NARRA DANKO Cuando fui al bar gay que me encanta porque siempre me encuentro a muchos que desean que los folle, les encanta como los dejo bien satisfechos y aprovecho usando mis fetiches con ellos, no me esperaba encontrarme al novio de mi hija allí, creí que con la primera vez que lo lleve a lo mejor no le gusto, pero aquí está Él y bien tomado, lo veo como enojado y a la vez triste, mejor le pregunto lo que le pasa. Me acerco a saludarlo y note que en verdad estaba borracho, cuando le pregunte lo que le pasaba, me contó lo que vio en la universidad, que mi hija se besó con su profesor, me imaginé el dolor que debe estar sintiendo, pero jamás creí que mi hija hiciera eso, ella no tiene malas maneras, pensé en preguntarle después, solo lo acompañe a seguir tomando. Ya estaba con mis tragos encima y se me metió una idea que en ese momento me pareció muy buena, lo saque de allí, pero no me dejaron manejar, Mijaíl se fue con alguien a follar y sabía que la casa estaría sola, pues Kiara
En la misiva Mijaíl me decía que a veces la vida te cobra lo malo que haces y a lo mejor eso pasó entre Giorgio y Él, me decía que no me pide perdón porque el amor es lo que valió entre los dos que pensaban hablar conmigo, pero ahora no me merecía nada de eso y que no lo busque más porque reniega de ser mi primo, ya que a la familia no se lastima y yo dañe a quién debía proteger. Deje a un lado ese pedazo de papel, quise moverme, pero el intenso dolor no me dejaba, los golpes de Mijaíl habían sido certeros y dolorosos, me sentía solo opté por llamar a Reinhart que no demoro en venir a verme y se alarmó de mi aspecto me limpio, mis lágrimas no dejaban de caer por mis mejillas, me preguntaba el motivo de mi llanto, pero no le decía nada cuando termino de asearme y darme unas medicinas para el dolor y desinflamantes le pedí que se sentara que le iba a contar todo. Reinhart me escuchaba, no obstante ver sus gestos de sorpresa y al final de indignación me dolieron porque se levantó y me c
AFUERA DE LA CLÍNICA LO QUE SUCEDIÓ Danko salió llorando escuchando las palabras duras de su hija, sintió su odio, sus deseos de verlo muerto, bajo hasta el estacionamiento, fue hasta su moto de alto cilindraje se montó en ella y justo Robert llegaba en su auto lo alcanzó a ver y le grito alegre. —Danko, mi amor, espera mi amor Pero Danko estaba como loco en su mente, revoloteaban las duras y crueles palabras de odio de su hija, las lágrimas empañaban sus ojos, pero eso no le importaba, solo encendió la moto, hizo chirriar las llantas y se fue a toda velocidad, Robert volvió a subirse en su auto y lo siguió. El pobre hombre enamorado lo seguía asustado al verlo ir a alta velocidad franqueando los autos que se ponían frente a Él, iba asustado con miedo de que tuviera un accidente, lo siguió hasta que salió de la ciudad y en un terreno solitario daba vueltas como loco gritando. —Lo siento mi amor, lo siento, fui un bastardo, un mal padre contigo, perdóname, Kiara, perdóname Gritaba
NARRA ROBERT Me da miedo de lo que Danko está alterado, me parece que quiere matarse por el dolor que causo a su hija lo entiendo, pero la vida sigue, solo, debe conseguir su perdón, debe esforzarse más por ella es su hija a quien más ama, debe ser perseverante no dejarse derrumbar como lo está haciendo. Allí está dormido, parece que tiene pesadillas porque se asusta y llora, da pena ver a un hombre tan corpulento estar casi devastado y vulnerable, pero ya no sé qué hacer con Él, llame a la compañía para hacerle saber a su asistente que la dirija hasta que se recupere. Tengo ganas de ir a visitar a Kiara, pero si despierta y está solo, no obstante voy a arriesgarme, necesito hablar con ella, voy a llamar un taxi, esa moto enorme no soy capaz de manejar. Ya más tarde llegue a la clínica, entre a la habitación de Kiara y allí estaba Alessandro dormido con la mano de ella acariciando su cabello, cuando me acerque recibí la sonrisa de ella, eso me calmo, pues conmigo no está enojada, a
