Una buena vida

MORFEO-

No sabía si podría enfrentarme a Miledy esa mañana.

No sé si estoy listo para enfrentarla todavía.

Así que, en lugar de quedarme en la posada de Dora, donde ella me vería, fui a la posada que estaba junto al mercado. La noticia de los dos hombres que maté se había extendido por todo el pueblo, pero no me importó. Estaba sentado allí bebiendo licor y planeando emborracharme cuando una mujer se me acercó.

Ella tomó asiento a mi lado con una jarra de cerveza. No me molesté en mirarla. Se sentó un rato y bebió de un trago su bebida.

—Pareces preocupado —dijo.

—No es asunto tuyo —respondí secamente.

Ella se rió levemente. —Beber por la mañana es señal de frustración, amor no correspondido o problemas matrimoniales.

Todavía la ignoré y tomé otro trago de licor.

—Veo que no te apetece charlar, pero sé algo que podría interesarte.

La miré, pero permanecí en silencio. Me pregunto qué quería decirme y cómo sabía qué me interesaría. No estoy haciendo ningún trabajo de inmediato
Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP