Narra Elentari.
Mi amiga Elena me hizo bailarle como si ella fuera un cliente de aquel club al cual iré para la supuesta entrevista.
Digo supuesta porque ese lugar es un prostíbulo disfrazado de club elegante y sofisticado, según me contó Elena ellas se acuestan con sus clientes dentro del mismo club el cual cuenta con varias habitaciones.
Cada una de ellas tiene una habitación asignada donde atienden a sus clientes y al finalizar me dice que deben limpiarlas ellas mismas.
—Elentari, te has puesto la lencería que te pasé — me preguntó mi amiga una vez más y ya han sido tantas las beses que me lo ha preguntado que cada vez que me lo vuelve a preguntar repito sus palabras junto con ella.
—no sé cuántas veces tendré que decirte que si— le dije antes de levantarme el vestido para que me viera la braga que me estaba rompiendo el trasero en dos.
¡Bueno será en 3 porque normalmente lo tengo dividido en dos! Pensé jocosa.
Bajamos las escaleras de la muerte o bueno mejor dicho de nuestra casa, pero es que son tantos escalones que uno al terminar de bajarlo muere del cansancio.
¡Oh Dios mándame a un hombre millonario que se quiera casar con una mujer pobre! Exclamé en el momento que bajé el último escalón.
—Para no darle nada y que se desilusione de estar con una puritana, por qué apostaría mi seno izquierdo a qué tú aún ni siquiera te has masturbado— dijo mi amiga masticando chicle como una puta.
Bueno no es que ella no lo sea, pero solo lo digo por su manera extravagante de masticar.
—temo decirte que ya perdiste ese seno lleno de silicona— le dije mientras paraba un taxi.
—Bueno al menos me dejas más tranquila pensé que te morirías sin llegar a saber lo rico que es tener un orgasmo— me dijo delante del taxista sin importarle que él estuviera escuchando todo.
—Ay dios Elena por qué eres tan vulgar— dije tapando mi rostro mientras el taxista no dejaba de observarme por el retrovisor.
Después de esos veinte largos y extendidos minutos en los cuales me la pasé evitando la mirada lujuriosa del taxista y las preguntas incómodas de mi loca amiga llegamos al dichoso club por el que entramos por una extraña puerta trasera.
En donde había todo tipos de mujeres altas, rubias, morenas y peli rojas, etcétera.
—tienes que hacer todo lo que el jefe te diga, y lo más importante es que le respondas a todo que si, ya él está informado que no trabajaras brindando servicio o mejor dicho cómo Scot— me dijo muy tranquila.
—vaya! Ahora a las putas se le dice “Scot” sí que están cotizadas — le dije con sarcasmo.
—elentari entrarás allí y responderás todo tal y como te lo indiqué y punto, mantén esa boquita cerrada que no quiero terminar peleando con las zorras descerebradas que trabajan en este lugar porque si te llegan a escuchar te romperían hasta la parte superior de la boca— me dijo antes de irse.
¡Solo tendré que entrar a esa oficina y si el supuesto jefe me pregunta usted desea que la matemos ahora mismo yo solo le diré “si”.
Usted por si acaso desea que la violen yo le diré “si” — balbuceé todo eso hablando conmigo misma
Narra Albert.
Hoy tenía deseo de ir a uno de mis clubes para ver las nuevas adquisiciones.
La búsqueda de esa elfo escurridiza me estaba hastiando así que para botar un poco el estrés vine a buscar a una humana para ver si encuentro una que sea menos llorona que todas las que me he llevado a la cama en estos últimos meses, ningunas de ellas han podido aguantar que le introduzca la mitad de mi miembro.
¡No es emocionante tener que limitarse! Pensé molesto porque la falta de sexo me estaba irritando
Entre a la sala VIP el único lugar de este club reservado especial mente para mí. Al entrar miré para los lados buscando algún desperfecto mientras julio me miraba nervioso —señor todo está como a usted le gusta— me dijo mientras se mordía la parte interna de sus mejillas con tanta fuerza que podía escuchar el crujir de sus dientes.
¡De seguro le sangra la boca! Pensé jocoso con ganas de reírme, pero mantuve mi rostro neutro.
Bajo su atenta mirada me senté en un sofá donde no pasaron más de diez segundos y a mi lado llegaron varias mujeres para atenderme a las cuales mis escoltas revisaron como de costumbre.
