Capítulo 40 “Celos”
Nahomy fue a la ventana, pero no vio a nadie, al regresar a la silla, Adela estaba al lado de la cama de Mássimo. Nahomy sonrió.
–Imaginé que era usted.
Adela sonrió.
–Nahomy ven conmigo –ambas entraron al pasillo al baño de Massimo–. No confío hablar nada cerca de las puertas.
–Sí, mis padres lo decían a cada rato.
–Ya nos recordaste del todo, entonces ya sabes que Mássimo es el albacea de una pequeña fortuna que tu padre les dejó a ti y a tu hermana. Sólo que él no confía en el marido de tu hermana.
–Sí, mi madre antes de morir nos dijo donde los podíamos conseguir, pero cuando fuimos allí sólo había escombros y cenizas.
–El
Capítulo 41 “Protegiendo a la Familia”Cristiano, se encargó del seguimiento a Alessandro. Para asombro de muchos Alessandro después de una semana de haber salido de la prisión hizo ya un movimiento y fue un gran movimiento.Un par de hombres del mundo delincuencial se encontró con él y su padre, Franco Conte, fuera de la ciudad.La policía infiltró a uno de los hombres de la agencia como un delincuente más.Después de este procedimiento fueron atrapados tanto Alessandro como los implicados en el caso de la prostitución. Entre otros cargos. Galia, Poncio y Dante se enfrentan a Marco. Dentro de un mes será el proceso público.***En medio de todo ello llegó el cumpleaños de Luciano. Nahomy y Marco se dedicaron a pr
Capítulo 42 “Valentía y honorabilidad”Marco pasó dejando a Nahomy y Luciano por la casa, después se fue al juicio público de Alessandro. Nahomy llegó a su habitación y cuando se miraba al espejo recordó todo lo bien que lo había pasado celebrando los 5 años de su hijo, con él, con Marco Polioni. Recordó sus palabras cuando le dijo “mi amor, entonces sus ojos se oscurecieron.Se fue a la habitación de la señora Adela, quién, con gran calma le preguntó:–¿Estás dispuesta a hacerlo?***Eran las 3 de la tarde. Marco junto a los abogados, ratificaron la denuncia y los abogados los cargos. Así mismo el segundón del millonario.Todos se sorprendieron al ver entrar, en el juicio, a Nahomy con Luciano en sus b
Capítulo 43 “¿Sobrino o nieto”3 días después del Primer acto público de Alessandro Conte. Ya es noche. Galia toca en la habitación de Nahomy.–¡Ah! Guardaespaldas, yo necesito hablar contigo.–Dígame Galia. Estamos hablando.–Aquí no. Ven a mi habitación, por favor.Nahomy le habló a la niñera.–Por favor, Albertina, quédese aquí con Luciano, hasta que yo regrese.–¡Ah! ¿Yo puedo ver a Luciano? –le dijo Galia. Nahomy la miró recelosa.–Siempre lo ha visto, Señora Galia –abrió del todo la puerta y Galia enterneció su rostro al mirarlo, ahora de otra forma. Y no es que ella lo mirase mal antes, sino que ahora tenía motivos para verlo de esa forma.
Capítulo 44 “Algo más que pruebas”–¿Una demanda de Paternidad? ¿Alessandro Conte? –Preguntó Marco, visiblemente molesto– para empezar Luciano es Polioni, Luciano es mi hijo desde hace un tiempo atrás, yo hice el reclamo y me fue confirmada por la madre del niño, aquí presente. Ustedes saben que con eso es más que suficiente.–Eso no estaba considerado. Aunque de todas formas la demanda exige prueba de ADN.–¿Alessandro Conte, dice ser el padre de mi hijo? –Nahomy pronunció aquella pregunta pausada y levantando una ceja, miró a los abogados. Rió sarcástica–.Nunca. Mi hijo tiene un padre. No necesita más.Marco le tomó la mano.–Mis abogados saben cómo proceder. Yo apelare, contrademandaré, buscaré amparo, o lo
Capítulo 45 “La más tonta”Un poco más tarde, Nahomy recibió un mensaje de uno de los guardaespaldas que acompaña a Marco. Le informó que estaban camino al aeropuerto a acompañar al señor Marco. Unos minutos después oyó el auto de Marco, se asomó a la ventana y con él, una hermosa rubia de voluptuosas proporciones, también bajó del auto, después que Marco le abrió la puerta. Ella se sorprendió por la forma en que Marco miró a su ventana.Nahomy sintió un pálpito extraño en su corazón, pues él nunca había hecho eso.Espero un buen rato y luego se percató que subía risueño conversando con la mujer. No entró en su recamara y no regresó a ella en toda la noche.*** ***Es domingo tempra
Capítulo 46 “Un bonito lugar”A la mañana siguiente, cuando iba camino a Mundo Polioni, Nahomy viene con la quijada apretada. Marco la mira de reojo.–Nahomy, ¿usted va a seguir mal encarada conmigo?–No se preocupe, señor Marco. Yo no tengo derecho a molestarme con usted, usted es mi jefe.–Y soy el padre de sus hijos y soy su hombre, no lo olvide.–El que parece olvidarlo es usted –Marco sonrió y se volvió a mirarla.–No puedo negar que me gusta que me cele. Me halaga.–No estoy celosa. Usted no tiene ningún compromiso conmigo para que este celosa.Marco se desvió y no siguió a Mundo Polioni, tomó camino a las afueras de Roma.–¿A dónde va? –preguntó Nahomy.–Usted es mi guardaespaldas ¿
Capítulo 47 “Bajo las olas del mar”–Es una casa de playa, mi padre se la regaló a mi madre y ella me la heredó. Aquí sólo vengo yo… ¿Y sabe Nahomy? Mi madre amaba este lugar. Para mí es un sitio sagrado. Usted es la única persona, después de mi madre y mi padre y los señores que veas aquí, claro. Les pago para que la cuiden. Pero eres la única persona ajena a ellos, que la conoce.–¿De verdad? ¿Y su familia?–Ya le dije. Esto es sagrado. Mis padres lo llamaban su nido de amor. No puedo traer aquí a cualquier persona. Desde hoy esta casa es suya. Es nuestro lugar de encuentro, nuestro sitio donde sólo habrá siempre amor.Marco se volvió a mirarla. Nahomy tenía sus ojos cristalizados. Se quedó hipnotizada con aquél l
Capítulo 48 “Es mejor la verdad”Esa mañana, después de 4 intensos meses en la mansión Polioni. Galia fue a suplicar a Nahomy.–¡Ah! Guardaespaldas, ya el tribunal dio la orden para que le hagas la prueba de ADN a Luciano y es en el laboratorio del Ministerio Público. Tú sabes lo que viene después.–Lo siento Galia, estoy es muy engorroso para el señor Marco y para mi, todos sabemos los resultados de esa prueba. Los abogados ya están preparados para el litigio en tribunales. Tanto usted como Alessandro estarán bajo el escarnio público. Y no hay peor juez que ese. Así que, prepárense.–Nahomy, es un ruego. Mira nosotros detenemos la demanda, y tú también detienes la denuncia y tus pruebas en contra de mi hijo.–Hay dos cosas por las que yo no puedo hacer es