En este momento, Jeremy se debate en muchas contrariedades, su cabeza es un vaivén de ideas. Por su parte, llega el doctor para avisarle a todo:

—La señora Holwes, a despertando y pide ver a sus hijas—Hannah corre de inmediato con el doctor, mientras que Victoria los sigue sin ánimos.

—Mamá, despertaste—le musita Hannah, a su madre al llegar y le a un ligero beso en la frente.

—Hija mía, mi chiquita—Victoria se queda, a un lado presenciando la escena entre ambas.

—Victoria ¿No piensas saludar a mamá? —pregunta Hannah y la mira aprensiva.

—¿Cómo se siente?

—No me piensas perdonar.

—Lo importante es su recuperación. Bastante culpa siento, que por perseguirme le sucedió esto.

—Tanto formalismo hija.

—Usted solo es mi ex jefa, porque renuncio—la mira Melissa con severidad, dejando a un lado su amor de madre.

—No puedes renunciar, Victoria firmaste un contrato, así que debes de cumplirlo. No tengo tiempo para buscar y entrenar a otra asistente. Quieras o no continuarás trabajando conmigo—l