No había la necesidad de hacerlo total ellas no me podrían lastimar, pero tenía que mantener mi imagen de humano adinerado y custodiado por sus escoltas los cuales eran lobos que se habían unido a mí, con el pasar del tiempo sin pretenderlo he tenido mi propia manada porque muchos lobos han llegado buscando mi protección.
—Señor ella es Sandra hoy es su primer día como Scot —me dijo julio mostrándome a una mujer rubia la cual estaba bailando sin gracia agarrando el tubo con tanta brusquedad que se veía rústica, sus movimientos eran verdaderamente extraño tanto que parecía que estaba dando pequeños saltos.
Hastiado de verla saltar como chimpancé no me quedó más que gritarle que se fuera, pero ella continuó como si no me escuchara —te dije que te marche no quiero ver tu Show de circo te recomendaría que te vayas antes de que pierda la poca paciencia que tengo — le ordené sin mirarla mi voz se escuchaba aterradora como me fascina hacerlo y todas ellas al escucharme temblaron nerviosas.
—ustedes también se pueden marchar— les dije a las demás las cuales salieron despavoridas.
¡Que desperdicio un hombre tan hermoso con esa actitud de perros! Comentó una mientras se iban pensando que no la podía escuchar.
¡Y lo arrogante que es! La segundo otra.
—esta es la nueva m****a que me dices que tenéis en el negocio, esas putas de cuartas dan asco, no viste que esa rubia no sabe seducir a un hombre ¿Qué Maldito baile fue ese? — le reclamé cabreado a julio el humano que trabaja para mí administrando el club.
— sé-señor, las despediré en seguida y trataré de que las nuevas empleadas estén más calificadas para trabajar aquí— me dijo con la voz temblorosa, su nervio se podía oler a distancia.
Las emociones negativas de los humanos huelen muy feo.
—eso espero— le respondí sin dejar de mirarlo.
—señor hoy entrevistaré a una chica nueva según su amiga ella es muy hermosa— me dijo sin mirarme a los ojos.
—¿Y eso que tiene que ver conmigo? — le pregunté cortante.
—¿le gustaría entrevistarla usted?— me preguntó con duda temiendo por mi reacción.
—No tomaré tu pregunta como una ofensa porque quiero entretenerme, pero nunca vuelvas a ofrecerme que haga tu trabajo porque si yo deseara entrevistar putas estuviera aquí administrando yo mismo mi club— le dije antes de salir de aquel privado para entrar a la oficina.
NarraElentari.Estoy esperando a la persona que me va a entrevistar, solo espero que no sea un maldito enfermo sexual de esos que hacen pregunta extraña aprovechándose de su poder como jefe. Es que hasta me lo imagino debe ser un viejo barrigón usando una camisa con dos tallas menos la cual le queda apretada y no dudo que esté manchada con Whisky y con varios botones pidiendo auxilio, con un habano entres sus dientes amarillentos y con una calvicie horrible.¡Uffffhasta se me erizó la piel de solo pensarlo! Narra Albert.En el momento que iba entrando a la oficina de julio pude ver a la humana a la cual iba a entrevistar y aunque no me detuve a mirarla pude sentir su delicioso aroma a fresa.Nunca había percibido ningún aroma en los humanos para mí todos huelen normales solo sus perfumes extravagantes o a sudores desagradables, pero esta era diferente este aroma era su olor corporal sin ayuda de ningún perfume. Si no estuviera la maldición de aquella valquiria diría que es mi mate, pero eso nunca pasará porque estoy Maldito y nunca podré tener una pareja.¡Tampoco es que la necesite!, estoy feliz, así como estoy.Me agrada mi vida sin atadura eso de tener a una mujer quejumbrosa a mi lado todo el tiempo no va conmigo.★ pero aun así esa humana es interesante ★ me inquirió mi lobo con malicia, ya sabía que los dos teníamos el mismo propósito, el cual sería disfrutar de esa pequeña humana.Hasta hace poco estaba aburrido, pero al parecer encontré mi entretenimiento.Capitulo 7 mi abuela baila mejor.
