Leticia.-No contaba con que el hermano de Vincent fuera tan astuto, guapo e inteligente en mi desesperación por descubrir la verdad este idiota sexy me encerró en mi propio juego.— Debes prometerme que no le dirás nada a tu hermano hasta que yo logre conseguir más información –Frunció el ceño.— ¿Es un tema delicado? –Asentí con seriedad.— Bien, tengo una cliente, ella asistió a esa misma fiesta y… terminó en la habitación de un hotel desnuda, no recuerda con quien se fue, ella despertó muy asustada y obviamente con los estragos de la bebida que ahora sabemos que estaba adulterada, solo tomó su ropa y salió de la habitación huyendo despavorida ni siquiera vio el rostro del hombre que dormía a su lado.— ¿Crees que fue?— No lo sabe, el tema aquí es que esa noche… trajo consecuencias –El rostro de Víctor palideció.— Quedó embarazada— Sí, nació una niña, la chica fue engañada por su tía que le quitó a su pequeña unos días después de nacer y la desapreció para chantajearla, mira yo
Seattle.- Natalia.-Observo el vestido de satén guindado, siento como el estómago se me contrae mi primera aparición ante la familia Morgan hace unos días habría estado feliz y tranquila, pero hoy Jacob y yo no nos hablamos después que firmó el contrato definitivamente fui tonta ilusionarme, pero ahora no puedo llorar por ponerme en esta situación, la pantalla de mi celular se iluminó sobre la mesa de noche.Esperaba que fuera él, estoy sola en su apartamento, Caroline y yo nos adelantamos Jacob alegando una situación en su empresa informó que llegaría después, pero me ordenó que viniera hasta aquí, preferí no discutir ya se notaba bastante tenso por venir hasta acá ¿Qué se traerá este con su primo?Abro el mensaje y veo que es Vincent ¿Cómo habrá encontrado mi numero?“Suerte en Seattle con el ogro gruñón hermosa” –Ruedo mis ojos, lo menos que quiero son más problemas con Jacob por celos.“Gracias y deja de llamarme así fui muy clara contigo Vincent, NO quiero problemas con Jacob, n
Seattle.- Natalia.-La tensión en el ambiente se podía cortar con un cuchillo Jacob estaba que mataba a alguien ya llevaba tres tragos deseaba que todo este circo terminara cuanto antes.Mis suplicas fueron escuchadas cuando varios meseros se acercaron a los invitados ofreciendo copas de champagne, el primo de Jacob captó la atención de todos poniéndose en el centro del elegante salón.— Quise que todos fueran parte de esto, saben que no soy muy familiar, pero considere apropiado que todos supieran que me he enamorado –Todos se quedaron en silencio, mis sospechas eran ciertas.— ¡Maldito bastardo! –Escuché susurrar a Jacob, mientras el joven proseguía con su declaración.— Anna Charlotte Davis ¿Me concederías el honor de ser mi esposa?La reacción de todos fue una total sorpresa, de reojo vi la reacción de Jacob apretaba el vaso con tanta fuerza que en cualquier momento terminaría hecho añicos y yo con una interrogante en mi mente ¿Seguiremos adelante?(…)— Ven y no digas una sola p
Jacob.-Cerré los ojos inhalando, el efecto del alcohol después de leer ese mensaje desapareció ¡Me excedí, mierda! Hace un rato cuando hice un intento de coqueteo con la prometida de Derek fue solo por molestar no solo al idiota también a Natalia con toda la intención de herirla para que sintiera lo mismo que yo, salí del baño rápidamente.— ¿Puedes explicarme que fue lo que pasó hace rato? –Mi madre se cruzó en mi camino. –Vi como la prometida de Derek te abofeteo ¿Qué hiciste?— Nada madre –Busqué con mi mirada a Natalia por todo el salón. – ¿Dónde está Natalia?— No lo sé, pensé que estaba contigo, como no dejabas que se te despegara— Debo buscarla y largarnos de aquí, después de todo es obvio de Derek seguirá presidiendo las empresas Morgan como la abuela siempre deseo –Me alejé de mi madre buscando a Natalia.Afuera la lluvia no cesaba, no creo que se haya ido así ¿Dónde diablos se metió esta mujer?— ¿Señor? –Miro al anfitrión que estaba en la entrada principal.— ¿Has visto a
