Helena sintió la energía que con tanta voracidad se había apoderado de su cuerpo antes de disiparse cuando vio al comandante dispuesto a matarla.

En el fondo entendió que aunque lo amaba profundamente y que lo único que deseaba era estar cerca de él, eso ya no podía suceder.

Estuvo lúcido hasta que estuvo en su presencia, su presencia fue el detonante para despertar la maldición de la locura en él.

Y sabía que la distancia era lo mejor para él, aunque le costara el corazón, aunque significara que moriría por dentro, porque entendía perfectamente que su sufrimiento era culpa de ella y de los de su especie. Después de todo, fueron los de tu clase los que cometieron atrocidades.

Fue su especie la que condenó a todo un linaje a tener la sangre de sus esposas en sus manos, en ese momento mientras lloraba en la cama repudió todo lo que era.

Pensó en ese poder que habitaba dentro de ella, que tantas veces le había salvado la vida, y pensó que a cualquier costo salvaría la vida de John, se se