---Kira---Me encontraba mirando por la ventana del castillo ,aquella que mí habitación me proveía. Me quite mí atuendo cubriéndome con mí camisón blanco, Zeus estaba en la peor parte, quería reclamarme desde hacía dos días,por lo cual ya estaba durmiendo en el sótano, lo había acondicionado con cadenas y barrotes, una cárcel personal donde el animal que vivía en él permanecia prisionero de sus instintos.No podía decir que la pasaba mejor, me sentía desahuciada como nunca, la sensación de estar sola en el castillo con todas las puertas cerradas y nosotros dos solos no me incomodaba la verdad, pero en mí se había instalado la sensación de querer estar con él,una gran parte faltante en mí.En las noches el insomnio me hacía pensar que él me esperaba, sentía sus ojos en mí aunque estabamos alejados, un llamado que me ponía ansiosa y con ganas de cometer una locura.La cordura me obligaba a no bajar y aunque sea.....cerciorarme de que estaba bien, eran solo unos días más pero para ambos
Kira—Es hora de irnos....el alfa de esta manada ha muerto.—la mirada del Rey demonio me estremeció, lo empujé con todas mis fuerzas una vez que me puse de pie, sabía bien que no ganaría un combate cuerpo a cuerpo con él.Lo golpeé con todas mis fuerzas en la boca, escuchando su quejido, la sangre brotó, aunque rapidamente la limpió de su rostro,queriéndole restar importancia.Quise correr hacia afuera,pero fui arrastrada por Kapri, mis ojos llorosos no podían creer lo que veían, el pueblo estaba siendo abrazado por el fuego,los gritos y llantos del lugar me generaban un terror muy grande, no podía hacer nada por ellos, m*****a la hora en que la parte bruja de mí desapareció dejándome sin nada.—Es mentira que está muerto...—balbucee...resistiendome a que el arrastre de mí cuerpo continuara...aunque era totalmente en vano.—Ya verás que es verdad—me confirmó con una sonrisa.—¿Que quieres de mí viva?¿,acaso no sabes que ahora soy una simple humana sin poder alguno?—No se lo que haré c
Pasaban los meses, el mundo se iba sumergiendo de a poco en una oscuridad incierta, la hermandad había tratado durante siglos instalar a su rey supremo.Aquel que uniera a todos bajo su inmenso poder y gloria,los fracasos fueron millones pero finalmente esta historia llegaba a su fin con la victoria de los púrpura, como los llamaba el pueblo ahora, ya que usaban ese color para demostrar que eran originarios de la hermandad.No sé escondían ,no era necesario, eran los ganadores de una guerra que implicó el derramamiento de sangre,sobre todo inocente.Los soldados de los púrpura siempre estaban en las calles vigilando, no sé permitían disturbios de ningún tipo,el miedo silenciaba las voces,encontrando a todos aturdidos y desahuciados.Los lobos se habían resignado después de perder a su alfa, los vampiros perdieron a su rey que fue desmembrado junto a su hijo Patrick,y los seres elementales habían visto casi imposible levantarse contra este nuevo rey por el temor de poner en riesgo a los
La anciaba caminaba de manera dificultosa entre el verde que el bosque le proponía,no estaba lejos, su cabaña,su pequeño hogar a simple vista todavía estaba dentro de su visión.Aunque nadie había aparecido en ese denso lugar lleno de vegetación e historias pasadas. Para ella nunca era sabio descuidarse,porque las visitas siempre llegaban cuando uno menos lo esperaba.Sus movimientos con los años se habían hecho lentos,casi torpes, pero la recolección de hierbas de ese basto jardín que la madre naturaleza le proponía le parecía simplemente irresistible.Sin embargo los rayos de luz de la mañana empezaron a resecar su delicada piel y el calor se le hizo insoportable.Bufó para sus adentros, reconociendose con una necesidad imperiosa de refrescar su rostro.Aquel espejo de agua que conocía bién la alejaría un poco más de su hogar,pero decidió hacerlo de todos modos, tal vez y pudiera encontrar más hierbas exóticas allí cerca de la humedad del agua a la que los primeros moradores de ese l
