¿Cómo era posible que en un minuto estaba llorando porque alguien me ha quitado mi apellido como su esposa y ahora soy yo quien sonríe por darle mi apellido como mi esposo? Sus manos, viajan a mi nuca y allí deja algo para después alejarse de mis labios, para mirar su logro. Ese que no había notado que estaba haciendo hasta que acarició la joya que ya descansaba en medio de mis senos.— Se ve tan hermosa en ti. — dice Curthwulf y yo acaricio la joya que hace tiempo había dejado de usar.— ¿Qué va a pasar ahora? — pregunto sabiendo que la presencia de Nora complican las cosas.— No sé, aún no he pensado en ello. No sé cómo voy a solucionar mi situación con ella, pero, de lo que si estoy seguro es que no voy a ser su esposo. Casarme con ella sin amarla fue un error que cometí por la presión de mi padre. >> Pero, ahora yo soy el alfa de mi manada, no tengo porque seguir ordenes de nadie y no voy a sacrificar mi felicidad cuando En el pasado comprobamos que no es la mujer con la que deb
Al día siguiente Termino de disfrutar con mis pequeños al bañarlos, cuando alguien toca mi puerta. Reconociendo su aroma, lo dejo entrar mientras llevo a Rok y Caleb en mis brazos quienes se acuestan sobre mi pecho.— ¿Qué tal el baño?— Jugaron mucho, ahora están agotados — murmuro y Curthwulf asiente.No necesitaba tener vista de rayos X, para saber que algo pasaba con él, porque no solo se sentía su temperatura corporal extraña, si no que, su corazón parecía latir demasiado rápido al punto de parecer arritmia.— ¿Sucede algo? ¿Estás bien? — pregunto mientras coloco con cuidado a los niños en el cambiador en los que los seco a cada uno mientras estos balbucean o se chupan los dedos.— Bueno… yo…— Dilo, Curthwulf, no des tantas vueltas y dilo, así dejaras de sufrir tanto. — digo y Curthwulf asiente.— Me gustaría que saliéramos hoy. Quiero que me acompañes a un lugar. — dice Curthwulf como si eso le costara.— ¿Salir? ¿con los niños? — pregunto aturdida. — No, solo tú y yo.Era ex
Había corrido, no era mi primera vez corriendo. Lo recuerdo porque cuando Lowell se enteró sobre nuestro divorcio, corrí para alcanzarlos, pero, ni siquiera sabiendo eso, pude calmar la emoción que mi corazón mostraba con cada paso que dábamos.Era como si estuviera dando un paso para llegar al altar donde me casaría con mi hombre elegido. Así de emocionante se sentía y no comprendía porque, pero, a Curthwulf no parecía molestarme mi inexplicable y excesiva emoción.— ¿Para dónde van? — pregunta Lowell saliendo de la cocina y yo me ruborizo como si mi padre me hubiese visto intentando escaparme con mi novio prohibido.— Nosotros…— ¿Por qué estas tan roja, madre? Incluso puedo percibir que tu cuerpo está demasiado caliente y tu corazón late frenéticamente como si estuvieras corriendo. — dice Lowe
Corremos sin saber hacia dónde vamos, pero, no le prestó atención a ello. Es como si realmente me liberara de toda preocupación que pueda tener por mi adaptación a mi nueva vida, siendo de una especie que había analizado un poco, pero, nada se compara con lo que ahora estoy viviendo.— ¿Cómo te sientes? — pregunta Curthwulf y yo sonrío porque este me hable siendo un lobo y yo le comprenda.Mi lengua sale de mi boca como si fuera un perro sacando su cabeza del auto y sonrío al sentirme feliz. Aunque no dejo mi lengua afuera de mi boca porque siento la sensación extraña, disfruto de la libertad y relajación que muestra un perro cuando es sacado de casa.— Me siento bien. Me siento libre.Soy consciente que no lo soy. Es claro que no estoy aun fuera de peligro y que no he podido traer de regreso a mi hermana, pero, por este momento, esos problemas sin r
Analizo la postura de cada uno, era una espectadora que no tenía la oportunidad de salir de este incómodo momento, porque Curthwulf había entrelazado nuestras manos al punto de que al momento de intentar soltarme de él, este la apriete con más fuerzas.— Chicos, no sé cómo era su relación antes, pero, dudo que por muy terrible o buena que sea, discutir un divorcio sea adecuado en medio de la calle. — digo y la mujer me observa por primera vez, sonriéndome de una forma que no logro interpretar.— La señora aquí presente tiene razón, pero, ¿Cómo puedo hablar al respecto si no respondes a mis mensajes? — pregunta Nora mirando a Curthwulf.— Cambié mi número hace tiempo. Pero, no necesitas obtener mi nuevo número, porque esto vamos a manejarlo por medio de abogados, tendrás tu parte de la herencia pactada y desear&eacu
Sabia cuanto Lowell había amado a su madre. La primera vez que lo vi, su mirada lastimera mostraba que sufría, esa misma mirada se observaba en él justo ahora. Era como si el tiempo se hubiese regresado, pero, también, se veía muy distinto.Era como una mezcla de dolor viejo con decepción que causa agonía, pero, mi pequeño. El niño que se aferraba a mis brazos cuando lo rescaté de la lluvia, ahora se movía firmemente a mi lado, mostrando determinación.— No voy a pedirte que me ames, eso sería rebajarme a recibir unas migajas de un amor que no es para mí, ni tampoco sabes fingir. Pero, si te voy a pedir que te detengas.>> No te lo pido que lo hagas por mí, si no, por tu propia seguridad. Como puedes ver, mi madre si sabe amar como una y defiende tanto a sus hijos, que no se molestaría en matar a una loba. Ha acabado con alfas, una loba como usted, no sería complicado para ella. — dice Lowell.La mujer, se transforma en humana, mostrando su rostro dañad
Horas despuésHabía cenado por primera vez con la familia de Bratt. Con lo que había sucedido con Nora, la idea de salir a correr queda en el olvido y por ello, estoy con los pequeños dedicándoles tiempo mientras Lowell se encuentra dormido con Zaid en mi cama.No habíamos hablado de lo que había pasado con Zaid, pero, mi pequeño parecía saber que era lo que los demás necesitaban de él, porque se había quedado con Lowell jugando y distrayéndolo de tal manera que se quedaron profundamente dormidos por el agotamiento que dejó mi habitación llena de muchos juguetes.— Cariño… — escucho a Curthwulf llamarme y yo camino con mi cuarto hijo sobre mi hombro intentando dormirlo.— Aquí estoy, intentando dormir a los niños.— ¿Estas muy cansada? — pregunta Curthwulf y yo quiero decir la ve
Los recuerdos de cómo me convertí en una pervertida, vienen a mi mente y por ello, me ruborizo, alejándome de su peligrosa cercanía. Estaba claro que iba a estar bastante en riesgo si me quedaba cerca de él, recordando como lo había visto la primera vez que supe que aquí había un río.— Es agradable que hagas cosas así, aunque no son estrictamente necesarias. — murmuro.Aunque realmente deseo que sean necesarias. Debo mencionarlo para que él no lo vea como algo que hace por obligación, si no, porque realmente desea ello. Porque desea que no seamos como su antiguo matrimonio.— Lo son, porque quiero que te enamores de mí y aunque estes enamorada, refuerces ese sentimiento con lo que hago. Porque no quiero que me veas como el hombre que solo se esfuerza cuando está conquistando y después olvida que el amor es como una planta que debe regarse cada d&