Jacob sentía el cuerpo frío.

Xandria entró con el café. “Señor Cook, ¿se han ido mis primos?”.

Jacob le dirigió una mirada complicada, frunció los labios, y señaló su pequeño escritorio.

“Saca tus cosas. Serás como todos los demás en el futuro. ¡Haz lo que tienes que hacer!”.

El rostro de Xandria se paralizó. “¿Ha entendido mal? Como vió hace un rato, ¡Nicole y Grant son mis primos!”.

“No hay ningún malentendido. La compañía trata a todos por igual. Además, te sugiero que cambies esa foto grupal familiar en tu fondo de escritorio. No debería haber una influencia tan desagradable en la compañía. El mérito debería ser siempre lo más importante”.

Jacob respiró hondo. Como un hombre de mediana edad que casi perdió su trabajo, ¡tenía que dar cada paso con firmeza y de manera correcta!

“¿P-por qué?”.

Xandria no entendía. ¿Por qué la actitud de Jacob hacia ella había cambiado tanto después de que vinieran Nicole y Grant?

¿Nicole y Grant le dijeron algo?

“¡Porque este es mi territori