El alfa y el beta se convirtieron en sus lobos, adentrándose al gran bosque. Algo en su interior se revolvía al saber que estarían cerca de sus mates. Luego de correr por unos minutos llegaron a las fronteras de su manada. Salieron de su territorio y a lo lejos vieron una cabaña. Pero al acercarse más a ella se dieron cuenta de que esta se encontraba en ruinas.
—¿Estás seguro de que aquí es en donde viven? —pregunta el lobo mayor.
—En el informe de la universidad decía que ellas viven aquí —dice seguro de sí mismo el beta.
Él leyó con sumo cuidado aquel informe donde se encontraba la información de sus otras mitades y puede apostar que en él decía, que el lugar donde viven aquellas dos brujas es donde se encuentra aquella cabaña en ruinas.
—Mira Alan —a punto con su mano en dirección a la caba&nt
—Apágate —la pelinegra trata de apagar la alarma que programo la noche anterior para no dormirse y poder llegar a la universidad temprano porque siempre tuvo un sueño muy pesado.Se obliga a sí misma a levantarse de su cómoda cama y se dirige al baño para poder vaciar su vejiga y luego tomarse un baño. Al salir del baño se dirige a su armario.—Mmm ¿Qué me puedo poner hoy? —analiza la poca ropa que tiene.Al estar huyendo de un lugar a otro, se acostumbró a tener poca ropa, no le fue necesario tener mucha, ya que siempre se la pasaba encerrada en el lugar donde estuviera viviendo.Luego de pensar por unos segundos se decide por un pantalón negro, una camiseta sin mangas blanca y sus preciadas botas estilo militar negras. Siempre opto por usar ropa cómoda que le permitiera poder moverse. Ya que si utilizara zapatos con tacones no podr&i
—Esto es mucho para asimilar —Natasha siente que su cabeza se encuentra en un estado que toda la información que le acaba de dar Keira es difícil asimilarlo.Saber que ha estado reencarnando, que es la elegida, la que traerá paz entre las especies y además una bruja que también reencarna junto con ella quiere matarla.Lo único que pasa por su mente es que el universo la tiene en su lista negra.—Joder Nat —Keira mira la hora—. Se nos hace tarde para ir a la universidad.Las dos brujas agarran sus bolsos y salen apuradas de su casa y en un abrir y cerrar de ojos ya se encuentra yendo rumbo a la universidad.—Keira ¿cómo existieron los guardianes?Aquello es algo que desconoce todavía. Sabía de la existencia de ellos, ya que el papá de Keira era su guardián, pero nunca se atrevió a preguntarle a este como es que llegar
Natasha recorre los pasillos de la universidad pensando en donde escondería el alma.Su madre le dijo donde se encontraba, pero nunca especifico en qué lugar, y tener que recorrer todo el edificio que es un castillo con mucha historia, le tomaría toda la vida—Natasha, Natasha, Natasha.La bruja detiene su andar al escuchar una voz nombrar su nombre.—Natasha, Natasha, Natasha.Vuelve a escuchar aquella voz llamándola, pero se escucha como un susurro que si no tuviera la audición muy sensible no la escucharía.Empieza a escuchar a la voz llamándola, la sigue hasta que empieza a escucharla cada vez más cerca. Sus pasos se detienen cuando una gran puerta de madera de un color marrón oscuro se lo impide. Al levantar su vista ve que arriba de esta dice biblioteca. Empuja la gran puerta y al adentrarse siente que sus pies van a fallar al ver la cantidad de libros
Las dos brujas se acercaron hasta donde estaban aquellos desconocidos con su amiga, pero mantuvieron su distancia.—Pero mira que tenemos aquí —dice el vampiro con cierta burla en su voz.—La elegida —dice la bruja con una sonrisa. Al ver su aura la reconoció de inmediato, ya que esta era única y demostraba el gran poder que ella tiene—. Ella va a estar muy feliz cuando le diga que te encuentras en la manada Crescent Moon, después de estar buscándote por dos años, al fin apareces.—Cuando libere a Ava, la agarras y te trasportas con ella adentro de la universidad y protege a todos hasta que llegue el alfa —Natasha le ordena a Keira, ya que no quiere ponerlas en peligro.Además, ella puede contra todos ellos, para eso fue entrenada, para ser la mejor. No pudo proteger a su manada, pero a esta, si lo hará.—Entendido —Keira acepta sin rechina
