Hoy les dejo con el corazón en un hilo, lo sé… Pero, ¿no es esa la magia de esta historia? Lunara está enfrentándose a su destino, y cada palabra nos acerca más a la verdad que tanto hemos estado esperando. Esa voz, ese momento… sé que están tan ansiosas como yo por descubrir qué pasará después. Gracias por seguir aquí, por vivir cada emoción conmigo. Esto apenas comienza, así que respiren hondo porque lo que viene será inolvidable.
El fuego de la ira puede consumir reinos enteros, pero jamás permitirá que le arrebaten lo que le pertenece.𖡨❯╅╾┽┄╼❮ཤ𖢘ཥ❯╾┄┾╼╆❮𖡨Kael:Cuando salgo de la habitación de mi pequeña, una punzada de vacío se clava en mi pecho. Necesito un descanso, o al menos eso me repito mientras arrastro mis pasos hasta mi habitación. Al llegar, me quito los zapatos de un tirón, dejándolos caer al suelo sin cuidado. Me dejo caer sobre la cama, tirando de las mantas para cubrirme mientras cierro los ojos, buscando un alivio que no llega.El dulce aroma de mi pequeña sigue impregnando mi piel, una mezcla de su esencia y su inocencia, un bálsamo que no debería desear con tanta intensidad. Pero me es imposible resistirme a ella. Trato de dormir, doy vueltas en la cama, mi mente luchando contra el torbellino de pensamientos que ella provoca.Finalmente, me rindo. Suspirando, me levanto y camino por los pasillos en la penumbra, cada paso resonando como un eco de mi obsesión. Mi cuerpo se mueve como un autó
Si no puedo proteger aquello que deseo, entonces me aseguraré de que nadie más lo posea, aunque me cueste el alma.𖡨❯╅╾┽┄╼❮ཤ𖢘ཥ❯╾┄┾╼╆❮𖡨Kael:Mis ojos se clavaron en ella con una intensidad que habría reducido a cualquiera a cenizas. Pero ella no era "cualquiera". No. Ella era esa criatura irritante que había logrado atravesar todas mis defensas, colándose como un espino bajo mi piel.—Incluso dije que eres un perro sin hogar. —Su voz era suave, casi inocente, pero el veneno detrás de esas palabras era innegable.Mi mandíbula se tensó al instante. Mis dedos se curvaron alrededor del reposabrazos, y sentí a Tiān Láng, mi lobo interior, carcajearse como si aquello fuera la mayor diversión de su miserable existencia.«¿Un perro sin hogar? ¡Esta niña ha perdido la cabeza!» —bufó, divertido.La vi cubrirse los labios al notar mi mirada, como si quisiera tragarse sus propias palabras. Bajó la cabeza, pequeña y vulnerable, pero yo sabía que esa fachada no era más que una máscara.Me giré ha
La línea entre la rebeldía y la sumisión es delgada, pero no te preocupes… aprenderás a cruzarla conmigo.𖡨❯╅╾┽┄╼❮ཤ𖢘ཥ❯╾┄┾╼╆❮𖡨Lunara:Cuando puse un pie en el castillo de Erfall, sentí como si me hubieran arrancado el aliento. No por su belleza, aunque era innegable, sino por la sensación de amenaza que emanaba de cada piedra, cada sombra, cada rincón de aquel lugar.Caminaba al lado de su fiel amigo, un hombre de rostro impenetrable que me lanzaba miradas que parecían cuchillas. No era necesario que hablara; su desdén era palpable. Cada vez que bufaba, me fulminaba con los ojos, y los murmullos de los demás habitantes del castillo no ayudaban. Estaba cubierta de sangre y con heridas abiertas, pero ¿acaso eso justificaba tanto desprecio?El frío me calaba hasta los huesos mientras trataba de seguir su paso. Tenía que correr para no quedarme atrás; mis piernas, cortas comparadas con las suyas, me exigían el doble de esfuerzo. Por dentro, maldecía su indiferencia. «¿Ni una sola vez i
El fuego de mi deseo es mi condena, y aún así, no puedo dejar de quemarme en su piel.𖡨❯╅╾┽┄╼❮ཤ𖢘ཥ❯╾┄┾╼╆❮𖡨Kael:Han pasado dos días desde que la traje a mi reino. Mi pequeña y frágil lobita, un alma demasiado pura para soportar la oscuridad que habita aquí. Sin embargo, no la he visto desde entonces. Mis responsabilidades como gobernante me han mantenido atado, intentando reparar los desastres que dejaron esos insensatos que se atrevieron a desobedecerme.Puedo sentir la desaprobación de muchos. Sus miradas hablan más que sus palabras. Para ellos, traer a una criatura tan vulnerable como ella es una debilidad, una traición a mi naturaleza implacable. Pero no tienen que estar de acuerdo. Ni ella tampoco. Todo esto es mi decisión, y ellos deberán soportarlo.Salgo de la ducha, el vapor aún colgando en el aire, como un susurro de las llamas que alguna vez quemaron mis enemigos. Frente al espejo, mi reflejo parece burlarse de mí. «¿Cuánto tiempo más vas a fingir que esto es por algo má
