–Adalet…–Zeheb, lo siento…dejé que otro hombre me tocara – dejando salir más lágrimas – ya…ya…ya no te vas a casar conmigoZeheb se acerca toma del brazo a Adalet y la hala para darle un abrazo dejando a la joven pasmada.–¿Quién ha dicho eso? – acariciando el largo y bello cabello de la joven – los preparativos no se han cancelado– ¿Eh? – levantando su carita y recibe un tierno beso en los labios – ¿Zeheb?–Ese hombre no logró lo que quería, la diosa del viento te ha cuidado – secando los ojitos de Adalet – todo sigue marchando, tú serás mi sultana tal y como los dioses lo desean – mirando ese brillo en los ojos verdes de Adalet–Zeheb – escondiendo su carita entre el pecho del sultán – tuve miedo…–Tranquila – acariciando la espalda de la joven y su cabeza para darle seguridad – lo que importa es que estás a salvo – alejando un poco a Adalet – tengo algo que hacer, pero volveré contigo– ¿Eh? ¿vas a quedarte acá? – Zeheb asienta con su cabeza, haciendo sonrojar a Adalet – está bie
–Vamos a tu habitación – ofreciendo su mano a la joven quien la tomaAl llegar el sultán lleva a la joven Adalet hacia el enorme diván que hay en la habitación, toman asiento y Zeheb empieza a contar a Adalet que Ceren siempre le molestó cuando una mujer de su harén anunciaba un embarazo, pero cuando Ayaz anunció que Defne estaba esperando fue lo que colmó la paciencia de la mujer esa, y todo porque odia a muerte a la joven, solo por ser la favorita del sultán.–Cuando Ayaz me comunicó que Defne estaba esperando, me sentí satisfecho llevaba tiempo llamándola a mi lecho porque de verdad quería un hijo de ella– ¿La quieres mucho?–Crecimos juntos, era con quien solía meterme en problemas y siempre nos castigaban a ambos – viendo una sonrisa en la joven – cuando fui coronado y se me trajeron a las doncellas para mi harén ella estaba en el grupo–Ya veo… ¿de quién era hija?–De un noble, por eso estaba en el harén, desde que vi que pertenecería a mi harén me aseguré de que tuviera lo mej
Adalet se queda boquiabierta al saber que Zeheb fue quien ayudó a la bebé que tanto adora a llegar al mundo, y siente un poco de tristeza, tanto que su expresión facial la delata Zeheb se da cuenta y la abraza.–¿Eh?–Cuando nuestro hijo nazca, yo estaré presente, lo ayudaré a nacer como hice con Aiyla–Zeheb…–Estaré en todos los nacimientos de nuestros hijos – acariciando la carita de Adalet – así que no tienes por qué sentirte mal–Lo siento…sé lo que Defne significa en tu vida, pero…–Lo entiendo – abrazando a la joven – ten presente una cosa Adalet, tú eres mi alma gemela, eres mi todo y no quiero otra sultana que no seas tú….–Ceren ¿creíste que te funcionaria esa treta?–Ayaz – mientras está en la celda con cadenas en sus muñecas, su espalda sangrante lo mismo su pecho – me duele–Claro que te duele, veinte azotes y que tu otro pecho fuera marcado…tuviste suerte, el sultán debió sentenciarte a muerte por tu blasfemia–Yo no hice nada–Eso ni tú te lo crees, bien cuando sanes v
–Pensé que lo había perdido – sonrojada–Lo encontraron en las ropas de ese hombre cuando recibió su castigo – colocándose de pie y se acerca a Adalet – ¿lo quieres?–Me gustó mucho Zeheb, ¿me lo devuelves? Por favor – recibiendo un beso en los labios…–Muy bien, gírate – la joven se gira y ve como el collar vuelve a quedar en su cuello–Gracias, Zeheb – recibiendo un beso…–Adalet– ¿Qué pasa?– ¿Qué te parecería si Defne es tu ayudante de cámara? – viendo como la joven abre sus ojitos – ella no solo es una joven mimosa, también recibió entrenamiento militar, puede cuidarte-¿Entrenamiento militar? – mirando a Zeheb con sus ojitos bien abiertos-Se supondría que ella sería general a mi servicio, pero mi madre destinó que ella fuera parte de mi harén, así que dime ¿Qué te parece?– ¡Me encantaría! – viendo como el hombre abre sus ojos impresionado – ella me agradó desde que llegué y Aiyla es tan linda ¡la adoro! – recibiendo un abrazo–Bien hablaré con ella más tarde, ahora es hora de