El alfa junto a sus hermanos, corrían por el bosque en dirección a la universidad.Ayer los dos hermanos volvieron molestos por no haber encontrado a sus mates. Lucas sentía miedo al saber que algo le podría pasar y no estar ahí para protegerla. Y Alan se sentía molesto porque fallo, algo que él jamás se lo permite y porque al igual que su hermano temía por la seguridad de su mate.Una vez llegaron a la universidad se dirigieron para la primera clase.Lucas busca con la mirada a su mate, pero solo ve a su amiga y su amino decae un poco ya que quería verla.La clase pasa en un abrir y cerrar de ojos y cuando menos se da cuenta la clase termina. Todos salen y se dirigen hacia la cafetería.—Alfa unos vampiros están atacando el lado oeste de la manada —le informa un guerrero por el link.—Maten a todos —ordena.Su lobo empezó
Las clases habían sido suspendidas, todos los que se encontraban en la cafetería fueron ordenados a ir a su casa. En la manda se avisó que había toque de queda hasta el día siguiente, ya que había que asegurar que toda la manada estuviera a salvo, y no haya quedado ningún intruso merodeando. Natasha aprovechó que Lucas se encontraba junto a sus hermanos hablando con unos centinelas y guerreros de la manada, para aprovechar y escabullirse junto a Keira, entre los estudiantes. —¿A dónde creen que van? —Natasha maldice a lo bajo al escuchar la voz de su mate y saber que la descubrió. Se da la vuelta y lo encuentra cruzado de brazos. —Nos vamos a casa —en parte no mentía, ya que su cuerpo se encontraba agotado por la lucha sucedida hace minutos atrás, además el usar su magia, la agotaba aún más. Lo único que Natasha quería era llegar a su cabaña, vaciar todo su refrigerador, ya que no pudo almorzar porque el ataque sucedió cuando estaba por comer y
—Antes de que nos expliques —Natasha detiene a Alan—. Vayamos a dentro porque me muero de hambre. Natasha al ingresar a la casa, camina directo hacia la cocina y busca en su refrigerador aquel filete de carne cruda que tanto desea comer. Coloca el filete sin cocinar en un plato y busca unos cubiertos antes de sentarse en la pequeña mesa que se encuentra en la cocina. —Bueno, ahora habla —le indica a Alan que hable mientras ella degusta aquella carne. No le daba asco comer aquel filete crudo, ya que al ser una mujer loba, cada tanto liberaba a su loba y esta salía a cazar, es tan normal para los licántropos comer carne cruda. —Bueno les voy a contar desde el principio para que entiendan —Alan se frota las manos por sus piernas—. Hace unos días me informaron que habían llegado al pueblo dos humanas, y que asistirían a la universidad para seres sobrenaturales del pueblo. <<Eso me pareció raro, porque a nuestra universidad solo asist
Los tres hermanos observaban a Natasha, esperando a que les cuente lo que ella ocultaba. Natasha solo esperaba que, al contarles sobre la profecía, ellos se lo tomaran bien. —Bueno —juega con sus manos, pero algo en ella se removió al sentir aquel olor que llego a ella. Aquel olor tan familiar y el cual era uno de los que más extrañaba y jamás podría olvidar. Una sonrisa aparece en su rostro y no duda ni un segundo en levantarse de la mesa y correr en dirección a la entrada de la casa. Su loba empieza a rasgar en su interior para salir, las dos lo habían sentido y estaban emocionadas por confirmar si era aquella persona que no veían hace mucho tiempo. Los demás en la mesa se miran entre ellos sin entender por qué Natasha salió corriendo, pero no dudan en seguirla. Natasha abre la puerta de la entrada y no duda ni un segundo en lanzarse a los brazos de aquella persona. Sabía que era él, al sentirlo llegar lo supo, pero necesitaba compro