NARRA ALESSANDRO Cuando llegue a la clínica con mi mamá y mi hermana, note a Robert con el primo del papá de Kiara, los vi preocupados, pero agarre a Robert para preguntarle y me dijo todo lo que le paso al padre de Kiara, hasta su primo me dijo que lo había golpeado en esa arena clandestina y que estaba malherido. Le comenté a Robert de que ese hombre se merecía todo lo que le había sucedido por ser tan maldito con su propia hija, pero no me fije que también lastimaba a Robert que se fue triste de allí, entramos a la habitación de Kiara estaba despierta, pero con un semblante de preocupación la saludamos. —Hola, preciosa, ya estamos aquí para llevarte a nuestra casa Kiara la observaba feliz, pues Alessa era una mujer muy dulce y que la quería mucho, eso se lo demostró desde que la conoció y le respondió. —Gracias, señora Alessa Mara, la hermana de Alessandro, se lanzó encima de la cama para abrazarla y saludarla —Kiaraaa jajaja vamos a mi casa, ¿sabes que te quiero verdad? Sabe
La vida da vueltas por apresurado y ansioso, pues me quede dormido en la cama con Kiara, sentí que me movían con dureza, abrí los ojos con lentitud, pues todavía estaba somnoliento cuando veo a la persona que está parada allí, me asusto y me levanto de inmediato y ella hace algo que no hacía desde que era niño, me agarro de la oreja con su mano y me saco de allí. Salí tambaleante, pues todavía seguía medio dormido, llegamos a su habitación y entramos, entonces comenzó todo, pues me hablo muy enojada. —Alessandro, lo primero que te aconseje y es lo primero que haces mal, ¿por qué entraste a su habitación? Ay, mi Dios, mi mamá está muy enojada y eso es muy malo, le contesté lo más tranquilo que pude. —Mamá, yo… es que deseaba saber cómo estaba, si estaba durmiendo o no, creí que estaba Mara con ella, pues las dos se quedaron juntas, yo… no tuve malas intenciones, mamá, yo no soy de esos, me conoces muy bien y bueno la estaba mirando dormir y me venció el sueño ni cuenta me di Mi mam
NARRA KIARA No me imaginaba tanta calidez en esta familia, la madre y hermana de Alessandro me aman, todavía no conozco a su padre, pues hoy regresa de su viaje de negocios, estoy abrumada y ansiosa, ojalá no sea mal genio o le caiga mal, eso me tenía muy nerviosa a pesar de que tenía la mejor compañía en ese momento. Ya habíamos desayunado copiosamente, hubo un momento en que al tomar el zumo de naranja recordé cómo mi papá lo hacía con tanto amor para mí siempre, con su sonrisa y halagos no pude retener mis lágrimas, Alessandro lo noto de inmediato y se levantó a abrazarme diciendo. —Kiara, cálmate, por favor, lo sigues amando, es tu padre, por eso lo recuerdas en algún momento mi amor Mara se sentó a mi lado para rodearme la cintura con sus brazos diciendo —No llores Kiara, yo te quiero mucho y a tu papá le voy a pegar por hacerte llorar, ya verás La señora Alessa la reprendió diciendo —Mara, eso no se dice, ese señor es mayor que tú y no puedes faltarle al respeto La chiqui
La curiosidad me mataba, así que nos paramos afuera a escuchar, fueron conversaciones, juegos, amoríos de universidad hasta cuando el señor Alexander dijo. —Oye Danko ¿te acuerdas cuando me mandaste con ese stripper a que me lo folle? Ambos abrimos la boca de desconcierto y sorpresa, pero seguimos escuchando porque mi papá contesto —Sí, me acuerdo, pero tú… te enojaste conmigo porque no querías, di… jiste que… esos no eran tus gustos, casi me… golpeas jajaja… Ay, me duele todo mi… cuerpo Las risas eran continuas hasta que hablaron de su separación, pues el papá de Alessandro comento —Danko, cuando esa vez te dije que me enamore de Alessa te enojaste, ¿por qué fue? Nunca me lo dijiste, quiero saber, mira que ya han pasado muchos años, pero me quede con esa duda en mi corazón. —Mira Alexander, eres mi amigo, pero en ese tiempo yo… me enamoré de ti y por eso quería que probaras a algún hombre y ver si te gustaba, como me dijiste que no yo… opte por dejar eso atrás y por eso es que…