Narra Elentari.El intruso me tiene agarrada como si yo mínimo fuera su esposa.¡Si Elena me viera semidesnuda en brazos de un hombre o mejor dicho en medio de dos hombres! Gritaría como loca.Vaya vine dispuesta a no ser puta y ya estoy haciendo un trío.¡Más que una puta salí siendo una zorra! Pensé jocosa por la situación en la que me encontraba con estos dos.Bueno no crean que aquí pasará algo porque con el egocéntrico no me acostaría ni aunque me dé todos los millones del mundo elfico.En realidad no sé si existe ese mundo, pero me suena interesante, bueno como les decía que tachen al egocéntrico de mi lista y con el otro tampoco por lo rudo que es, mira que me tiene como si yo fuera una prisionera y aparte es un lobo.! Mi madre no me dijo que corriera de un lobo, pero aun así no soy un objeto
Narrador.ꟷ vaya nena mira todo ese material ꟷbromeo Elena al ver aElentaricon aquel traje de gatita sexy.ꟷ en seriono crees que soloharé el ridículo en ese escenarioꟷlepreguntóella nerviosa mirando como las demás chicas iban y venían con normalidad. Narrador.En el momento que Albert se encontraba discutiendo con Matías elentari aprovechó su distracción para volver a entrar al club donde buscó desesperadamente a su amiga con el propósito de marcharse de aquel lugar. El solo hecho de pensar que ese hombre quería llevársela por la fuerza le aterraba y más después de aquella amenaza.ꟷ elena vámonos ꟷ le pidió jalando a su amiga del brazo.ꟷ que te pasa elentari ꟷ le preguntó ella soltándose de su agarre ꟷ además dime que fue eso que pasó hace rato ꟷ le volvió a preguntar con duda, ella ya sabía que el jefe era un hombre malhumorado, pero lo que nunca se imaginó fue que él bajaría a su amiga de la pista de baile y más cuando Elentari estaba bailando súper bien.ꟷ te explicaré en casa, ahora por favor vámonos pronto de aquí estamos en peligCapitulo 10 cruel.
Narra Elena.Soy huérfana y no conocí a mis padres al parecer ellos nunca me quisieron o eso creo por qué según me contaba la directora del horrible lugar en el que vivía a mí me abandonaron en el hospital y por más que buscaron a mis padres estos nunca aparecieron, por eso es que deduje que yo solo fui un error en sus vidas por eso me dejaron tirada y nunca regresaron por mí, durante mi niñez siempre soñaba con que ellos aparecían y me sacaban de ese orfanato donde me maltrataban mucho, pero con el pasar de los años fui creciendo y supe que ese sueño nunca se cumpliría que todo no era más que una mera ilusión mía y que nunca saldría de ese orfanato, hasta que cumplí mis 15 años y fue ese día que encontré mi libertad, ese día por ser un día especial para mí me dejaron salir a un parque de diver
Narrador.En las leyes Elficas tener una esposa es ser el protector de esta sin pedir nada a cambio, algo muy diferente de lo que pensaba Elentari quien salió corriendo de su única salvación, pues esta al criarse como una humana pensaba que ser la esposa de alguien significaría entregarse a esa persona en cuerpo y alma, más al contrario para los elfos el matrimonio era un ritual donde juraban proteger a esa persona con su alma de ser necesario y aunque a muchos lo unen al nacer la lealtad es la misma. Ese elfo no estaba ni está enamorado de su reina como ella a si lo dedujo más bien desea cuidarla con devoción, la bestia que asecha a su reina es peligrosa o eso piensan ellos porque según tienen entendido la bestia desea matar a su reina de luz, pero muy por el contrario la bestia solo desea obtener una parte de ella un hijo y nada más, solo que ellos no han sabido interpretar su propósito.Elentar
Narrador.ꟷ que diablo significa esto, Elena y como demonios sabes la dirección de mi casa ꟷ le gritó Albert en el momento que Elena llegó a su despacho cargando dos maletas.ꟷ julio me dijo que usted desea que mi amiga sea su amante y se me ocurrió un plan para que ella acepte ꟷ le dijo ella simulando una sonrisa y aunque esta era la segunda vez que había visto a Arbert no sentía miedo alguno. Ella sabía que Albert no se negaría él estaba muy interesado en su amiga y ella estaba aprovechándose de la gran oportunidad que la vida le estaba brindando, pero lo que ella aún no sabía era que Albert tiene la capacidad de oler sus intenciones.¡Qué ilusa es esta humana al pensar que ella me está usando! Pensó Albert mientras encendía un puro para llevarlo a sus labios dándole la primera calada bajo la atenta mirada de Elena quien deseaba, aunque sea in