BUENA:La celebración llegó y Lucían y yo nos dirigimos al gran salón del banquete. —Hoy vendrán varios alfas qué pertenecen a la ancha faz de la tierra. Me susurra Lucían cuándo estamos casi llegando al salón. —Y ¿Ahora me lo dices? Le reclamo frunciendo el ceño. —Lo siento, olvidé decirte. Dice con media sonrisa y nos presentamos al gran salón. —Con ustedes la luna de esta manada y nuestro alfa. Dice uno de los guardias y todos hacen silencio haciendo una reverencia. —¡Que viva nuestro alfa y nuestra luna! Dice juntos a una voz. —Esto se siente raro. Le digo a Lucían a través del link y este entrelaza sus dedos con los míos brindándome su apoyo. —Ya te acostumbrarás, sólo es cuestión de tiempo. Me responde a través del link y nos dirigimos a saludar a algunas personas y hablar un poco. Cuándo creo que ya es suficiente saludar a casi todos… Un lobo alfa muy guapo, alto de ojos azules y piel bronceada se acerca a nosotros. —Me alegra verte después de tantos años Lucían
BUENA :Pasamos un dulce momento en el balcón, luego salimos para iniciar el gran banquete. Todos nos retiramos a otra sala, qué tiene varias mesas en el centro del salón, y todo tipo de comida como: frutas, varios tipos carnes de diferentes maneras, varios tipos de panes, vegetales, varios tipos de postre… Etc. —Mmm, esto se ve delicioso. Susurro al sentir que tengo mucha hambre y no me había dado cuenta. Todos tomamos nuestros lugares y yo de inmediato empiezo a comer. Levanto la mirada para ver todas las mirada en mi persona. —¿Qué? Pregunta frunciendo el ceño. —Primero tengo que decir algunas palabras para empezar el banquete. Me susurra Lucían con una sonrisa y yo no puedo con la vergüenza. —Ah. Es lo único que digo y Lucían empieza a hablar con una sonrisa en los labios. Y la verdad no escuché nada de lo que dijo… Qué termine de hablar rápido, tengo mucha hambre. Pienso mientras miro un muslo de pollo asado. Cuándo por fin Lucían termina respiro aliviada. —Al pare
BUENA :Dos días pasaron y en estos momentos camino por los pasillos para dirigirme a la habitación de mi lobo. Pues lo he obligado a que se quede en la habitación para que descanse y Oreb me ha informado qué no ha hecho más que dormir quejarse de todo, mientras yo me he encargado de todos los asuntos qué tengan que ver con la manada y me ha ido muy bien junto a Mariana y Gerson. —Señora. Escucho la voz de Gerson y me giro a mirarlo. —Olvidé mencionarle sobre la construcción de unas cabañas… Necesitan su aprobación. Dice acercándose a mí, pero con suficiente distancia. —¿Nuevas cabañas? Pregunto y Gerson asiente. —En este mes ha habido varias transformaciones y muchos han encontrado a sus parejas, por lo que necesitan de un hogar. Me explica y asiento. —Bien. Digo mientras tiendo la mano para firmar la autorización. Tomo la pluma y ahí mismo firmo. —Sí no hay más, entonces me retiro. Le digo y él asiente haciendo una reverencia. Mientras camino observo a mi hermano con
BUENA :De la noticia de mi embarazo solo lo sabrían cinco personas por ahora, aparte de Lucían y yo. Mariana, Gerson, Oreb, Susana y Brandon, este último se va a encargar de mi protección en cada momento. Las cinco personas que he mencionado se encuentran en mi habitación todos mirándome con una sonrisa en los labios. —Qué suerte tienes, desearía que sea Gerson qué cargara con todos mis malestares. Habla haciendo un puchero mientras mira a su mate. —No tendría problemas, mientras tú no estés sufriendo. Le dice Gerson dejando un beso en su mejilla y ella sonríe como tonta. —Muchas felicidades Buena, serás una gran madre.Dice Susana mientras se acerca a mí y me abraza con amor y cariño. —Gracias Susana. Digo mientras le devuelvo el abrazo. Todos me felicitan y Mariana llora en mi hombro. —Seré la tía consentidora y mi bebé y el tuyo serán como hermanos. Dice limpiándose los mocos en el hombro del vestido que me puse para recibirlos. Hago una cara de asco y la aparto de mí