Las palabras, como cuchillos afilados, desnudaron la verdad, dejando un alma rota entre mentiras y traiciones.𖡨❯╅╾┽┄╼❮ཤ𖢘ཥ❯╾┄┾╼╆❮𖡨Lunara:El aire estaba cargado con el aroma a madera y un tenue perfume floral que había dejado Erfall tras su inesperada cercanía. Me giré en la cama, intentando evitar pensar en lo sucedido, pero su presencia seguía impregnada en cada rincón de mi mente… y de mi habitación. Cerré los ojos con fuerza, buscando algo de paz, pero en lugar de eso, las palabras de Yě Líng resonaron en mi cabeza como un eco burlón. «Aunque eso quisieras,» —dijo, y pude sentir su sonrisa traviesa incluso sin verla. —Tsk, estoy nerviosa, ¿sabes? —murmuré, abrazando la almohada mientras hacía un leve puchero. El sonido de su suave risa retumbó en mi mente. «Claro que lo estás. Pero vamos, admítelo, ese macho te tiene pensando en cosas que no deberías ni imaginar.» —¡Cállate! —protesté, sintiéndome como una niña pequeña atrapada en una conversación de adultos. Por un
Cuando el poder y el deseo chocan, solo el caos decide el destino.𖡨❯╅╾┽┄╼❮ཤ𖢘ཥ❯╾┄┾╼╆❮𖡨Kael:La niebla se alzaba desde el suelo como un manto que oscurecía todo lo que tocaba. Cada paso que daba resonaba como un eco sordo, un recordatorio del vacío que había quedado en mi corazón. —¿Cómo podía haber sido tan débil? —Los susurros del viento apenas alcanzaban mis oídos, opacados por los gritos furiosos de Tiān Láng, que aún resonaban en mi mente.«¡Idiota! ¡¿Cómo te atreves a dañarla así?!», —me gritaba. Cada palabra era un látigo, cada reproche una espada afilada que desgarraba las capas de mi autocontrol.Mi pequeña malcriada, la que había transformado mi mundo en caos con su inocencia y su poder. No la entendía, no la quería cerca. Era mi obligación mantenerla alejada de todo, de todos, para evitar que las sombras que habitaban en mí la arrastraran. La única razón por la cual seguía respirando era porque estaba seguro de que ella era la clave para destruirlo todo. Los cuatro reino
En un mundo donde el deseo y el odio se entrelazan como sombras, las almas destinadas a amarse deben desafiar sus propios demonios para encontrar la luz que las redime.𖡨❯╅╾┽┄╼❮ཤ𖢘ཥ❯╾┄┾╼╆❮𖡨Lunara: El aire estaba cargado de tensión. Kael tenía sus manos alrededor de mi cuello, sus ojos —esos ojos que ahora eran míos— me fulminaban con un odio tan intenso que, si las miradas mataran, estaría cenizas. —¡Cámbialo ahora, o te mato aquí mismo! —gruñó, apretando con más fuerza. Yo, en mi nuevo y "mejorado" estado físico (gracias al cuerpo de Kael, claro), intenté golpear su muñeca para soltarme. ¿Resultado? Nada. Absolutamente nada. Aparentemente, los músculos no venían con manual de instrucciones. «Puff, así como está este idiota, seguro que llega nuestro Salvador en cualquier momento», —bufó Tiān Láng en mi mente. Y justo cuando el lobito hablador apenas terminaba de murmurarlo, apareció Lóng Xiǎoyún, su rostro endurecido por la ira. Sin decir una palabra, lo tomó del cuello, le
Cuando el orgullo y el deseo chocan, la línea entre el odio y la rendición se desvanece.𖡨❯╅╾┽┄╼❮ཤ𖢘ཥ❯╾┄┾╼╆❮𖡨Lóng XiǎoyúnCaminaba por los pasillos haciendo guardia. Todo parecía estar en orden, pero había algo en el ambiente que no me dejaba tranquilo. Mi señor, conocido por su frialdad impenetrable, estaba actuando extraño. Su expresión, normalmente severa, ahora parecía... dulce.Fruncí el ceño mientras recorría los interminables pasillos del castillo, intentando encontrar una explicación lógica. ¿Mi señor dulce? Era como imaginar que el sol dejara de brillar o que la luna cayera del cielo. Algo no encajaba.—¿Se habrá golpeado contra algo? —murmuré en voz baja, consciente de lo absurdo que sonaba. Una sonrisa irónica curvó mis labios antes de regresar mi atención a la vigilancia. Sin embargo, mis pasos se detuvieron al escuchar los susurros de varias mujeres provenientes de un pasillo cercano.—¿Por qué mi señor no nos deja servirle? —se lamentaba una voz femenina con desconcier