Anna abrió sus ojos, miró hacia su costado Alonso aún dormía plácidamente. Se levantó suavemente para no despertarlo y así poder disfrutar de un baño tibio en la tina, le encantaba hacer eso, pero sola.

《 Nunca pensé que Alonso fuese un hombre con tanta vitalidad sexual, nunca se cansa 》pensó divertida.

En realidad Alonso no se saciaba de ella, era tanta su pasión que podía hacerle varias veces el amor sin caer rendido, ella no se quejaba de eso, le gustaba todo lo que hacían lo deseaba como nunca deseó a un hombre, solo que necesitaba un poco de espacio para ella.

Eso era otro punto por el que Anna no quería apresurar la convivencia, era amante de tener su espacio, su tiempo de relax individual y temía que Alonso no lo entendiera.

_ Ya veré como le hago entender eso! no entiendo porqué a veces se comporta así! ._ musitó.

Había un porqué, pero mientras el hombre no abriera su corazón todo se circunscribia a sus exigencias sin una causa aparente.

Anna se relajó un rato más y cuando