GERSON :Con una sonrisa adorno el antojo de mi mujer junto a una rosa roja. —Nunca te había visto tan emocionada. Escucho la voz de Susana y me giro a mirarla. —Nunca había estado tan feliz. Le respondo con una sonrisa y ella asiente. —Se nota, tu aura irradia felicidad pura. Habla antes de marcharse junto a una bandeja de frutas. Respiro profundo y me dirijo a la habitación. —Mariana está en peligro Gerson. Escucho la voz de mi lobo y frunzo el ceño. —Puedo sentirlo ¿Qué le habrá pasado? Le digo a través del link, mientras camino con más rapidez por las escaleras. —No lo sé Gerson, no puedo comunicarme con su loba. Dice mi lobo y corro a toda velocidad al sentir su miedo. Abro la puerta de inmediato y un extraño olor me hace soltar la bandeja de golpe y tapar con mis manos mi nariz. —Cariño… Cariño ¿Estás aquí? Pregunto sintiendo desesperación y busco por todas partes. Trato de sentirla, pero no encuentro rastro de ella. —Se la han llevado Gerson, se han llevado a
BUENA :Los guardias y yo revisamos todos los límites de la manada junto a las partes del bosque dónde hay menos guardias. —No hemos encontrado nada señora, los que secuestraron a la señora Mariana son muy astutos. Dice Brandon acercándose a mí y frunzo el ceño. —Nadie sale sin dejar rastros… Aa menos de que alguien de aquí les haya dado unas de nuestras salidas secretas. Digo pensativa y caigo en cuenta de eso. —Mierda, ¡Todos síganme! Digo transformándome en loba y corro hacía la mansión. Cuándo vamos a entrar, mi lobo está en la puerta esperando. —Lucían, creo que el secuestrador ha utilizado los pasadizos secretos. Hablo y él me mira a mí y luego a todos. —Gracias a todos por su ayuda, pueden irse. Dice mirando a los demás guardias y estos con una reverencia se marchan. —¿Qué pasa? Le pregunto y él toma mi mano entrelazando nuestros dedos y empezamos a caminar dentro. —No es necesario la búsqueda, he encontrado suficiente pista. Dice hablando a través del link y as
MARIANA :Llevo una o dos horas qué desperté y siento como empiezo a desesperarme. —Maldita sea, quiero salir de aquí. Digo bajito mientras intento quitarme la maldita soga con mis garras, pero es imposible… Al parecer tiene magia. —Tranquilizate Mariana, debemos cuidar nuestro cachorro. Dice mi loba tratando de tranquilizarme y empiezo a respirar profundo para calmarme… Todo por mi cachorro. Pienso y repito esta acción varias veces hasta tranquilizarme un poco. Minutos más tarde siento el olor de algo extraño. —Algo se acerca Mariana. Dice mi loba alerta y estoy de acuerdo con ella. —Es una rara especie, su olor es extraño y algo nauseabundo. Digo arrugando el ceño con ganas de vomitar. —Así es, creo que es de los creados. Dice mi loba y en ese instante escucho como el cerrojo es abierto y alguien ingresa con pasos pesados. —Al fin estás despierta… Mariana. Escucho una voz que se me hace conocida y levanto la cabeza para no estar equivocada. —¿Malon? Pero ¿Qué hicieron
BUENA :Cuándo mi cuerpo toca la cama, respiro profundo y cierro los ojos por un instante. —Estás agotada, debes descansar. Escucho la voz de Lucían y se sienta en la orilla de la cama. Respiro profundo y niego. —Por más que quiera no puedo, la incertidumbre no me deja en paz. Hablo y abro los ojos para mirarlo agotado. —Lo sé, pero recuerda que debes cuidar a nuestro cachorro porque le hace mal que no descanses. Dice de manera conciliadora y vuelvo a respirar de manera profunda. —Tú también debes descansar algo, te miras muy agotado. Susurro sentándome en la cama. —Hasta que no de con mi hermana no puedo descansar… Esto es frustrante. Habla Lucían y pasa la mano por su cabello desesperado. Con delicadeza tomo su mano y le doy pequeños besos. —Todo va a estar bien, esos malditos no se saldrán con la suya. Le digo con la voz conciliadora y lo abrazo transmitiendole todo mi apoyo. —Gracias por siempre estar conmigo. Me susurra mientras entierra su cara en mi cuello. —No