un poco más, lo cual ella niega con la cabeza y le dice que puede esperar un poco más, ya que todos dependen de ella y sus poderes, no puede fallarles y menos con el sueño que acaba de tener, Dante la miraba tan firme y decidida al ver como el sol la iluminaba dándole los buenos días a ellos y a los demás, Dante niega con la cabeza y sonríe mientras piensa para sí -su padre tenía razón, es una terca pero entiendo por qué es así, se parece un poco a mí-.

   Luego de eso ve como Abdiel les da a ambos los buenos días con la mano y mientras se alza se agacha un poco para ayudar a alzar a Kathleen, lo cual esta con gesto curioso y algo apenada por lo de hace horas le agradece con una sonrisa y la ve ir a la cabaña para despertar a Dalila.

   Luego de estar todo levantados, Dalila saluda a sus hijos como es de costumbre entre ellos, mientras ve como la joven Kath se sumerge en sus pensamientos, y logra intuir que algo no está bien, así que decide quedarse al lado de Kath y tratar de ver que le ocurre, mientras Kath sumida en sus pensamientos recuerda la cara de la hechicera y le hace sentir algo incomoda ese sentimiento, ya que no sabe si es tristeza o dolor, pero de igual manera la confunde.

   Luego de haber ya empacado todo para seguir el viaje, llegan al barco que los llevara camino a las tierras de los Elfos guerreros, Dante les guía por donde se va llegando y aunque parece lejos no es mucho, ya que por el rio es más fácil llegar que siguiendo el sendero del desierto, mientras todos miraban el paisaje Dalia consigue la oportunidad de acercarse a Kath y preguntarle

   Dalila: ¿Qué tienes?, tienes una cara de no haber dormido bien ¿Estás bien?.

  Kath que conoce como es Dalila trata de limitar su respuesta y le dice: tranquila solo tuve un mal sueño, pero de resto estoy bien.

  Dalila la observa un rato y luego relaja su rostro al ver que la pequeña Kath no le miente la abraza fuerte y le dice: duerme otro poco, yo te despertare al estar cerca debes estar al cien por cien.

  Kath ríe ante el comentario de ella y asiente con la cabeza, sabe que llevarle la contraria seria ganarse un regaño por parte de Dalila, así que opta por acepta la petición de dormir cerca de ella un rato y reponer fuerzas.