VALERIA

Siento que me echan agua caliente en el cuerpo y todo lo anterior emerge de nuevo, las sensaciones intensas, las contracciones y temblores. Trato de aguantar, quiero que se corra primero liberándome de esto, me conformo con haberlo sentido unos minutos, sin embargo, sigue dándome y dándome inclinándose para chupar uno de mis senos con dureza.

Las estocadas, empellones y embestidas se vuelven más agresivas y siento que me va a matar con la fuerza y el cuerpo grande el cual desencadena la capa de sudor en mi piel y los gemidos agudos que emite mi garganta.

—Dios así—se siente tan rico que no puedo retener mis palabras.

Le entierro los dedos en la espalda pidiéndole mas. Es tan bueno escuchar sus sonidos masculinos que no paro de alucinar y sentir millones de sensaciones que desencadena las cosas que me dice y hace mientras no deja de embestir con todo lo que tiene.

—¿Asi? —más duro me da enterrándome todo a punto de dolor.

Esto que siento es demasiado grande y no pense que fuera