–¡Qué lindo! ¿en verdad tengo que decir eso?–Claro que sí alteza – dando una suave sonrisa – el sultán tiene que responder a estas palabras–Pero…–Desde que era un niño a su majestad se le enseñaron los versos de debe decir para responder a su sultana– ¿Quién inventó estos versos?–El sultán Levent, como forma de honrar el amor de la diosa del viento y del mar, él inventó los versos para su sultana y la sultana inventó los versos para él– ¡Qué lindo! – dando varios aplausos–Bien alteza, mientras usted recita estos versos y recibe respuesta del sultán tiene que hacer lo que hemos ensayado – haciendo sonrojar a la joven– ¿Tengo que estar sin nada de ropa?–Bueno es la costumbre, pero alteza si usted no se siente cómoda puede usar ropa…–Quiero usar el camisón y el velo en mi cabeza–Será todo como usted diga alteza, no queremos ofender a la diosa del viento – haciendo una reverenciaEsa noche, Aysa y Adalet son llevadas hacia un salón del palacio, previamente se les hizo tomar un
–Asya…– ¿Qué quieres? – mientras abanica su rostro– ¿Qué tanto ves?–Mi hermana es feliz – cruzando miradas con Ahmet – ¿Qué quieres?–Asya ¿Cuándo me darás tus sentimientos?–Nunca, solo nos casamos por la orden del emperador…pero olvídate de tener algo de mí–¿Nunca me amarás?– ¿Cómo amar a un mujeriego? Dime la verdad Ahmet ¿Cuántos hijos tienes por ahí?–No tengo, siempre tuve cuidado–Eso ni tú te lo crees – alejándose del general…– ¿Cuándo te darás cuenta? – dando un largo suspiroEsa noche Aysa apenas logra conciliar el sueño, viendo siempre hacia el lugar en donde su vestido nupcial espera por ser usado, dándose cuenta de que no podrá dormir al menos en ese momento se levanta de su cama y se dirige hacia la mesa en donde está su enorme espejo, sonriendo al ver las joyas que usará como ajuar nupcial, regalo de su padre menos la bella tiara adornada con esmeraldas y un bello dragón marino con ojos rojos hechos en rubí, la joven solo cuenta las horas para estar casada con Ber
–¡Alteza se ve usted tan linda! – dando varios aplausos–Gracias…Adalet– sonrojándose de golpe–Alteza va a impresionar al gran visir ¿Qué opinas Ediz?–Su excelencia se ve linda – haciendo que Aysa sonría – tío se sentirá contento–Gracias por sus palabras alteza – viendo entrar a su padre – padre…–Me complace verte vestida de ese modo Aysa – acercándose a su hija – bien es hora, vamos o el visir podría enviar por tiAl salir de la habitación del hombre, Aysa se da cuenta del cortejo de jenízaros que hacen calle de honor para ella, al bajar las escaleras ve un transporte esperando por ella así que sube y el palanquín es llevado hacia la sala del trono en donde Berat espera por su prometida, contando los minutos que quedan para ver a su querida Aysa con su traje nupcial.En la sala del trono, Zeheb espera al lado del sacerdote principal del sultanato, mientras que Berat está de pie frente a una enorme estatua del dios del mar, una alarma suena y varios tambores empiezan a sonar mient
–¿Qué pasa Zeheb?– ¿Qué te parece la vista?–Me encanta – dando una sonrisa; al bajar la vista ve varios barcos atracados en el puerto, y un enorme galeón con velas negras y en estas velas un dragón negro ha captado la atención de Adalet – Zeheb– ¿Qué pasa?– ¿Y ese enorme barco? – señalando hacia el galeón–Es mi galeón de guerra – viendo los ojitos brillantes de Adalet – ¿quieres viajar en él?– ¿Puedo?–Claro que puedes – girando a la joven y tomando sus manos – desde este momento se cuentan cinco días–Y entonces – sus nudillos son besados con cariño–Entonces estaremos casados – quedando sorprendido al sentir un beso de Adalet en sus labios, así que solo cierra sus ojos y corresponde al besoDesde la entrada de la habitación del sultán, los niños observan y adorables sonrisas se forman en sus rostros, nunca habían visto a su padre tan ilusionado y enamorado como en esos momentos, si acaso cuando iba a visitar a Defne, pero ahora que está Adalet se están dando cuenta de lo que e