La mujer de cabellos rojos hacía tres días sufría de una fiebre que no la dejaba despertar, sus delirios eran siempre los mismos, y un nombre que repetía con dolor....Zeus.La anciana giraba el cucharón con ánimo, algo dentro de ella le decía que sería un buen día, y con una buena comida lo sería más.Se fijó el estado de la joven, un viento frío reinaba ese día así que tapó los brazos de la joven que estaban helados,y que por la fiebre había necesitado sacar de debajo de las cobijas.Se sorprendió cuando tocó su frente, la temperatura había descendido hasta una más normal, una sonrisa se dibujó en su rostro ,lo estaba logrando,sin dudas en un estado tan bueno despertaría pronto.Su platillo estaba más que listo para ser servido, así que se ocupó de buscar los platos hondos para llenarlo de su deliciosa receta,más no se dió cuenta de los ojos que la miraban desde una cama.La mujer de cabellos de fuego recién despertaba del calor de la enfermedad que la había tenido tres días reposando
Finos pasos apenas audibles se sintieron en la cabaña, la mujer mayor se empeñaba en que la sopa que preparaba le saliera a la perfección,nunca tenía visitas así que esperaba que al menos eso saliera bien.Kira de a poco fue llegando hacía la pequeña puerta principal, su cuerpo realmente dolía, y necesitaba descansar al menos un poco más ,pero no sería posible de momento ,escapar de su captura parecía ser lo primordial,sobre todo si la vida de otros seguían en riesgo, porque la suya sin su mate ya no tendría sentido,y eso le quedaba claro.—Te recomendaría que no lo hagas—dijo la anciana de espaldas a todo lo que sucedía.Kira quiso apurarse para hacer lo que le saliera en ese momento,pero el frío viento que surgió al abrir la puerta la empujó salvajemente hacia adentro, cerrandose la puerta denuevo,y dejándola más adolorida, pero con una certeza, aquella mujer era bruja,en ese lugar residia la magia.La mujer se acercó a la pelirroja,y tomándola de los hombros la levantó con gentileza
Diez días habían pasado, de tantas idas y venidas, Kira estaba cansada, allí escondida detrás de uno de los árboles más frondosos se sintió indefensa.—Ya estoy cansada no quiero hacer esto— Exclamó devastada, sentía que la anciana le jugaba bromas de mal gusto e incluso se divertía con su miseria.Tres lobos de ojos amarillos y visiblemente agresivos se pusieron ante ella.—¡¡Dije que basta!!!— gritó con más fuerza, pero nadie respondió.Se levantó del suelo dónde se encontraba vencida y salió huyendo, no podía defenderse, aún no...después de morir y todo. pensó.Los lobos finalmente la rodearon y ella estaba realmente exhausta...toda la mañana había sido así...huir y huir.Antes de tirarsele encima los animales desaparecieron como un humo oscuro que rápidamente se disperso para dejar ver a la anciana que se encontraba con el ceño fruncido.—Ni te haz esforzado siquiera.—dijo decepcionada.—No suelo huir así que....—la mirada de Kira se perdió entre los árboles.—Se nota que te falta
Una fuerza absorbente,oscura, que la hace tiritar hasta sus huesos invade sus sentidos, ya no está con Zeus en sus pensamientos, es otra cosa...algo malvado.Varios cadáveres yacen a su alrededor, la tienen acorralada,están de pie, la observan con ojos oscuros y ausentes,no importa quiénes son,sino por quién han sido enviados,es ése el mal que se ha tragado los reinos, y la vida de miles,incluida la de su padre.—Magia de muertos—exclama una persona a su lado, no la ha visto llegar....claro la anciana es sabia, Sofía seguramente es una bruja antigua aunque no lo recuerde aunque no lo aparente. Kira no tiene dudas que cuando llegue el momento podrá ayudarla por demás en lo que a conocimiento y entendimiento se refiere.—¿Es fácil entrar a mí mente?—le preguntó la habitante de Apur.—Parece que lo he hecho toda la vida—responde—asi que....una magia antigua que solo pocos pueden ejecutar tan bién.—No es una magia fácil de vencer—Kira conoce los daños, las peleas con muertos no son de igu