—Sabes… ahora que he vuelto, deberíamos irnos de viaje, recuerdas así como cuando me lo decías mientras fuimos uno.

—Tcs, estas loca. Yo nunca dije tal cosa.

—Lo dijiste cariño, lo recuerdo perfectamente, pero claro, como vas recordarlo si cuando lo hicimos, estabas ebrio.

—Por supuesto, porque si no fuera por eso, jamás me habría acostado contigo. Y más si hubiera sabido que eras una lunatica.

—Aush, amor, eso dolió. Pero, aún así te amo

Tenia una sonrisa torcida adornando su rostro, eso me enfurecia tanto porque seguramente estaba tramando algo y está visita era parte de su plan porque nadie sería tan estúpido como para visitar a tu enemigo sin estaré respaldado por alguien más

Ella me rodea mientras se acerca, su mirada juguetona y burlona desafían mi furia provocándome, intento controlarme porque no puedo cometer otro error, y si le hago daño, Estrella lo recibirá y yo también

—Tienes tantas ganas de matarme ¿no es así amor