La señora Elizabeth a pedido a Jeremy que los viste a la mansión de nuevo junto con su prometida Victoria. Realmente quiere hablar con Vicky a solas, y convencerse que el niño que conoció, el hijo de Sandra no es realmente su nieto. Le viene a su memoria el rostro del niño y le trae recuerdos de Jeremy cuando tenía la misma edad. Se siente algo inquieta y piensa que Victoria puede ayudarle en buscar la verdad del origen del niño de Sandra.

Jeremy aún desconoce que Sandra estuvo ayer en la mansión y que gracias a esa visita su madre se descompenso. Sin embargo, al llegar una de las empleadas de la casa le hace el comentario y le informa enseguida a Jeremy de lo ocurrido. Este se enoja muchísimo, pero esta vez no tiene el impulso de ir hasta la casa de Sandra para encararla. Se le ocurre advertirle lo siguiente a Vicky:

—Vicky la idiota de Sandra estuvo aquí en la casa ayer con su hijo. Esta vez ha llegado demasiado lejos. Por su culpa a mi madre casi le da un infarto, vino a presentar