Nicole no respondió a ninguno de los mensajes. Ella se bañó, se aplicó una mascarilla facial y se veía más fresca.

Floyd la esperó para cenar abajo. Él veía cómo su hija comía y suspiró aliviado cuando ella terminó un tazón de sopa.

Él dudó y dijo: "Pequeña N, no necesitas sentirte presionada por esto...".

Nicole esbozó una sonrisa relajada.

"Lo sé. Estaré bien. La vida de Eric ya no corre peligro. Le pagaré lentamente todo lo que le debo. En cuanto al resto, no quiero hablar de eso ahora...".

De todos modos, Nicole no podía odiarlo tanto como antes.

Sin embargo, la idea de estar juntos… Este pensamiento fugaz pasó por su cabeza, pero ella lo rechazó.

Nicole solo esperaba que Eric estuviera bien.

El enredo entre ellos era demasiado profundo. No estaba claro quién le debía más al otro.

Floyd asintió con satisfacción. Él estaba contento de que su hija lo hubiera resuelto.

Él levantó la mano y llamó a un hombre alto y fornido con traje negro y gafas de sol que se veía muy feroz.