Jacob.-No pude pegar un solo ojo anoche, le visé a mi madre que había encontrado a Natalia y le pedí que preparara un almuerzo con la abuela y mis tíos para que la conocieran, ella tenía razón mi inseguridad se la contagié a ella ahora solo quiero enmendar mi error. Le serví una taza de café y tomé uno de los analgésicos, entré a su habitación seguía dormida.Me senté a su lado dejando la taza sobre la mesa de noche, acerqué mi rostro al suyo acaricié su frente la tenía un poco inflamada besé la herida y detallé su rostro tenía unas pocas pecas sobre su nariz perfilada acaricié su rostro son la punta de mi nariz, me sorprendió que no despertara así que decidí ser más atrevido suavemente besé sus labios.Sus labios tersos recibieron los míos, mi lengua queriéndose abrir paso dentro de su boca.— ¿Qué haces? –Giró su rostro que estaba rojo.— ¿En serio tengo que decirte que hacía? –Le pregunté con una sonrisa divertida.— Jacob no juegues conmigo ¡Auch! –Se agarró la cabeza.— Ten el a
Natalia.-Veía a Jacob más relajado mientras almorzábamos con su familia, lo bueno era que no estaba su primo y eso hacía que la situación fuera más sencilla.Pero en el fondo no dejaba de sentirme una traicionera Jacob me había confiado algo que ni siquiera a Caroline le había contado, algo muy doloroso para él y yo estoy aquí queriendo demostrar ser digna para él, ser digna de merecerlo, pero no lo soy, no ahora mientras siga con este secreto, tengo que contarle.— Nos podemos ir, si quieres –Me sobresalto al escuchar su voz tan cerca. – ¿Estás bien?— Sí, ¿Seguro que no se ofenderán si nos vamos? –Me sonríe dejando un beso en mis labios, dejándome con las ideas desordenadas.— No, además hice mucho trayéndote de sorpresa, vámonos quiero llevarte a conocer Seattle.Nos despedimos de la familia Morgan, Caroline estaba feliz porque su hijo haya pasado una tarde con ellos, salimos de la mansión y eliminé mis dudas y mis temores, voy a disfrutar de estos momentos con Jacob y al regresar
Alfred.-Observo desde la distancia a mi próxima víctima Caroline Morgan, la miro hace un gran tiro para su edad es una mujer que se conserva muy bien no me vendría mal un poco de diversión con ella, después de todo eso no me va a impedir vengarme de ella y el bastardo.— ¡Excelente tiro bella dama! –Ella se gira buscando mi voz.— Muchas gracias –Me sonríe apoyándose sobre su palo de golf. –Es raro un hombre felicitando a una mujer por un tiro, el golf es deporte para “hombres” –Le devuelvo la sonrisa.— Pues exclúyame de ese lote yo venero a las mujeres, veo que usted es muy buena hace cuanto lo practica.— Desde niña, junto a mi padre— ¿Puedo conocer a tan distinguido caballero?— Falleció a unos años –Un detalle que yo ya sabía.— Lo lamento mucho, entiendo el dolor de la pérdida de un ser querido y más si es cercano.— Así es –Me sonríe sin separar sus labios. –Bueno lo dejo disfrutando del campo, ya por hoy para mi es suficiente.— Si me permite ¿Puedo invitarla a almorzar?Nat
Natalia.-Luego de la conversación en la oficina de Jacob tomé mis cosas para bajar y trabajar con Vincent, al llegar a su oficina su rostro se iluminó.— ¡Mira quien volvió de Seattle! –Me dice sonriendo. -¡Bienvenida amiga mía!— Espero que eso no sea sarcasmo –Le digo enarcando una ceja.— Para nada, lamento que te hayas topado con Jacob antes que conmigo, pero ¿Qué se le va a hacer? La vida es así ¿Pudieron arreglarse?— No es de tu incumbencia, pero sí todo va muy bien –Le sonrío, pude ver una pequeña decepción en su mirada, pero se esfumó de inmediato. –Oye vi a tu hermano muy cariñoso con Leti ¿Tú se los presentaste?— No, de hecho me sorprendió mucho que se conocieran, yo conozco a la mayoría de las amistades de Víctor y nunca me mencionó a Leticia y menos cuando se nota que lo trae lamiendo el piso por donde ella pasa, ya que lo mencionas fue extraño, porque simplemente mi hermano se presentó aquí buscándola directamente a ella además han estado muy misteriosos.— Seguro no q